Junts carga contra el 'Tezanos catalán': «Sus encuestas tienen un sesgo a favor de ERC»
Sectores del partido critican que el CEO les «infrarrepresenta» y que el último barómetro se realizó en pleno «ruido» por su salida del Ejecutivo autonómico
Jordi Turull y Laura Borràs | Europa Press
Junts per Catalunya se autoafirma en su decisión de salir del Govern. Desde varios sectores del partido consideran que la «coherencia» que han mostrado al abandonar un ejecutivo que «hace política autonomista» -en referencia a ERC- les beneficiara de cara al electorado independentista, y han lanzado el mensaje de que los sondeos del Centre d’Estudis d’Opinió (CEO) -el llamado ‘CIS catalán’- tiene «un sesgo a favor de ERC». «Hay un voto oculto a favor de Junts. Las encuestas a menudo nos infrarrepresentan», explican fuentes de los neoconvergentes consultadas por THE OBJECTIVE.
El último Barómetro de Opinión Pública del CEO, publicado el pasado miércoles 9 de noviembre, reflejaba una victoria del PSC en las elecciones catalanas si se celebraran ahora de entre 35 y 41 escaños, seguido por ERC, que obtendría entre 30 y 36. Por su parte, Junts bajaría y perdería entre 13 y 8 diputados en el Parlament, quedándose con entre 19 y 24. «No somos ingenuos. Hay una tendencia que no es positiva, pero no creemos que vayamos a sacar los resultados tan bajos que nos dan», añaden.
Si el sector que abandera Laura Borràs cree, según estas fuentes, que hay una suerte de «conspiración» contra ellos, el antiguo aparato convergente tampoco se cree la encuesta y señala que este último sondeo se realizó en plena salida de Junts del Govern y en un momento muy confuso.
Contra el director del CEO, «designado por ERC»
A este respecto, Jaume Giró, exconsejero de Economía, sostenía este lunes en una entrevista en La Vanguardia que «parece que la base con la que se hizo la encuesta está un poco sesgada en cuanto a votantes de Junts», y añadía que se llevó a cabo «en un momento que no era el mejor para Junts por todo el ruido que comportó la salida del Govern».
Algunos columnistas influyentes en la órbita del partido, como Agustí Colomines, expresidente de la Fundación CatDem vinculada a la extinta Convergència, han asumido esta tesis y han acusado directamente al director del CEO, el politólogo Jordi Muñoz, de «ser designado por ERC» en 2021 y «haber introducido nuevos criterios para elaborar y valorar el actual barómetro que no siempre aportan más argumentos para medir el estado de la opinión pública y sus efectos en las actitudes políticas».
«ERC avanza como los cangrejos»
Según el ahora columnista de El Nacional, el actual barómetro «ofrece una estimación electoral, pero no explicita qué participación prevé en las próximas elecciones». Y pronostica que la estrategia de ERC de ampliar la base mediante la atracción de un votante más izquierdista que nacionalista no surtirá efecto: «Uno de los datos más significativos de esta tercera y última ola del BOP [barómetro] es la constatación de que el 42% (…) de votantes de ERC no son independentistas».
«Teniendo en cuenta que la muestra no prevé que los republicanos aumenten el apoyo electoral que tienen ahora, pese a que puedan mantener la segunda posición al Parlament, es realmente chocante que solo un 58,2% de los votantes de ERC responda ‘un estado independiente’ a la pregunta ‘¿cómo creéis que debería ser la relación entre Cataluña y España?’. Esquerra avanza como los cangrejos», concluía.
Solo gana el PSC de Illa
En Junts están convencidos de que, en Cataluña, los indultos o la reforma de la sedición que lidera el Gobierno solo los va a capitalizar el PSC de Salvador Illa. Este lunes se ha producido la primera condena contra un independentista a tres años de cárcel por desórdenes públicos por las protestas de Tsunami Democràtic en el Aeropuerto de Barcelona. Es decir, a juicio de los neoconvergentes, sigue habiendo «represión» y las medidas del Ejecutivo central no resuelven el «conflicto político».
Desde su perspectiva, solo volviendo al compromiso de recuperar el plan independentista se puede volver a animar a los electores a confiar en las formaciones independentistas. Recuerdan que la sociedad catalana sigue estando partida en dos bloques (independentista/constitucionalista), sin apenas trasvase entre ellos. Por esta razón, ven imposible que la estrategia de ERC pueda prosperar y avisan de que, si no cambian el rumbo, lo único que ampliarán es la «abstención» del voto independentista.
