La ley trans divide a la coalición de Gobierno y al seno del propio PSOE: una exdiputada se da de baja del partido

El texto impulsado por Irene Montero está dividiendo al PSOE por el enfrentamiento entre la corriente pro-trans y la del feminismo clásico

Nueva división entre los socios de coalición del Gobierno de Pedro Sánchez, esta vez a cuenta de la ley trans abanderada por Irene Montero. El motivo es que el PSOE se ha desmarcado de Unidas Podemos y ha votado este martes prorrogar el plazo de enmiendas para el texto, posicionándose con PP y Vox. De esta forma, la ley impulsada por el Ministerio de Igualdad se retrasará al menos una semana más y no podrá estar tramitada para diciembre, tal y como deseaba Montero.

Pero el malestar por esta decisión no se ha limitado a las filas moradas, sino que ha llevado a una fuga en el propio seno del PSOE. Y es que la exdiputada socialista en la Asamblea de Madrid y primera parlamentaria trans de España, Carla Antonelli, ha solicitado darse de baja del partido por su «profunda decepción y vacío con el proceder» acerca de la ley trans.

«Prefiero ir por la calle y mirar de frente a mis compañeras/os/es trans que agachar la cabeza de la vergüenza por haberles traicionado, y lo que es peor, haberme traicionado a mí misma», ha señalado en un escrito difundido por las redes sociales.

La ley trans está provocando tensiones entre distintas facciones del PSOE. Por una parte, la corriente pro-trans, de la que forma parte Antonelli, y, por otra, la del feminismo más clásico, que encabeza la exvicepresidenta del Gobierno y presidenta de la Comisión de Igualdad en el Congreso, Carmen Calvo. La que fuera número dos de Sánchez en el Ejecutivo advirtió de que esta ley, que reconoce el derecho a la autodeterminación de género, «puede destrozar la potente legislación de igualdad» que existe en España.