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Andalucía

Denuncian que Almería lidera el 'petaqueo' de las narcolanchas en el Mediterráneo

La AUGC denuncia la falta de medios y personal para frenar la creciente amenaza de las mafias en Almería

Denuncian que Almería lidera el ‘petaqueo’ de las narcolanchas en el Mediterráneo

Una narcolancha tras una persecución por el Servicio Marítimo de la Guardia Civil. | Antonio Sempere (Europa Press)

La provincia de Almería se ha convertido en un punto clave para el abastecimiento de combustible de las narcolanchas que operan en el Mediterráneo, un fenómeno conocido como petaqueo, según denuncian los agentes de la Guardia Civil. La combinación de una ubicación estratégica, la rentabilidad del negocio y la insuficiencia de medios para combatir esta actividad ha facilitado la proliferación de mafias que operan con creciente impunidad en la zona.

En los últimos días, la costa de Cabo de Gata ha vuelto a ser testigo de la presencia de estas lanchas rápidas, que buscan refugio ante el mal tiempo. La imagen de estas embarcaciones en las aguas del parque natural ha generado indignación entre las autoridades locales, como el alcalde de Níjar, José Francisco Garrido, quien ha reclamado al Gobierno medidas urgentes para frenar esta situación.

Guardias civiles, pese a los esfuerzos por interceptar a estos grupos, reconocen abiertamente a THE OBJECTIVE que la falta de recursos limita su capacidad de respuesta. Según denuncian desde la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), los efectivos en la provincia no cuentan con los medios necesarios para enfrentar a las mafias, que disponen de embarcaciones más rápidas y mejor equipadas.

Según han expresado, actualmente, los agentes disponen de apenas cuatro patrulleras para vigilar los 200 kilómetros de costa almeriense, una cantidad insuficiente y que, además, como informó recientemente este medio, su capacidad se ve mermada debido a las continuas reparaciones que requieren las embarcaciones por su antigüedad.

Datos oficiales del Ejecutivo

Desde la Subdelegación del Gobierno en Almería se subraya que se han realizado avances en la lucha contra el narcotráfico. Según datos oficiales, en el último año se han incautado cerca de 45.000 litros de gasoil destinados al suministro de las narcolanchas, mientras que en los últimos tres años se han ejecutado 1.800 operaciones policiales que han derivado en la detención de 1.400 personas y la intervención de más de 300 vehículos.

Sin embargo, desde la AUGC sostienen que estos resultados se logran a costa del esfuerzo de los agentes, quienes operan en condiciones de desigualdad frente a las mafias. Además de la falta de medios materiales, también hay un déficit de personal, pues se estima que la provincia necesitaría al menos 300 agentes adicionales para reforzar las operaciones contra el narcotráfico y el tráfico de personas.

Uno de los focos de actividad más preocupantes se encuentra en Adra, donde se han identificado al menos siete embarcaderos clandestinos utilizados por los «petaqueros», encargados de suministrar combustible a las narcolanchas. La creciente presencia de estos grupos ha provocado un clima de tensión en la localidad, especialmente tras el reciente ataque a un vehículo de la Guardia Civil, que fue incendiado en un acto que se interpreta como represalia por recientes incautaciones de material.

El negocio del petaqueo y la impunidad

El suministro de combustible a las narcolanchas se ha convertido en una actividad sumamente lucrativa para las organizaciones criminales. Un solo bidón de entre 50 y 60 litros puede venderse por 300 euros, lo que convierte el petaqueo en una opción más rentable y menos arriesgada que el tráfico de drogas.

A nivel legal, la legislación vigente no tipifica el petaqueo como un delito grave, lo que permite que, en la mayoría de los casos, los infractores se enfrenten únicamente a sanciones administrativas. No obstante, recientemente el Senado aprobó una propuesta para endurecer el Código Penal y establecer penas de hasta ocho años de cárcel para quienes participen en esta actividad. La iniciativa aún debe ser aprobada en el Congreso, lo que determinará si finalmente se aplicarán sanciones más severas a estas prácticas.

Los agentes explican que el riesgo que les supone la lucha contra el petaqueo contrasta frontalmente con la poca firmeza legal que existe sobre esta operación. España sigue lidiando con importantes lagunas legales y dificultades para frenar el petaqueo, mientras que vecinos como Gibraltar han demostrado una gestión mucho más efectiva en la lucha contra esta práctica vinculada al narcotráfico. La modificación de su Ley del Petróleo en 2021 ha supuesto un endurecimiento significativo de las sanciones, con multas elevadas y penas de prisión que pueden llegar hasta la cadena perpetua en los casos más graves.

En España, las sanciones administrativas resultan insuficientes y, en muchos casos, ni siquiera llegan a cobrarse debido a la insolvencia de los infractores. Como consecuencia, muchos petaqueros han trasladado su actividad a territorio español, donde las penas son más laxas y la impunidad es mayor, evidenciando una brecha en la eficacia de las medidas adoptadas por ambos territorios.

Andalucía, en el punto de mira

El problema del tráfico de drogas y del petaqueo no es exclusivo de Almería, sino que afecta a distintas zonas del litoral andaluz. La presión en el Estrecho de Gibraltar ha llevado a las mafias a diversificar sus rutas, extendiendo su actividad a otras provincias como Huelva y Sevilla.

El Guadalquivir se ha convertido en una vía estratégica para la entrada de droga en el país, con un incremento significativo en las incautaciones de cocaína en los últimos meses. La Asociación Profesional de la Guardia Civil (JUCIL) ha alertado de que la falta de control en esta zona ha convertido al río en una «autopista de la cocaína». En este contexto, se ha propuesto la creación del primer Servicio Marítimo de Interior con base en Sevilla para reforzar la vigilancia en la zona, pero hasta el momento no se han tomado medidas concretas.

Protestas y reclamaciones de la Guardia Civil

Ante esta situación, la AUGC ha convocado una concentración en Sevilla para exigir más medios y el reconocimiento de Andalucía como una Zona de Especial Singularidad (ZES). Los agentes demandan mayores recursos y un refuerzo en las plantillas para hacer frente al narcotráfico, que sigue creciendo en la comunidad.

El delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, ha defendido el trabajo que se está realizando en la región, destacando el incremento en el número de agentes y el esfuerzo por desarticular las redes criminales. Sin embargo, desde la Junta de Andalucía y distintas asociaciones policiales se considera que las medidas implementadas hasta ahora son insuficientes.

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