Ayuso vuelve a enfrentarse a Sánchez por la ubicación del futuro Centro de Salud Pública
El Gobierno creará el nuevo ente este martes en un Consejo de Ministros. Madrid cree que sería «un error estratégico» situarlo fuera de la comunidad
La Comunidad de Madrid vuelve a enfrentarse al Gobierno de Pedro Sánchez. En esta ocasión, por la ubicación del futuro Centro Estatal de Salud Pública, cuya creación se aprobará este martes en Consejo de Ministros. La intención del Ejecutivo es emplazarlo fuera de Madrid según su plan de descentralización. El consejero de Sanidad madrileño, Enrique Ruiz Escudero, considera que sería «un error estratégico» situarlo fuera de la región donde se realiza «la máxima actividad». Isabel Díaz Ayuso ya ha chocado con el Gobierno en fiscalidad, gestión de la pandemia, educación y en la aplicación del decreto de medidas de ahorro energético, cuyo recurso al Tribunal Constitucional presentará «en las próximas semanas».
Sánchez anunció la creación del Centro Estatal de Salud Pública a mediados de julio, durante el Debate sobre el estado de la Nación. Afirmó que el proceso comenzaría ese mismo mes, aunque se ha demorado hasta finales de agosto. Se abordará en el Consejo de Ministros de este martes. El presidente del Gobierno aseguró entonces que el objetivo era «mejorar la gestión de las emergencias sanitarias» para no olvidar «las lecciones de la pandemia». Una etapa en la que Ayuso ya se enfrentó al Ejecutivo por las medidas adoptadas.
La gestión de Ayuso
El anteproyecto de Ley de Creación del Centro Estatal de Salud Pública cuenta con una dotación de 9,45 millones de euros en los Presupuestos Generales del Estado (PGE). Se sometió a consulta pública en septiembre de 2021. A pesar de ello, el Gobierno no había puesto fecha al inicio del proceso, su ubicación, ni determinado quién sería su director. La ministra de Política Territorial y portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, ha confirmado este lunes en una entrevista en TVE que el Ejecutivo tiene la intención de llevarlo fuera de Madrid para que «el Estado esté en todo el territorio».
Unas declaraciones que el equipo de Ayuso ha recibido con pesar. Ruiz Escudero ha subrayado que el nuevo centro debe instalarse en una zona que «sea de apoyo para la salud pública». En su opinión, sería «un error estratégico» llevarlo fuera de Madrid, que es «donde se realiza la máxima actividad y la máxima rentabilidad». Durante una visita al Centro de Transfusiones de la Comunidad de Madrid, el consejero de Sanidad ha acusado al presidente del Gobierno de compensar favores políticos en detrimento de la operatividad.
El proyecto responde a un plan del Gobierno para descentralizar organismos dependientes de la Administración del Estado. Entre ellos, alguno de nueva creación, como es el caso del Centro de Salud Pública. Ayuso calificó el proyecto como «un ataque frontal y directo contra Madrid» y aseguró que haría todo lo que estuviese en su mano para impedirlo. La presidenta madrileña llegó a acusar a Sánchez de querer «destrozar» la Comunidad de Madrid generando «agravios» contra la región para «buscar votos» en otros territorios. El Gobierno respondió asegurando que la iniciativa serviría para construir un país «mucho más cohesionado».
Los expertos sostienen que el centro era una asignatura pendiente desde 2011, cuando en la ley General de Salud Pública se registró su necesidad para anticiparse a posibles pandemias. José Martínez Olmos, profesor de la Escuela Andaluza de Salud Pública y ex secretario General de Sanidad, ha asegurado en RNE que, a pesar de que la crisis del covid se gestionó «de manera eficiente», haber tenido antes el centro «habría ayudado a gestionarla mejor». En su opinión, ubicar su sede fuera de Madrid es un acierto porque lo importante no es la localización, sino «los medios con los que cuenta la administración».
«Autonomía funcional»
El Ministerio de Sanidad ya explicó que este centro tendrá «autonomía funcional» y se dedicará al «análisis, estudio y evaluación de políticas e intervenciones públicas». Además, tendrá funciones de asesoramiento técnico, propondrá medidas a las autoridades sanitarias y preparará y coordinará la respuesta ante situaciones de emergencia sanitaria. El ente aglutinará las competencias ahora dispersas en la materia y tendrá la función de preparar al sistema sanitario ante amenazas de carácter epidemiológico. Para ello contará con personal «de la más alta capacitación científico-técnica».
El Gobierno regional quiere que el centro se quede en Madrid, aunque fuentes gubernamentales indican a THE OBJECTIVE que la decisión de ubicarlo fuera ya está tomada. Lo que se desconoce aún es el lugar en el que se localizará finalmente. La creación del ente en el Consejo de Ministros este martes abrirá un proceso de selección al que podrán aspirar las potenciales sedes. Una comisión elaborará un informe técnico, aunque la última palabra la tendrá el Ejecutivo. En las filas socialistas creen que Ayuso vuelve a protagonizar «una pataleta» porque su estrategia es «estar en contra de todo lo que propone Sánchez».
No es la primera vez que Ayuso chocado con el Gobierno. Ya lo ha hecho en cuestiones de fiscalidad, gestión de la pandemia, política exterior y educación. La última polémica se desató a raíz de la aplicación del decreto de medidas de ahorro energético. Ruiz Escudero ha explicado que el asunto está en manos de la Abogacía General de la Comunidad de Madrid y que esperan presentar el recurso al Tribunal Constitucional «en las próximas semanas».
La oposición pide a Ayuso que deje atrás sus cuitas con el Gobierno. Le recuerdan que durante la pandemia clausuró 37 centros de Servicios de Urgencias de Atención Primaria (SUAP) y aún permanecen cerrados. El argumento fue concentrar los recursos en el hospital Isabel Zendal, especializado en pandemias. A principios de julio, la presidenta regional se comprometió a abrirlos cuando tuviese «la posibilidad». Unas semanas antes, la Consejería de Sanidad había informado de «una reestructuración» para que vuelvan a estar operativos, aunque solo 17 de ellos.