Juan Carlos I celebra que el fallo judicial le permita ahora «nuevas apariciones públicas»
El Rey emérito publica un comunicado en el que insinúa su deseo de estar en los actos de la princesa Leonor
El archivo de la causa que tenía pendiente Juan Carlos I en Reino Unido parece que podría tener ramificaciones inmediatas. El Rey emérito español se ha congratulado este viernes por el fallo de la justicia británica, que se declaró incompetente en la denuncia por acoso presentada en su contra por su examante Corinna Larsen en un tribunal de Londres, asegurando que la decisión allana el camino a «nuevas apariciones públicas».
Unas palabras que parecen apuntar al deseo del monarca de estar presente en los diferentes actos que realizará su nieta, la princesa Leonor de Borbón, a lo largo del otoño. El primero es este mismo sábado 7 de octubre, cuando Leonor realizará su jura de bandera en la Academia General Militar (AGM) de Zaragoza, un acto que hará junto al resto de sus compañeros cadetes, a diferencia de la jura que realizó su padre, el Rey Felipe VI, en 1985, que fue individual.
Sin embargo, el día más importante llegará cuando Leonor jure la Constitución el próximo 31 de octubre en el Congreso de los Diputados, coincidiendo con el día que cumple 18 años. El monarca ya habría manifestado en privado su deseo de acudir a este acto, una idea que se refuerza ahora con este mensaje en el que habla de aparecer de nuevo en público. La única presencia confirmada por el Palacio de La Zarzuela es en la reunión estrictamente familiar en El Pardo al término de esa jornada.
Juan Carlos I: «Se ha hecho justicia»
En concreto, Juan Carlos I «se felicita por la decisión de la Alta Corte de Londres, que como era de esperar, confirma su inocencia», y allana el camino para «nuevas apariciones públicas», según un comunicado difundido por la agencia Publicis. En otro texto al que ha tenido acceso Europa Press, el padre de Felipe VI se muestra «muy satisfecho» por la resolución judicial.
«Se ha hecho justicia», ha dicho el monarca tras celebrar que los tribunales ingleses hayan «rechazado total y concluyentemente la demanda interpuesta» en su contra por Corinna, «concluyendo que la demanda no tiene perspectivas reales de éxito y, por lo tanto, no puede ni procederá a juicio«.
Juan Carlos I ha hecho hincapié en que la juez Rowena Collins Rice calificó la reclamación de Larsen de «especulativa» y «extraña» en su sentencia, señalando que la demandante no había aportado pruebas suficientes para respaldar sus alegaciones, a pesar de haber iniciado el procedimiento judicial inglés contra Su Majestad casi hace tres años.
«Su Majestad siempre ha considerado que la reclamación presentada por la demandante carece de sustancia o mérito. Su enfático rechazo de todas las acusaciones de acoso presentadas por el demandante también fue señalado por el Tribunal de Apelación en su sentencia de diciembre de 2022, y los tribunales ingleses ahora han desestimado el reclamo en su totalidad«, ha apuntado.
La juez ha concluido que el Tribunal Superior de Inglaterra y Gales carece de competencia para conocer de esta reclamación. «Esto se debe a que no se ha interpuesto contra el demandado en su país de domicilio, como es su derecho por defecto; y la demandante no me ha convencido de que tenga argumentos sólidos y defendibles de que su reclamo cae dentro de una excepción a esa regla predeterminada», ha precisado.
El Tribunal Superior de Inglaterra y Gales ha concluido que el rey emérito, Juan Carlos I, no puede ser juzgado en Reino Unido por la demanda por presunto acoso que presentó Corinna Larsen para reclamarle 126 millones de libras (unos 146 millones de euros) en concepto de daños y perjuicios.
«Mi conclusión principal es que el Tribunal Superior de Inglaterra y Gales carece de competencia para conocer de esta reclamación. Esto se debe a que no se ha interpuesto contra el demandado en su país de domicilio, como es su derecho por defecto; y la demandante no me ha convencido de que tenga argumentos sólidos y defendibles de que su reclamo cae dentro de una excepción a esa regla predeterminada», ha señalado la juez Collins Rice.