Los principales atentados en Europa desde 2015

El atentado perpetrado en La Rambla de Barcelona se ha registrado en la estela de una larga serie de atentados llevados a cabo en la Unión Europea desde 2015, la mayoría de los cuales han sido reivindicados por el Estado Islámico o atribuidos a este grupo.

España, aunque se había librado de esta última ofensiva yihadista, sufrió el peor atentado cometido en suelo europeo el 11 de marzo de 2004, cuando una decena de bombas estallaron en trenes de cercanías de Madrid y dejaron casi 200 muertos. El atentado fue reivindicado en nombre de Al Qaida por una célula islamista.

Muchas víctimas en Francia

En Francia, una oleada de atentados reivindicados en su mayoría por el EI dejaron 239 muertos desde principios de 2015.

El primer ataque golpeó la sede del semanario satírico Charlie Hebdo en París el 7 de enero. Perpetrado por los hermanos Cherif y Said Kouachi, dejó 12 muertos.

Dos días después, cuatro personas murieron en una toma de rehenes en un supermercado kósher de la capital. El agresor, Amedy Coulibaly, había matado en la víspera a una policía municipal. Como los dos autores del ataque contra el semanario, fue abatido por la policía.

El 13 de noviembre de 2015 Francia fue blanco del peor ataque de su historia

Un grupo de hombres armados mataron a 130 personas y hirieron a más de 350 en París, en la sala de conciertos Bataclán, en varios bares y restaurantes de la capital y cerca del Estadio de Francia. Los ataques fueron reivindicados por el EI.

El 14 de julio de 2016, un tunecino de 31 años lanzó un camión contra la multitud que celebraba la Fiesta Nacional francesa en Niza (sureste) matando a 86 personas e hiriendo a 450. El autor de la masacre, reivindicada por el EI, fue abatido por la policía.

Pocos días después, el 26 de julio, el padre Jacques Hamel, sacerdote de Saint-Etienne-du-Rouvray, en el oeste de Francia, fue degollado en su parroquia por dos yihadistas, que decían pertenecer al EI.

En los últimos meses se han producido también varios ataques contra las fuerzas del orden.

Tres ataques en el Reino Unido

El 22 de marzo cerca del Parlamento un hombre atropelló a la gente que cruzaba el puente de Westminster y luego acuchilló a un policía, con balance de cinco muertos.

El 22 de mayo, en Mánchester, un joven británico de origen libio se hizo estallar a la salida de un concierto de la cantante estadounidense Ariana Grande. 22 personas murieron y otras 116 resultaron heridas, entre ellas numerosos niños y adolescentes.

El 3 de junio, una furgoneta arrolló a un grupo de personas en el Puente de Londres. A continuación, sus tres ocupantes salieron del vehículo armados con cuchillos y empezaron a apuñalar a los transeúntes, antes de ser abatidos por la policía. El balance fue de ocho muertos y medio centenar de heridos. Los agresores, abatidos por la policía, llevaban falsos chalecos explosivos.

Las tres acciones fueron reivindicadas por el EI.

Camión ariete en Suecia

El 7 de abril de 2017 un hombre al volante de un camión de reparto se precipitó a 100km/h por Drottninggatan, una de las calles peatonales y comerciales más frecuentadas de la capital sueca, dejando cinco muertos y una veintena de heridos.

Un uzbeko de 39 años, detenido poco después del ataque, reivindicó ante el juez la autoría de un «actor terrorista». Según la policía uzbeka trató de unirse al EI en Siria en 2015.

Ataque en mercadillo de Navidad en Berlín

El 19 de diciembre de 2016, 12 personas murieron y 48 resultaron heridas cuando un tunecino utilizó un camión robado para embestir a la gente que paseaba por un mercado de Navidad en Berlín. El agresor fue abatido pocos días después durante un control policial en Italia. El ataque fue reivindicado por el EI.

Terror en Bruselas

El 22 de marzo de 2016, Bélgica sufrió el peor ataque de su historia. Dos atentados suicidas reivindicados por el EI dejaron 32 muertos y más de 340 heridos en el aeropuerto de Bruselas y en una estación de metro cercana a las instituciones europeas.

Un centro cultural y una sinagoga en Dinamarca

El 14 de febrero de 2015, un danés de origen palestino que había jurado lealtad al EI abrió fuego en un centro cultural de Copenhague donde se celebraba una conferencia sobre religión y libertad de expresión, matando a un cineasta.

Esa misma noche, atacó la sinagoga y mató a un judío que custodiaba el templo durante una celebración.

Con información de AFP