Las empresas cercanas a la cumbre de la OTAN ordenan teletrabajar a sus plantillas
Desde el Ministerio del Interior recomiendan esta medida a causa de las restricciones que sufrirá la capital durante los días de la cumbre
Iberdrola, Endesa, American Express, El Corte Inglés, Ferrovial, Coca Cola, Ford… Todas estas empresas tienen algo en común, su sede está prácticamente al lado del recinto ferial de Madrid, que albergará entre el próximo 28 y 30 de junio la cumbre de la OTAN. Un evento que reunirá a 40 delegaciones de distintos países y para el que el Ministerio del Interior última un dispositivo que blindará la seguridad de todas las instalaciones y en definitiva, de toda la capital española. Un operativo inaudito que, tal como ha advertido este departamento, afectará a todos los madrileños de algún modo, pero sobre todo, a los que están más cerca de la que será la sede de la cumbre.
Razón por la cual algunas de estas empresas, nacionales e internacionales, con sede a escasos metros de Ifema, han dado ya orden a sus plantillas de teletrabajar durante la semana en la que la ciudad albergará la reunión de la alianza atlántica, según ha podido saber este periódico. Estas compañías, en cualquier caso, han tomado esta decisión, siguiendo las recomendaciones del Gobierno, a las que previsiblemente conforme se acerquen las fechas de la cumbre se irán sumando otras empresas.
Desde el Ministerio del Interior recomiendan teletrabajar a todos los madrileños durante los días que dure el evento de la alianza atlántica y que utilicen lo mínimo posible el vehículo privado, así como los transportes públicos, que también sufrirán importantes restricciones. Una medida que debe llevarse a cabo, sobre todo, en los puntos más cercanos donde se celebren actos de la cumbre, Ifema, y también en el centro de la capital, donde el Ejecutivo ha organizado una cena y donde, previsiblemente, se alojaran las delegaciones.
Toda precaución es poca, teniendo en cuenta las circunstancias en las que se celebra la cumbre. En pleno estallido de un conflicto y con la previsión de que esos días se convoquen numerosas protestas tanto de corte pacífico como violento, según precisan fuentes gubernamentales a este periódico. El despliegue policial será uno de los más importantes de la historia reciente: tres perímetros de seguridad, medios aéreos, 10.000 agentes repartidos por las zonas más críticas y un centro de control, integrado por decenas de autoridades —entre ellas, el Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO), que evaluará en cada momento la situación.
«Valorar los impactos»
En una circular interna, a la que ha tenido acceso THE OBJECTIVE, la multinacional American Express, con sede en IFEMA, traslada a sus empleados la decisión de no acudir a las oficinas durante la celebración de la cumbre «tras valorar los impactos en los accesos y dificultades» que pueden encontrar a la hora «de trasladarse a la oficina o volver a casa». Entre ellos, señala la empresa, está el cierre temporal de la zona de estacionamiento de vehículos, donde esta compañía, como muchas otras, tiene plazas reservadas para sus trabajadores.
La multinacional americana también subraya la cercanía geografía de sus oficinas con la Avenida de Partenón, donde tienen situada la oficina. Una vía situada frente al recinto ferial y que estará incluida dentro el triple anillo de seguridad que habrá en torno a los pabellones, tal como adelantó THE OBJECTIVE. Lo que, en la práctica, imposibilitará atravesarla.
Por último, American Express también da cuenta del riesgo que pueden correr los empleados por las «manifestaciones y protestas de grupos radicales, organizaciones pacifistas, antimilitaristas y antiglobalización, tanto nacionales como internacionales» que se prevén tanto en la cumbre como en las jornadas previas. A lo que se sumarán también importantes cortes en los transportes públicos.
Desde Endesa, unas de las principales empresas de suministro eléctrico en España, las fuentes consultadas apuntan en la misma dirección, aunque ahondan sobre todo en el problema del transporte público y los cortes de tráfico. «Viendo las restricciones de movilidad que va a haber en la Madrid y en la zona, es muy probable que salvo las posiciones esenciales en los centros de control y otras, el resto de empleados trabajarán en formato teletrabajo», explican.
Protestas
Pese a todaslasprecauciones , en cualquier caso necesarias, que está llevando a cabo el Gobierno, por el momento se tiene constancia de tres protestas convocadas por formaciones de izquierda y extrema izquierda —grupos antisistema y anarquistas— en fechas previas a este conclave internacional. Y otras tantas por parte de sindicatos como UGT, CCOO y CSIF, que están preparando actos de movilización y protesta frente a los ministerios de Asuntos Exteriores, Política Territorial y Hacienda para los días 29 y 30 de junio, coincidiendo con la celebración de la cumbre de la OTAN, según adelantó este periódico.
Aunque por ahora no hay ninguna protesta convocada, desde la Policía Nacional también se teme que las UIP, conocidos como los antidisturbios, que supondrán prácticamente un tercio del dispositivo policial en la cumbre —2.300 efectivos, procedentes de 37 unidades—, aprovechen también estas fechas para reclamar mejoras en sus condiciones salariales y laborales. En los últimos cinco años, 750 policías han dejado estas unidades.