Las víctimas de ETA piden investigar como delitos de lesa humanidad los 379 crímenes sin resolver
Las causas abiertas en la Audiencia Nacional persiguen a los dirigentes que ordenaron cometer los crímenes y a los que «no hicieron nada por impedirlo»
Las causas abiertas en la Audiencia Nacional persiguen a los dirigentes que ordenaron cometer los crímenes y a los que «no hicieron nada por impedirlo»
La asociación Dignidad y Justicia ha reclamado este viernes investigar «en toda su extensión» los crímenes de ETA como delitos de lesa humanidad al argumentar que la Constitución española garantiza esta figura penal para los 379 asesinatos de la banda terrorista sin resolver.
En un comunicado esta organización de víctimas del terrorismo agradece el compromiso de quienes han apoyado el informe del Parlamento Europeo que pidió este jueves impulsar esta investigación.
Recuerda que la Audiencia Nacional, con el apoyo de la Fiscalía, procesó por lesa humanidad en 2015, tras una querella de Dignidad y Justicia, a cuatro dirigentes etarras que lideraron la banda después de 2004, año en el que entró en el ordenamiento jurídico español el mencionado tipo delictivo.
Dignidad y Justicia considera que «el informe de la Eurocámara refuerza este procedimiento de la Audiencia Nacional y sirve como acicate para impulsar interpretaciones más extensas y acordes con la jurisprudencia europea relativa a los derechos humanos, que permitirán luchar con más eficacia contra la impunidad en España».
La asociación agradece a los partidos políticos que este jueves apoyaron la resolución de la Eurocámara por su «buena disposición hacia la fórmula iniciada por Dignidad y Justicia para perseguir los 379 crímenes de ETA que aún permanecen sin aclarar por los tribunales».
Destaca que «en estos momentos, gracias a las querellas presentadas por Dignidad y Justicia, hay varias causas abiertas en la Audiencia Nacional contra más de una veintena de jefes de la banda terrorista, investigados por las figuras delictivas de la autoría mediata por dominio y de la comisión por omisión».
Explica que las mismas «persiguen no tanto a quienes colocaron la bomba o apretaron el gatillo como a los dirigentes que ordenaron cometer el crimen o no hicieron nada por impedirlo pudiendo hacerlo por su condición de máximos responsables de la organización por ostentar el mando de la misma».
Fuente: EFE