Abascal regresará a Valencia con un Vox en tensión, pero clave para Mazón y Catalá
El líder de la formación participará en un encuentro con más de 1.500 simpatizantes tras diez meses de ausencia

El líder de VOX, Santiago Abascal, en un mitin del partido en Valencia. | Europa Press
Santiago Abascal regresará a Valencia este domingo 6 de abril tras diez meses de ausencia para un encuentro con más de 1.500 simpatizantes en la Feria de Valencia. En un momento crítico para Vox, que atraviesa su mayor crisis interna en la ciudad, la visita del líder nacional pretende ofrecer una imagen de cohesión y fortaleza. Pero, más allá de la comida popular con paella que se ofrecerá por 25 euros por persona, la realidad que encontrará Abascal es la de un partido con sus principales bastiones locales resquebrajados y bajo la sombra de escándalos internos.
De socio infalible a partido clave fuera del poder
La última visita oficial de Abascal a Valencia tuvo lugar el 24 de mayo del año pasado durante la campaña de las elecciones europeas. Desde entonces, ha sido el líder nacional más ausente en la Comunidad Valenciana, sin aparecer tras eventos tan devastadores como la dana de octubre o el trágico incendio de Campanar que dejó una decena de muertos. Apenas un vídeo llevando provisiones a los afectados de la dana en Arganda del Rey ha sido su único gesto hacia la región en estos últimos meses.
En mayo de 2024, mientras Abascal participaba en un mitin en Valencia, Vox era un partido sólido en las principales instituciones de gobierno de la Comunidad Valenciana. Como socio infalible del Partido Popular, aseguraba su influencia tanto en la Generalitat Valenciana como en el Ayuntamiento de Valencia.
Sin embargo, en apenas mes y medio, la situación se desmoronó. Los gobiernos autonómicos en los que Vox participaba comenzaron a colapsar, con salidas abruptas de dirigentes clave como Elisa Núñez, exconsejera de Justicia, y el recordado semblante serio de figuras relevantes como el exvicepresidente Vicente Barrera tras la decisión impuesta desde Madrid por el Comité Ejecutivo Nacional (CEN). En la actualidad, Vox se encuentra fracturado en el Ayuntamiento de Valencia. Pese a ello, ha sabido convertirse en un actor esencial que define la estabilidad tanto del presidente Carlos Mazón en la Generalitat como de la alcaldesa María José Catalá en el consistorio valenciano.
Vox, el salvavidas de Mazón en la Generalitat
La influencia de Vox en la política autonómica quedó patente hace dos semanas, cuando Carlos Mazón anunció la aprobación de los presupuestos para 2025 gracias al respaldo de la formación de Abascal. Los analistas se dividen: algunos consideran que Mazón ha cedido en exceso a Vox, mientras que otros sostienen que se trata de un ejercicio pragmático para garantizar la estabilidad en la Generalitat.
Lo cierto es que, sin estar formalmente en el Gobierno, Vox se ha convertido en un soporte crucial para Mazón, especialmente tras su gestión de la dana del 29 de octubre, que sigue generando críticas y tensiones. En medio de esta situación, el respaldo de Vox se presenta como un salvavidas para el presidente autonómico.
Catalá, atrapada en una crisis de gobernabilidad
En el Ayuntamiento de Valencia, la situación de María José Catalá es aún más delicada. Considerada por algunos como la posible sucesora de Mazón si Génova forzara su salida, se enfrenta ahora a su primera gran crisis de gobernabilidad desde que asumió el poder a mediados de 2023. La inestabilidad que sufre el consistorio no se veía desde los tiempos de Rita Barberá y Unión Valenciana en los años 90.
Todo comenzó con la publicación de las exclusivas de THE OBJECTIVE sobre un presunto caso de amaño de adjudicación pública relacionado con Juan Manuel Badenas, exportavoz de Vox. Badenas, junto con la concejal Cecilia Herrero, abandonó el grupo municipal de Vox tras la apertura de un expediente interno, lo que ha dejado al gobierno de Catalá en una situación extremadamente precaria.
Catalá anunció la necesidad de una segunda remodelación de su equipo de gobierno en menos de un mes, confiando en una improbable reconciliación entre los dos exconcejales de Vox y la dirección nacional del partido. Sin embargo, esa posibilidad parece ya descartada, especialmente tras el inicio de una investigación por parte de la Fiscalía sobre las acusaciones de corrupción que pesan sobre Badenas.
El portavoz actual de Vox en Valencia, José Gosálbez, ha reiterado que el pacto de gobierno se mantiene exclusivamente con el Partido Popular, dejando claro que Badenas y Herrero no tienen cabida en el equipo municipal. Esto sitúa a Catalá ante un dilema complejo: gobernar en solitario rompiendo con Vox, o expulsar del gobierno a Cecilia Herrero, la concejal rebelde. Ambas opciones implican graves riesgos para la estabilidad del ejecutivo municipal.
Liderazgo provincial debilitado
La crisis de Vox en Valencia no se limita al Ayuntamiento. En las Cortes Valencianas, existen fisuras que amenazan la cohesión del grupo parlamentario. Además, el partido carece de referentes sólidos a nivel provincial. Ignacio Gil Lázaro, presidente territorial de Vox en Valencia, lleva tiempo en una situación de interinidad. Él fue quien impulsó la elección de Juan Manuel Badenas y Carlos Flores como cabezas visibles de Vox en Valencia y en las Cortes. Sin embargo, ambos han sido problemáticos para el partido. El primero por la sombra de corrupción y el segundo porque el PP forzó a Vox para que dejara su acta parlamentaria en la autonomía por una sentencia de malos tratos de hacía muchos años y poder así sellar con éxito el pacto de gobierno.
Abascal, frente a un desafío monumental
La visita de Santiago Abascal este 6 de abril pretende proyectar una imagen de unidad y fortaleza. Pero las fracturas internas, la falta de liderazgo provincial y su prolongada ausencia ensombrecen su regreso. Vox sigue siendo determinante para el PP en Valencia, pero la cohesión interna del partido parece más comprometida que nunca.
Abascal tendrá que demostrar que su liderazgo sigue intacto y que Vox puede superar las divisiones locales para mantener su papel central en la política valenciana.