Rufián pide más ceses a Sánchez: «Robles representa el PSOE más rancio»
El Gobierno ha hecho efectivo este martes la destitución de la directora del CNI por el escándalo del espionaje
El portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, ha interpretado como «lógico» el cese de la directora del CNI, Paz Esteban, por el presunto caso de espionaje a los políticos independentistas. Y aunque ve muy «difícil» que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, deje caer a Margarita Robles, cree que se ha generado una «situación política insostenible». «La ministra Robles representa el PSOE más conservador, más rancio», ha afirmado este martes en rueda de prensa desde el Congreso.
«Me pongo en el lugar aquellos que están sentados en el Consejo de Ministros y ven de reojo a Robles, pensarán si lo sabía o no lo sabía. Si estaba al tanto o no», ha abundado. El jefe de filas de ERC en Madrid cree que ha habido «una dejación de funciones» que hace «insostenible la situación de algunos altos cargos del Gobierno», en referencia velada a la ministra de Defensa.
Rufián ha definido a Robles como parte del PSOE que «representa a la derecha moderada de este país». Precisamente este martes, también ERC ha llevado al Parlament una moción para pedir el cese o dimisión de Robles y cuentan con que la mayoría de la Cámara catalana apoye su iniciativa.
«No va de ERC contra el Gobierno»
Rufián ha intentado limitar la crisis abierta con el caso Pegasus a una problema de «democracia». No considera que el cese de Esteban sea ninguna victoria del independentismo y en sintonía con la línea marcada por Oriol Junqueras -de no romper los lazos con el Ejecutivo- ha sostenido que «no va de ERC contra el Gobierno».
Como informó THE OBJECTIVE, sus socios en Cataluña, Junts per Catalunya, ha lanzado una ofensiva en Bruselas e insta a ERC a romper con Sánchez tras el presunto espionaje a más de 60 independentistas. De momento, la Mesa de Diálogo entre gobiernos -donde solo participaban miembros de ERC por parte de la delegación catalana- está «congelada». Y el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, aseveró que la confianza con el Gobierno «estaba a cero». No obstante, el divorcio definitivo que exige Junts no llega y la presión de ERC sobre el Gobierno recae en la continuidad de Robles.