La Policía descarta un encargo de Irán tras los errores en el ataque a Vidal-Quadras
Los investigadores desechan esta posibilidad por la falta de profesionalidad en la planificación del atentado
La Policía Nacional ha descartado casi por completo que detrás del intento de asesinato al exidirigente del PP y fundador de Vox, Alejo Vidal-Quadras, hubiese un encargo del régimen de Teherán por los vínculos del expolítico con organizaciones de la oposición iraní, aseguran a THE OBJECTIVE fuentes próximas a la investigación. Los agentes de la Comisaría General de Información (CGI) han despejado esta posibilidad principalmente por la falta de profesionalidad en la planificación y ejecución del ataque, impropia de un servicio de inteligencia como el del Irán.
Los sucesivos errores cometidos por los detenidos llevan a pensar a los investigadores que los implicados, sobre todo en el caso del detenido en Granada, un hombre español y seguidor del chiismo, la rama del islam mayoritaria en Irán, en el atentado contra Vidal-Quadras son, en realidad, un grupo de fanáticos, simpatizantes del régimen de los ayatolás. Una suerte de ‘lobos solitarios’ que ha obrado por fidelidad al régimen, pero sin recibir ninguna orden directa.
La moto en Zarzuela
Lo explican, señalan las fuentes consultadas, distintos hechos. El primero de ellos, según ha desvelado este miércoles THE OBJECTIVE, es que los servicios de seguridad del Palacio de la Zarzuela identificasen dos días antes del ataque a un sujeto en las inmediaciones del complejo a un hombre que conducía la misma moto que uso el sicario para huir de Nuñez de Balboa tras disparar a Vidal-Quadras. Todo ello sin una aparente causalidad, según aseguraron las fuentes consultadas. Una circunstancia que ya puso sobre aviso a las fuerzas de seguridad.
A ese movimiento fortuito se sumó la ejecución del plan, indican las mismas fuentes. El sicario, presuntamente contratado por el detenido en Lanjarón (Granada), solo realizó un disparo, que no causó la muerte del supuesto objetivo y huyo del lugar en una motocicleta que horas después apareció carbonizada en Fuenlabrada (Madrid), y de que cuyos restos los investigadores pudieron obtener el número de bastidor. Unos dígitos que condujeron directamente a uno de los detenidos, en concreto, al joven de 22 años, de Fuengirola, que figuraba como titular del vehículo.
La explanada de Lanjarón
Errónea fue también la operación de huida que trazó el supuesto planificador del atentado y seguidor del chiismo. Una vez el sicario disparó a bocajarro contra Vidal-Quadras, inició una huida a toda velocidad con un coche alquilado, que fue advertido por exceso de velocidad por las cámaras de Tráfico. No obstante, sería un mal estacionamiento lo que finalmente despertaría todas las alarmas de la Policía Nacional.
El hombre y su mujer, de origen británico, con la que convivía en un piso de alquiler en Lanjarón, dejaron aparcado el coche en una explanada cercana a su piso. Sin embargo, no podía estar en esa zona puesto que estaba siendo acondicionada para acoger esos días la Feria Agroalimentaria y de la Miel de Lanjarón. Las gestiones del Ayuntamiento para dar con el paradero de sus propietarios condujo hasta una agencia de alquiler de vehículos de Málaga, y más tarde hasta los investigadores, que acabó atando cabos sobre la implicación de estos dos individuos.
En definitiva, aseguran fuentes próximas al caso, una serie de decisiones y fallos que impiden a los expertos del CGI relacionar el atentado con el régimen de Teherán, pese a la denuncia de la víctima, quien aseguró no tenía «otros enemigos» en su declaración ante los agentes, tras ser atacado el pasado 9 de noviembre. En cualquier caso, el caso está siendo instruido por el juez Francisco de Jorge, de la Audiencia Nacional, quien investiga el intento de asesinato como terrorismo. Los agentes que lideran las pesquisas tratan de buscar lazos entre el detenido en Granada y el régimen iraní, y han realizado varios registros en viviendas.
Un cuarto implicado
Hasta ahora, la Policía Nacional ha detenido a tres personas, dos hombres y una mujer, todos de nacionalidad española excepto la última, de origen británico, en las localidades de Lanjarón (Granada) y Fuengirola (Málaga) por su presunta implicación en el atentado contra el exdirigente popular. Ninguno de los arrestados, sin embargo, es el autor material del disparo contra Vidal-Quadras. La Policía todavía busca a un cuarto implicado, de origen magrebí: el sicario al que supuestamente habrían encargado acabar con la vida del fundador de Vox, y que, según las fuentes consultadas, ya habría abandonado el país.