Vox frustra el plan de Ortega Smith para disputarle el liderazgo del partido a Abascal
La filtración de que ansiaba la presidencia y el adelanto de la asamblea dejan en fuera de juego al concejal de Madrid
El liderazgo de Santiago Abascal al frente de Vox saldrá blindado por otros cuatro años tras la Asamblea General Extraordinaria que se celebrará el próximo sábado 27 de enero. Esa es una realidad que nadie pone en duda en Bambú 12, pero que la dirección nacional vio peligrar el pasado mes de diciembre. ¿El motivo? Los prebostes conservadores intuían que el vicepresidente Javier Ortega Smith quería disputar la presidencia al dirigente vasco, así que pergeñaron una estrategia para truncar sus planes. Sin certezas. Por si acaso.
El primer paso dentro de este plan habría sido filtrar la intención de Ortega Smith de disputar la presidencia. Una información que publicó Libertad Digital y que, según fuentes cercanas a Vox, «se filtró antes de que empezara a prepararse para desgastarle», aprovechando que la polémica por su enfrentamiento con Eduardo Rubiño, concejal de Más Madrid en el Ayuntamiento, estaba reciente. Para más inri, el partido se volcó en su defensa por este incidente, de modo que una candidatura contra Abascal «hubiese sido percibida por muchos como una traición».
El encargado de orquestar la filtración habría sido «una persona de confianza» de Santiago Abascal con quien Javier Ortega Smith «no tiene para nada un buen feeling», y este último habría sido el principal sorprendido -y afectado- por esta publicación. Por eso raudo acudió a desmentirla en la red social X.
Alarmas en Bambú
El concejal en el Ayuntamiento de Madrid y diputado en el Congreso quería intentarlo, o eso pensaban en Bambú, en donde saltaron las alarmas el pasado octubre, cuando Ortega Smith advirtió de que el partido no podía convertirse en una «agencia de colocación de amigos», e instó a los dirigentes a «hacer autocrítica». Desde entonces, no ha abandonado el foco mediático: bien enfrentándose a policías durante las protestas en la calle Ferraz o protagonizando intervenciones y escenas polémicas en el consistorio madrileño. Desde la cúpula interpretaron que estaba buscando ganar popularidad entre las bases como azote de la izquierda.
Eso explicaría, además, por qué ha expresado a su entorno cercano su negativa a volver a Intereconomía, pese a la insistencia de Julio Ariza, sumamente enfadado con él. «Quiere separarse de Intereconomía para que, cuando corresponda, denunciar los vínculos entre Vox y Tizona» que se ha encargado de poner en el foco Macarena Olona, confiesan fuentes del partido en Madrid.
El adelanto
Esta maniobra habría sido ya totalmente truncada con el adelanto repentino de la Asamblea General Extraordinaria anunciado por el propio Santiago Abascal este pasado lunes. Fuentes cercanas de la cúpula aseguran que se debe a una «cuestión logística»: han querido quitarse «de encima cuanto antes» el cónclave para centrarse en las elecciones gallegas y vascas, y para evitar retrasos que puedan ser utilizados en su contra por medios de comunicación críticos. Ortega Smith y su entorno, sin embargo, han captado un mensaje muy diferente.
El adelanto imposibilita de facto articular cualquier alternativa, ya que se deben conseguir un 10% de los avales. Esto es, unos 6.000 apoyos que se habrían de lograr en poco más de dos semanas. También impide que el fiasco en las elecciones gallegas, que se da por hecho en la madrileña calle de Bambú, pase factura al candidato a la reelección. En Vox ya se ponen la tirita antes de la herida, y apuntan a que si el Partido Popular no logra la presidencia será culpa de su campaña: «Nos piden que no nos presentemos para no dividir, pero en 2020 nos presentamos, no obtuvimos representación y sacaron mayoría absoluta».
Cambios en la cúpula
Lo que saldrá de aquella asamblea será, previsiblemente, un Abascal reforzado y mejor flanqueado. El presidente de Vox incluirá algunos cambios» en su candidatura, en referencia a los miembros que en lo sucesivo integrarán el Comité Ejecutivo Nacional (CEN). La salida de Javier Ortega Smith del máximo comité de decisión es ahora mismo una posibilidad real, así como la entrada de nuevos primeras espadas como Pepa Millán, la actual portavoz parlamentaria.
Algunas voces críticas con la «bunkerización del partido», como Macarena Olona, hablan hoy por este motivo de «congreso a la búlgara» para «blindarse en el poder y no responder de los fracasos presentes y futuros», en referencia a las elecciones gallegas, vascas y, quizá, europeas, que se celebran el próximo mes de junio.