Detienen en Melilla a un yihadista excarcelado que reclutó a más de 200 terroristas
Maya Amaya estuvo encarcelado ocho años por liderar una red que captaba combatientes para «hacer la yihad»
La Policía Nacional detiene de nuevo a un hombre que había sido excarcelado en el marco de una operación contra el terrorismo realizada este lunes en Melilla. Mustafá Maya Amaya, un español de origen belga, ha sido arrestado tras ser condenado cinco años antes, en 2018, por la Audiencia Nacional por liderar una red radicada en la ciudad autónoma que reclutaba a terroristas para «hacer la yihad», donde reconoció que había enviado a más de 200 yihadistas a Siria.
Según han informado a EFE fuentes de la Policía Nacional, la operación antiterrorista se ha producido en la mañana de este lunes y ha finalizado en torno a las 13.00 horas. La investigación continúa abierta, ha informado la Policía, que por el momento descarta ofrecer más información y detalles sobre esta intervención.
Este melillense, de mediana edad y con una discapacidad que le obligaba a desplazarse en silla de ruedas, y que había sido detenido hace nueve años junto a otros cinco yihadistas, se encontraba en libertad tras haber cumplido una pena de ocho años, después de haber colaborado con la Justicia reconociendo que buscaba reclutar y enviar combatientes a países como Siria, Libia o Mali.
En la sentencia de la Audiencia Nacional de hace cinco años, los jueces calificaron a Maya Amaya como el «promotor, director y coordinador» de «una de las mayores redes de captación y envío de radicales para su incorporación a organizaciones terroristas de corte yihadista» que realizó «una incesante labor» desde 2012 «nutriendo a otras organizaciones» como el Estado Islámico o Jabhat Al Nusra, la rama de Al Qaeda en Siria.
En contacto con «musulmanes europeos»
D
Mustafá Maya Amaya se encontraba en permanente contacto con otros musulmanes europeos «a los que captaba por Internet para su desplazamiento» a países africanos, y actuaba «de forma concertada con otros individuos» para conseguir su objetivo. Además, asesoraba a los captados y «desplegaba una permanente actividad de propaganda para la causa yihadista por internet», explican fuentes de la investigación en declaraciones a EFE.
Los otros cuatro hombres, que habían sido arrestados junto a él en 2018, fueron condenados a seis años de prisión tras haber reconocido, a excepción de uno, que tenían interés en viajar a Siria «para luchar contra el régimen de Bashar Al Assad y hacer la yihad».
Respecto al cuarto hombre que no confesó, llamado Chafik J.B.A., el tribunal señaló que quedó acreditado que Maya Amaya acudió a él para que le proporcionase documentación falsa que permitiera cruzar las fronteras hacia zonas de conflicto, pero no se pudo demostrar que participase en la organización de forma estable.