Las campeonas del mundo renuncian a la Selección mientras Rubiales siga en la RFEF
Jenni Hermoso desmiente «rotundamente» que consintiera el beso y que buscara alzar al presidente
Las jugadoras de la Selección Española de Fútbol celebran el título mundialista. | Patricia Pérez Ferraro (Zuma Press)
Las 23 jugadoras que alcanzaron la gloria en Australia y otras 58 futbolistas renuncian a jugar con la Selección mientras Luis Rubiales continúe al frente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF). En un comunicado, Jenni Hermoso desmiente «rotundamente» que consintiera el beso y asegura que «en ningún caso busqué alzar al presidente», como explicó el dirigente en la asamblea. El órgano defiende a su mandamás y recuerda a las futbolistas que, como federadas, están obligadas a participar en las convocatorias. Además, anuncia acciones legales «ante la gravedad» de la nota publicada este viernes por el sindicato Futpro.
«No tolero que se ponga en duda mi palabra y mucho menos que se inventen palabras que no he dicho», subraya Hermoso en el comunicado. La futbolista alude a un texto que difundió la RFEF para intentar salvar a Rubiales. Según publicó Relevo, la campeona del mundo nunca ofreció esas declaraciones. El medio digital también contó que presionaron a la jugadora para aparecer en un vídeo con su jefe.
Entre las 81 firmantes, que manifiestan «su firme y rotunda condena ante conductas que han atentado contra la dignidad de las mujeres», se encuentran varias exjugadoras y futbolistas de diferentes clubes. También del Real Madrid, que hace unos meses se apearon de las reivindicaciones de sus compañeras. Fuentes cercanas a las futbolistas aseguran a THE OBJECTIVE que la situación ha cambiado y ahora existe «unión».
Contra Rubiales
Las jugadores exigen «cambios reales tanto deportivos como estructurales». Una petición que ya realizaron 15 futbolistas en septiembre y que motivó que la mayoría se ausentara del Mundial. «Ninguna mujer debería verse en la necesidad de contestar ante las contundentes imágenes que todo el mundo ha visto», insisten las jugadoras. La RFEF les replicado que la versión de Rubiales está contrastada «en los expedientes internos». Ha acompañado su defensa con cuatro fotos y ha recordado que «las mentiras se rebaten en los juzgados».
Las compañeras de Hermoso le habían mostrado su apoyo previamente en redes sociales. La primera fue Alexia Putellas, que posteó que la situación es «inaceptable». La portera Cata Coll también se ha pronunciado en ese sentido: «Que pena me da que 23 futbolistas no seamos las protagonistas… se acabó ! Contigo a muerte, Jenni Hermoso». Le han secundado otras jugadores como Virginia Torrecilla, Aitana Bonmatti o la autora del gol en la final, Olga Carmona.
Algunas de las futbolistas que en septiembre del año pasado protagonizaron el cisma para pedir cambios a Rubiales también se han alineado con su compañera. «Se acabó. Contigo Jenni Hermoso. Lamentable llegar a este punto para creer que las quejas de hace meses eran reales», ha escrito Patri Guijarro en Twitter. No ha sido la única, también se han pronunciado Mapi León o Sandra Paños. La propia agencia que representa a la afectada ha afirmado en un tuit que «es momento de detener los abusos».
Rubiales ha sorprendido a todos. Pese a los pronósticos, ha rechazado dimitir. Durante su intervención en la asamblea se ha presentado como víctima de una persecución y ha achacado el beso a Hermoso a la euforia. «Fue mutuo y consentido», ha asegurado el presidente de la RFEF. Algo que ha rechazado sin paliativos la campeona del mundo.
Apoyo a Hermoso
La decisión de Rubiales ha llevado al Consejo Superior de Deportes (CSD) a iniciar los trámites para llevar su polémico beso ante la justicia deportiva, que puede acabar inhabilitándolo. Se enfrenta a una suspensión que fluctúa entre los dos y los 15 años, según establece el artículo 108 de la Ley del Deporte, que entró en vigor a principios de año.
La Liga femenina de fútbol ha respondido con contundencia a la decisión de Rubiales. «¡Basta ya! Es el momento de cambiar esto para siempre», ha escrito desde la cuenta oficial del organismo. La polémica se ha llevado por delante a Rafael del Amo, presidente del Comité Nacional de Fútbol Femenino, que ha renunciado a su cargo. También han dimitido los presidentes de las federaciones de Cantabria, País Vasco, Las Palmas y La Rioja.
El delantero del Betis Borja Iglesias ha renunciado temporalmente a la Selección «hasta que las cosas cambien». Además, ha instado a que los actos como los cometidos por Rubiales «no queden impunes». La solidaridad se ha contagiado a los patrocinadores. Iberia reclama «medidas para preservar la dignidad» de las futbolistas mientras que Iberdrola afirma que cualquier actitud que «se desvíe o vaya en contra» de la defensa de ella «no tiene cabida en el mundo del deporte ni en la sociedad».
