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Marruecos halla la entrada del narcotúnel de Ceuta en una vivienda de una zona militar

Las autoridades marroquíes han identificado a varias personas implicadas y se esperan «ceses en altas instancias»

Marruecos halla la entrada del narcotúnel de Ceuta en una vivienda de una zona militar

El narcotúnel hallado por la Guardia Civil. | GC

Casi dos meses después de que la Guardia Civil hallase la salida del narcotúnel en Ceuta por el que presuntamente organizaciones criminales colaron grandes cargamentos de hachís desde Marruecos para después transportarlos a la Península por vía marítima, en el país alauí empiezan a trascender los primeros datos sobre la entrada a este pasadizo de droga de más de 50 metros. Hasta ahora, las autoridades marroquíes no habían facilitado ningún dato, más allá del trabajo que las fuerzas de seguridad y la gendarmería han ido haciendo sobre el terreno y que se podía ver desde el otro lado de la valla fronteriza. Ni siquiera si se había localizado el propio túnel, frente a los importantes avances que se registraban en la parte española.

Aun así, la ubicación de los efectivos marroquíes, que han revisado en el último mes la parte más próxima a las casas ubicadas frente al polígono del Tarajal —donde los investigadores hallaron el narcotúnel el pasado 19 de febrero en una nave abandonada desde hace dos años—, ya daba pistas sobre dónde podía estar la entrada a la cavidad, a 12 metros de profundidad. De hecho, fuentes próximas a la investigación española, dirigida por la Audiencia Nacional, señalaban que el acceso al narcotúnel se encontraba en dicha zona, controlada por el Ejército marroquí y por este motivo las pesquisas en el país vecino se llevaban con tanto sigilo. 

Un medio marroquí, Alyaoum24.com, apunta ahora precisamente en esa dirección. Este diario confirma que las fuerzas de seguridad han logrado la apertura del narcotúnel por el que se colaban los alijos de droga y explica que está ubicado «en una vivienda situada en una zona considerada como parte de un sector militar». Fruto de este hallazgo, además, la policía del país vecino ha identificado a «varias personas implicadas en la construcción y ampliación del túnel hacia territorio marroquí», que serán detenidas «próximamente», conforme avancen las pesquisas. El principal sospechoso, apunta el citado medio, tiene antecedentes por tráfico de drogas en la zona de Tetuán. 

Una empresa de Alhucemas

Al parecer, las autoridades lograron acceder a la cavidad gracias a las gestiones de una empresa de Alhucemas que desplazó a sus trabajadores hasta la zona, que lograron perforar la superficie hasta llegar al narcotúnel desde una zona conocida como Arroyo de las Bombas. Tras esta primera parte de la investigación, la Brigada Nacional de la Policía Judicial ha asumido ahora el caso. Según apunta el medio, el hecho de que el narcotúnel esté ubicado en un destacamento militar derivará en «ceses en altas instancias», además de las detenciones e interrogatorios que se llevarán a cabo relacionados con la presunta red de tráfico de droga.  

Tras estas averiguaciones, las fuentes judiciales que cita Alyaoum24.com destacan que la «coordinación» entre Marruecos y España «está en su mejor momento». Desde la Guardia Civil, distintas fuentes advirtieron a este periódico de la imposibilidad de que Marruecos no supiese donde estaba la entrada del túnel, y advertían de que se esperaba que el caso derivase en la implicación de muchas personas, algunas del más alto nivel, sobre todo por la gran obra de ingeniería que se hizo para construir el narcotúnel, para que el se habría necesitado maquinaria pesada por el diseño de la infraestructura.  

Dos años activo

El narcotúnel de 50 metros de largo que conecta Marruecos y Ceuta estuvo activo durante al menos dos años. La Guardia Civil cree que las organizaciones criminales que están detrás de esta obra de ingeniería utilizaron la galería subterránea para introducir grandes alijos de hachís desde el momento en que la nave industrial dejó de tener actividad, a comienzos de 2023, según explican a este periódico fuentes próximas a la investigación. Situada en el polígono industrial del Tarajal, limítrofe con el perímetro fronterizo, la empresa, denominada Nene, se dedicaba a trabajos de marmolería. La Guardia Civil investiga también quién es el actual propietario para saber también si estaba conectado o no con la red de tráfico de droga.

La titularidad de esas naves no está clara, han cambiado de manos muchas veces», advierten las mismas fuentes a este periódico. La investigación culminó su tercera fase con el hallazgo de este túnel por el que las organizaciones pasaban todo tipo de mercancías desde el país alauí, especialmente drogas, que después llevaban al recinto portuario para distribuirla en grandes cantidades por mar. La Guardia Civil comenzó las pesquisas tras el hallazgo de varios camiones en carreteras de Sevilla y Málaga, con miles de kilos de hachís ocultos que habían salido de la ciudad autónoma sin haber sido detectados en el puerto ceutí.

Un concejal ceutí y el narcotúnel

El instituto armado ha detenido por ahora a 14 personas comprometidas en este caso y no descarta la implicación de otras después del descubrimiento de la galería subterránea. La operación, llamada Hades, comenzó el pasado 31 de enero con la detención de dos guardias civiles de la Comandancia de Ceuta por parte de la unidad de Asuntos Internos, un concejal del Ayuntamiento de la ciudad autónoma y seis camioneros, dos de ellos familiares del citado político: Mohamed Duas, del partido Movimiento Dignidad y Ciudadanía (MDyC), que ya contaba con antecedentes por tráfico de drogas y había estado varios años en prisión.

El hermano y el sobrino del edil ceutí eran los responsables de cargar los camiones con la droga para enviarlos hasta la península. La Guardia Civil los detuvo a ambos en Málaga. Los agentes, por otro lado, tenían la función de hacer la vista gorda cuando estos camiones debían superar los controles en el puerto marítimo de Ceuta antes de embarcar; eso sí, previo pago. El 11 de enero, en una segunda fase, detuvieron a otras cinco personas, entre ellos, uno de los delincuentes más perseguidos por las fuerzas de seguridad en la ciudad autónoma por su presunta relación con el narcotráfico. Registros y arrestos que finalmente, tras dos años de investigación, llevaron a los guardias civiles a dar con la galería subterránea que conectaba Marruecos con España para introducir grandes alijos de hachís.





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