Desalojados 300 okupas, 180 niños, de un bloque de viviendas en Alcobendas (Madrid)
Las familias residían de manera ilegal en las viviendas desde 2009, cuando quebró la empresa promotora de estos edificios
Una macrooperación policial de la Policía Nacional, con cerca de 250 agentes implicados, ha desalojado a primera hora de este viernes a 300 okupas, entre ellos unos 180 menores, de un bloque de viviendas de Alcobendas, Madrid.
En el operativo han participado agentes de la Unidad de Intervención Policial (UIP), de la Unidad de Seguridad Ciudadana, de Extranjería, de la Policía Local de Alcobendas y el equipo de vigilancia aérea, que ha contado con drones y un helicóptero. Además, ha intervenido servicios sociales y Protección Civil, entre otros, según han informado a Europa Press fuentes policiales.
En el desalojo no se han registrado incidentes, pero se han vivido momentos de tensión. El bloque de 60 viviendas okupado en su totalidad se ubica en el número 26 de la calle Francisco Largo Caballero de este municipio madrileño. Las familias residían en las viviendas desde 2009.
Los agentes de la Policía Nacional se han personado alrededor de las 6.30 horas de esta mañana y han ido llamando a las casas para que los okupas desalojaran el inmueble. Para agilizar los desalojos se han cortado al tráfico dos manzanas y en el lugar permanecen también varias unidades de Protección Civil por si hubiera que atender alguna incidencia; de hecho, una de las vecinas desalojadas ha sufrido un desvanecimiento.
La gran mayoría de los ocupantes de estas viviendas son personas de origen marroquí y de clanes familiares, y en varias viviendas, según las investigaciones policiales, se trapichea con droga, según detalla el diario El Mundo. La empresa promotora de estas viviendas quebró hace 14 años y quedaron vacías. Fue entonces cuando comenzó su okupación. Los actuales propietarios del edificio llevan varios años litigando para recuperar las viviendas.
Algunos de los inquilinos han asegurado al citado diario que el Ayuntamiento de Alcobendas les ha ofrecido sufragarles uno o dos meses de alquiler y que muchas de las familias viven solo con una ayuda pública de 480 euros. «Hay algunas familias con hasta 10 hijos y no tenemos dónde ir. Estamos empadronados y los niños van a colegios de aquí. Es injusto que nos avisen con solo una semana de antelación y este desahucio hay que pararlo», ha declarado un a mujer a El Mundo.
Los desalojados se han quejado a EFE de la «violencia policial» con la que se ha producido el desahucio, ya que dicen que los agentes han entrado «por la fuerza» rompiendo puertas y que les han tratado «como a perros».