Un sector del PP recrimina a Feijóo marginar a la dirección catalana en su estrategia con Junts
La reunión cancelada «se ha estado decidiendo en Madrid. No se ha tenido en cuenta a nadie de Cataluña»
La estrategia de Feijóo sobre su relación con Junts a la hora de pedir su voto para la investidura ha levantado ampollas en el Partido Popular, a pesar de que el presidente nacional negó a THE OBJECTIVE que existieran estas diferencias: «No he percibido inquietud en mi partido», respondió en la rueda de prensa celebrada en el Congreso de los Diputados este martes, tras su reunión con el presidente de Vox, Santiago Abascal. Pero lo cierto es que su reunión frustrada, cancelada al conocer las exigencias de Puigdemont, ha extendido un malestar entre un sector de los populares catalanes, al afirmar que no han contado con ellos a la hora de diseñar esta estrategia, sobre todo en lo que se refiere a la idoneidad, o no, de sentarse con Junts.
«La reunión con Junts se ha estado decidiendo en Madrid. Si a Alejandro Fernández le han preguntado le habrá dicho que no, pero todo esto se ha decidido en Madrid, ni en Cataluña, ni se ha tenido en cuenta a nadie de Cataluña», aseguran a THE OBJECTIVE fuentes populares. «No concebimos que se pueda sentar con Junts, pero ni la gente de Cataluña, ni la de Madrid. En gran parte del partido no ha gustado nada la posibilidad de una negociación».
Este arrinconamiento de la dirección catalana, aseguran estas fuentes, entra en contradicción con la gestión que se ha hecho desde Génova de los pactos autonómicos, en los que se ha dejado la decisión en manos de las direcciones regionales, sin intervención de los dirigentes nacionales, salvo casos extremos. «Parte del error en las generales ha sido habernos dejado tan libres, si no nos hubieran dejado tan libres hubiéramos cerrado los acuerdos de gobierno como ha hecho Chivite y no habría pasado todo esto, y a lo mejor estamos gobernando. No nos pareció, no somos un partido confederal. Hemos pasado de un extremo de imponer a dejar que cada uno haga lo que quiera. Esto es una organización».
«Nos hubiera penalizado»
Estas fuentes señalan que quizás ahora Feijóo cree que es un «tema que solo le compete a él y lo gestiona Génova, y le da igual lo que diga Cataluña, que es cosa de la dirección nacional». Además, las fuentes consultadas comparten «el fondo, que no la forma» del pronunciamiento del presidente del PP de Cataluña, Alejandro Fernández, que en Twitter rechazó la posibilidad de reunirse con Junts: «JUNTS sí es mi RIVAL, un partido cuya tesis esencial es que España es una dictadura dirigida por un Rey fascista, con el que se niegan a ‘hablar’. Que alguien me diga de qué hay que ‘hablar’ con ellos…».
La satisfacción por la suspensión de la reunión es evidente entre los populares, ya que los dirigentes consultados están convencidos de que si se hubiese celebrado, «nos hubiera penalizado si hay repetición de elecciones». En este sentido, señalan que solo merecería la pena reunirse con Junts «si sacamos algún beneficio y consigue ser presidente. Pero si no iba a conseguir nada, ¿para qué quemar una carta que si tienes que ir a elecciones esto te va a penalizar? Mucha gente habría pensado que para qué vamos a votar a Feijóo si va a negociar con Junts».
La jugada de Feijóo, si se hubiera materializado, siempre según la versión de un sector de los populares, hubiera sido «muy negativa tanto en presente como en proyección de futuro, y no nos habría aportado nada sin la contraprestación de poder conseguir la investidura».
La reacción más esperada a la decisión de Feijóo de cancelar su reunión con Junts era la de la diputada Cayetana Álvarez de Toledo que, en un artículo en El Mundo, criticó este encuentro y se alineó con Alejandro Fernández. Sin embargo, este martes, al conocer la nueva posición del presidente de su partido, afirmó que Feijóo «acierta» al no reunirse con los nacionalistas catalanes.
En cualquier caso, como ya publicó THE OBJECTIVE, Feijóo tenía previsto rebajar la representación de los interlocutores del PP con Junts. No sería él el que se sentara con el grupo parlamentario, sino otro miembro del Partido Popular, aún por determinar. Tampoco la reunión se iba a celebrar a nivel de partido político, sino de grupo parlamentario, como anunció el portavoz del PP, Borja Sémper, este lunes, tras la reunión del Comité de Dirección.