La Fiscalía acusa al exnúmero 3 de Tudanca de maltrato, vejaciones y atentado a la autoridad
El Ministerio fiscal solicitará casi cuatro años de cárcel para el que fuera mano derecha del líder socialista
La Fiscalía de Soria pide tres años y nueve meses de cárcel para el exprocurador socialista por la provincia de Soria Ángel Hernández, acusado de cinco delitos, según la información publicada por el Heraldo de Soria, información de la que nos hacemos eco en THE OBJECTIVE.
Dos de ellos están relacionados con violencia machista: coacciones y maltrato hacia su expareja. Los hechos ocurrieron en febrero de este año. Hernández, que fue viceportavoz del Grupo Socialista en las Cortes y número 3 de Luis Tudanca, también está acusado de vejaciones, atentado contra la Policía y lesiones leves por agredir a los agentes durante su detención.
Además, la Fiscalía reclama una indemnización de 2.560 euros para uno de los agentes que acudió al domicilio de la pareja de Ángel Hernández y 120 euros para otro por las lesiones.
Suceso
Todo comenzó cuando Hernández fue al domicilio de su entonces pareja, golpeó la puerta con fuerza y gritó frases como: «¡Ábreme la puerta, zorra!» o «quiero hablar con mi novia, la tengo que ver por las buenas o por las malas. Esto no va a quedar así». Al escuchar los gritos, los vecinos llamaron a la Policía y efectivos de la Policía Nacional acudieron al lugar y procedieron a su detención.
Durante el arresto, Hernández intentó intimidar a los agentes con frases como: «No sabéis lo que estáis haciendo. Soy aforado, no me podéis detener».
Después de lo sucedido, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Soria lo dejó en libertad provisional, pero le prohibió acercarse a menos de 300 metros de su expareja o comunicarse con ella. Esta orden se mantuvo tras un recurso de su defensa, ya que el Juzgado encontró indicios en las declaraciones de una testigo que presenció los hechos.
Aunque la mujer supuestamente agredida, agente de Policía Nacional, no presentó denuncia, las declaraciones de una testigo que presenció los hechos fueron fundamentales para las medidas judiciales adoptadas.