Los guardias civiles dicen estar «desbordados» ante la oleada de pateras en Almería
Víctor Vega, secretario provincial de la AUGC en Almería, explica a THE OBJECTIVE esta difícil situación
Inmigrantes rescatados en la costa almeriense. | AUGC
La Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC) ha denunciado la falta de medios humanos y materiales en Almería. Las unidades que operan en las costas de Almería se encuentran «desbordadas» ante la «inacción» de las instituciones.
Los guardias civiles en Almería solicitan la reforma del modelo policial (no como el actual, con todas las unidades territoriales abiertas 24 horas), la mejora de medios tanto en servicio marítimo como en las unidades territoriales, vehículos mampara, autobuses de traslado y medios humanos.
Todo ello, en un contexto donde las mafias consolidadas de trata de seres humanos actúan de una manera muy coordinada, sobre todo a partir de la pandemia: «Lo que estamos viendo este año en la actuación de mafias parecen maniobras militares y no es para nada el tráfico de pateras al que estamos habituados. Nos vemos desbordados, superados y hundidos», asegura Víctor Vega, secretario provincial de Almería de la Asociación Unificada de la Guardia Civil.
Las «narcopateras» que han arribado en estas últimas semanas a las costas de Almería quedan muy lejos de la capacidad que tienen las patrulleras de la Guardia Civil. Con una situación propicia de mar, las «narcopateras» pueden alcanzar los 50 nudos (alrededor de 90km/h): «Ellos año a año van mejorando».
El modus operandi ha cambiado. En ocasiones, llegan entre 4 y 8 pateras y no hay efectivos suficientes para gestionar la llegada de tantos seres humanos: «¿Por qué pedimos nosotros Fuerzas Armadas? Por el capítulo que ocurrió en Melilla, cuando fue desbordada. Se demostró que cuando están desbordadas las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, las Fuerzas Armadas sirven», asegura Víctor Vega.
Según el secretario provincial de la Asociación Unificada de la Guardia Civil en Almería, antes de 2020, llegaban una o dos pateras por semana. Ahora, la cadencia ha cambiado, hay menos llegadas pero con más pateras. Las mafias llegan a las costas dos, tres o cuatro veces al mes, introduciendo más de cuatro pateras: «En el momento en el que se presentan con un abanico de pateras, es muy difícil para nosotros dar cobertura. Y si ven que no pueden, se mueven a otra playa donde no haya efectivos. Así es imposible», afirma Víctor Vega.
La atribución de responsabilidades también se dificulta ante el tráfico de seres humanos. Según comentan a THE OBJECTIVE unidades de la Guardia Civil, las condenas antes eran insuficientes por parte del Tribunal Superior de Andalucía, el cual entendía que «no había riesgo para el inmigrante», por lo que el patrón del barco asumía unas consecuencias mínimas.
«Los tripulantes se ven obligados a cubrir al patrón por miedo a las represalias contra sus familias»
Víctor Vega, secretario provincial de Almería de la AUGC
Con el paso del tiempo, las condenas han ascendido a los seis u ocho años y a la expulsión. Sin embargo, las mafias de tráfico de seres humanos han adoptado una estrategia: «Ahora el patrón de la embarcación lleva un pasamontañas para que no sea identificado. Si llega el Servicio Marítimo, el patrón se quita el pasamontañas y se integra entre los tripulantes. De esta forma, la tripulación dice que la embarcación la han llevado entre todos y no hay ningún responsable a quien atribuir la responsabilidad. Los tripulantes se ven obligados a cubrir al patrón por miedo a represalias contra sus familias».
Según ha podido conocer THE OBJECTIVE, el pasado lunes llegó una patera de demarcación de Albuñol (Granada), que venía para Adra y se desvió, con un total de 45 inmigrantes. Ese mismo día llegaron tres pateras en la demarcación de Adra con 95 inmigrantes. Y a ello se le sumó el arribo de cuatro pateras en la demarcación de El Ejido con un total de 77 inmigrantes. Estas cifras, que reflejan la situación de un tan solo día, suponen una gran preocupación ante la falta de medios por parte de la Guardia Civil.
Víctor Vega, secretario provincial de la AUGC en Almería, cuenta cómo es la reacción de los inmigrantes llegados en patera: «Nosotros vemos que hay una calma muy tensa. Ellos cuando llegan a nuestras costas, están tranquilos y son colaboradores. Lo que ocurre es que cuando tienen que estar 8 o 12 horas esperando, se ponen nerviosos, tienen sed y hambre. Normalmente uno de ellos puede hablar español y va explicando al grupo la situación, o utilizamos el traductor para comunicarnos con ellos».
Según el secretario provincial de Almería de AUGC, las entradas irregulares en el periodo del 14 de agosto al 20 de agosto de 2023, han aumentado más de un 300% con respecto al mismo periodo en 2022. La mitad de los inmigrantes que llegan a las costas españolas son argelinos. Alrededor de un 30% subsaharianos y un 10% marroquíes. Además, en la zona Estrecho-Alborán-Este, las autoridades españolas han interceptado en este mismo periodo más de 80 embarcaciones, mientras que las autoridades marroquíes han interceptado solo cuatro.
Según la información que adelantó THE OBJECTIVE, hasta la fecha, 18.745 inmigrantes han llegado a territorio español. Las regiones donde más ha incrementado esta cifra es en Andalucía y Baleares, con un aumento del 37,1% con respecto a 2022.
