Mario Vargas Llosa, ingresado en un hospital de Madrid tras una caída
El escritor peruano nacionalizado español Mario Vargas Llosa ha sido ingresado este jueves la el hospital Ruber Juan Bravo de Madrid tras una caída sufrida esta madrugada en su domicilio en la capital española, según fuentes cercanas al escritor citadas por Efe. El autor de La ciudad y los perros permanece en observación, informa Efe. «El paciente don Mario Vargas Llosa ha sufrido una caída en su domicilio de madrugada, produciéndole un dolor intenso en la zona del glúteo y cadera izquierda», explica en un comunicado centro.
El escritor peruano nacionalizado español Mario Vargas Llosa ha sido ingresado este jueves en el hospital Ruber Juan Bravo de Madrid tras una caída sufrida esta madrugada en su domicilio de la capital española, según fuentes cercanas al escritor citadas por Efe. El autor de La ciudad y los perros permanece en observación, informa el hospital. «El paciente don Mario Vargas Llosa ha sufrido una caída en su domicilio de madrugada, produciéndole un dolor intenso en la zona del glúteo y cadera izquierda», explica en un comunicado el centro.
Los médicos han sometido al premio Nobel, de 82 años, a estudios de imagen, radiología simple y un TAC, en los que no se ha observado fractura ósea, pero sí «un importante hematoma en la región glútea izquierda y leve traumatismo craneoencéfalico, sin apreciar otras lesiones». Por ese motivo, la «recomendación del equipo médico es que el paciente permanezca en el centro, en observación, para seguimiento y evolución del hematoma», precisa el hospital.
El autor de La fiesta del chivo y Pantaleón y las visitadoras reside habitualmente en Madrid junto a su actual pareja, Isabel Preysler. Ambos visitaron el miércoles el Observatorio del Roque de los Muchachos de La Palma en el marco del proyecto «En un lugar del Universo…» del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC), que invita a figuras de la literatura hispana a conocer el día a día del personal científico-técnico del centro. Pasar un día y, sobre todo, una noche en el Observatorio de La Palma, fue una experiencia única, según ha resaltado el propio Vargas Llosa, por la riqueza de la experiencia y por lo que significa visitar el Universo y acercarse de alguna manera «a ese espacio infinito del que formamos parte».