UGT y CCOO rechazan los discursos de «todo o nada» y piden dar «continuidad» a Sánchez
Los sindicatos inciden en la importancia de no olvidar problemas como el cambio climático o el riesgo de pobreza
Los secretarios generales de CCOO y UGT de Cataluña, Javier Pacheco y Camil Ros, respectivamente, han confiado en que pueda haber un acuerdo para la investidura de Pedro Sánchez y así «dar continuidad» a la recuperación de derechos sociales y políticos, dejando de lado «los discursos del todo o nada».
Así lo han asegurado en declaraciones a los medios tras la tradicional ofrenda floral del partido al monumento de Rafael de Casanova, con motivo de la Diada de Cataluña del 11 de septiembre. Ros ha considerado que las últimas elecciones generales evidenciaron que Cataluña «votó en contra del fascismo y a favor de frenar un Gobierno de derecha y ultraderecha, con todos los riesgos políticos, sociales y nacionales que hubiera supuesto».
«Esperemos que pueda haber un acuerdo de gobierno para continuar el proceso de recuperación de derechos sociales, democráticos y políticos de la última legislatura», ha dicho el líder de UGT en Cataluña. «Entre los discursos del todo o nada, creemos en el camino gradual hacia el todo».
Ros ha incidido en acuerdos «importantes» como la reforma laboral, los indultos o la mesa de diálogo, a los que se debe dar «continuidad», sin olvidar también que a muchos ciudadanos «les cuesta llegar a final de mes» y hacen falta políticas al respecto.
También Pacheco se ha mostrado de acuerdo en que la formación del próximo Gobierno solo puede pasar por una mayoría «plurinacional y progresista», para «revalidar» así una coalición entre PSOE y Podemos que «garantice su agenda de reformas programáticas hacia la igualdad».
El secretario de CCOO de Cataluña ha incidido también en la relevancia de no olvidar en esta Diada desafíos como el cambio climático -«queremos países sostenibles y ciudades que puedan transitarse sin contaminación», ha dicho-, pero también el riesgo de pobreza de millones de ciudadanos en Cataluña, donde «uno de cada cuatro catalanes está en riesgo de pobreza».