La residencia incendiada en Madrid tenía bloqueadas las salidas de emergencia
La boca de incendios situada en el pasillo principal de la primera planta no funcionaba
La Residencia Juan XXIII de Aravaca, donde se produjo el incendio | Matias Chiofalo (Europa Press)
La Residencia de Aravaca (Madrid) Juan XXIII, donde se produjo la semana pasada un incendio en el que murieron tres ancianas, tenía bloqueadas las salidas de emergencia y fallos en los sistemas contra el fuego. Así lo asegura la Cadena Ser, que ha accedido al acta de la Policía Municipal que describe las deficiencias de la residencia.
El incendio se registró el pasado domingo a las 6.50 horas con el foco en una de las habitaciones de la planta segunda del centro por causas que aún se desconocen. Dos mujeres fallecieron y otra fue trasladada en estado crítico al hospital, donde falleció este lunes.
El acta policial revela que la boca de incendios situada en el pasillo principal de la primera planta no funcionaba. Una vez activada, la manguera perdía toda la presión y dejaba de expulsar agua. Esto también lo pudieron comprobar los bomberos, que certificaron que la bomba de presión de la boca de incendios carecía de corriente eléctrica, motivo por el cual no presentaba presión en el momento de ser utilizada.
Asimismo, los agentes de la Policía Municipal de Madrid comprobaron que las dos salidas de emergencia que estaban en la primera y en la segunda planta de la residencia estaban bloqueadas, por lo que no se podían utilizar, y que tampoco había luces de emergencia y que la alarma de incendios no emitía señal luminosa ni acústica al ser accionada.
La consejera de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Fátima Matute, ha explicado este martes que en las últimas 48 horas han recibido el alta hospitalaria un total de 18 personas que resultaron heridas en el incendio. En declaraciones a los medios durante la presentación del balance de actividad del Summa 112 en 2023, la máxima responsable de la Sanidad madrileña ha trasladado sus condolencias por las tres víctimas mortales del incendio.
Según ha concretado, una persona permanece ingresa en el hospital, aunque su vida no corre peligro. «Por la edad, por la fragilidad, la cormobilidad, pues se le mantiene para estabilizarle, pero realmente esperamos que se dé de alta en breve», ha aclarado. Del resto de heridos, ha indicado, seis personas recibieron el alta este lunes y otras 12 más lo han hecho la mañana de este martes debido a su evolución favorable.
