SOS Rural dice que el pacto de los regadíos del Doñana «liquidará la actividad económica»
Cree que el acuerdo es «un ERE voluntario para agricultores que en poco tiempo pasará factura al sector primario andaluz»
Juanma Moreno conversa con Teresa Ribera en el Parque Nacional de Doñana | Francisco J. Olmo
SOS Rural considera que el acuerdo alcanzado el lunes entre el Gobierno central y la Junta de Andalucía sobre los regadíos del entorno de Doñana es «perverso de fondo, ya que premia y compra la liquidación de la agricultura vistiéndola de hito histórico para una comarca que va a desmantelar su actividad productiva a medio plazo». La plataforma ciudadana que agrupa una gran cantidad de organizaciones vinculadas al sector primario de toda España afirma que asiste con enorme preocupación a un acuerdo que encarna a la perfección el modelo hacia el que se dirige la agricultura y el mundo rural en España y Europa: «primero, una hiperregulación programada que hace imposible la actividad productiva; después, la demonización de la agricultura y la ganadería, y, finalmente, ofrecer al desesperado productor una salida» que, en pocos años, dejará sin actividad comarcas enteras y contribuirá al vaciamiento poblacional.
Para SOS Rural, el acuerdo exhibido por la vicepresidenta Teresa Ribera y el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, implica «un ERE voluntario para agricultores que en poco tiempo pasará factura al sector primario andaluz» y cuyo
objetivo es acabar paulatinamente con el regadío, no sólo de la comarca, sino de toda España.
Parte del origen del conflicto procede de la legalización de los regadíos de las explotaciones agrícolas de los municipios de la Corona Norte de Doñana. La Junta admitía que gran parte éstas estaban en «un limbo jurídico». Para acabar con esta
situación, el lugar de acomodar a la ley esta actividad ancestral en la zona, la Junta y el Gobierno han acordado concluir el debate, pagar para el cese de actividad. De esta manera, los agricultores del entorno recibirán 100.000 euros por hectárea que se van a cobrar en cinco años, 20.000 euros al año. Para recibir este dinero, agricultores tendrán que dejar de cultivar sus tierras y renaturalizarlas o reforestarlas.
Es decir, para SOS Rural, los políticos «convierten la agricultura de Doñana en un jardín privado que liquida la actividad económica y la forma de vida de miles de familias». «Van a convertir una rica zona de regadío que aportaba gran valor a Andalucía y el resto de España en un jardín para excursionistas», incide este movimiento ciudadano. Y pregunta: «Y luego, qué? ¿De dónde traemos la fresa, de Marruecos? ¿Qué será de los hijos de estos agricultores? ¿Y del resto de sectores asociados a la agricultura?». SOS Rural augura un negro futuro para la comarca, con «familias algo de dinero en el banco
pero sin futuro a medio plazo para ellos y sus hijos».
Este acuerdo, según SOS Rural, es el modelo «perverso que se ha instalado en España de ir liquidando regadíos vistiéndolo de un falso ecologismo que, a la larga, liquidará nuestra agricultura y nuestra soberanía y seguridad alimentaria».
