La manifestación contra la OTAN en Madrid reúne a poco más de 2.000 personas
«La cumbre de la OTAN lanza un mensaje equivocado del papel que debe jugar España en África y hacia el Mediterráneo», denuncian los organizadores
Unas 2.200 personas, según la Delegación del Gobierno en Madrid, se han manifestado este domingo para rechazar la celebración de la cumbre de la OTAN en España y plantear una alternativa a la Alianza Atlántica, según informa Efe. Al encuentro han acudido organizaciones políticas que se encuentran dentro del Ejecutivo, como Izquierda Unida, de quien ha asistido la diputada Roser Maestro, el ex diputado Miguel Ángel Bustamente y el europarlamentario Manu Pineda. Además, entre los asistentes del PCE se encontraba Enrique Santiago, número 2 de Ione Belarra en el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030.
Además, como ya adelantó THE OBJECTIVE, esta marcha ha sido promovida, aunque en la sombra, por Unidas Podemos, a pesar del pacto con el Gobierno de no hacerlo. Así, tal y como ha podido saber este diario, desde las direcciones nacionales y federales se han enviado mensajes a los cuadros locales para fomentar la participación.
Disparidad de cifras: las organizaciones apuntan a 30.000 personas
No obstante, las cifras de asistencia según la Delegación del Gobierno en Madrid son muy inferiores a las previstas por la organización de la protesta, que había avisado de que contaría con una asistencia de en torno a 5.000 personas. Sin embargo, los organizadores apuntan a que la asistencia ha sido mucho más elevada, 30.000 personas, según sus cálculos.
En la marcha, convocada por la Asamblea Popular contra la Guerra, la Plataforma Estatal por la Paz y la Asamblea OTAN NO Madrid, los asistentes han coreado consignas como «OTAN no, bases fuera» y «gastos militares para escuelas y hospitales» y han portado pancartas con lemas como «no a la guerra».
A la cabeza de la movilización, Willie Meyer, portavoz de la Plataforma Estatal por la Paz, ha comentado a Efe que luchar por la paz se ha convertido en una «necesidad» después de que la OTAN se haya convertido en un «obstáculo» para la consecución de ese objetivo.
«La cumbre de la OTAN lanza un mensaje equivocado del papel que debe jugar España en África y hacia el Mediterráneo. Van a aprobar un concepto estratégico que es ‘360 grados OTAN’, es decir, intervenir militarmente fuera del derecho internacional en cualquier parte del mundo», ha avisado.