Juan Espadas interfiere en las listas de Huelva por miedo a que uno de sus fieles se quede sin escaño
El candidato a la Junta ‘coloca’ al ex portavoz susanista, Mario Jiménez, como número cuatro en la lista pese a no obtener los votos de su agrupación provincial
«La guerra en San Vicente sigue», explican fuentes del PSOE andaluz tras la configuración de las listas provinciales que hace una semana aprobó el Comité Director del PSOE de Andalucía. Unas listas para las elecciones andaluzas del 19 de junio en las que la dirección de Juan Espadas ha intervenido en la provincia de Huelva para modificar los resultados de las primarias provinciales en los que se quedó fuera uno de sus principales apoyos en las primarias contra Susana Díaz: el portavoz de la presidencia y responsable de la estrategia del grupo socialista, Mario Jiménez, ex portavoz de Susana Díaz y cabeza de lista por Huelva en las elecciones de 2018, reconvertido al ‘espadismo’ en julio del año pasado.
Según el documento interno al que ha tenido acceso THE OBJECTIVE, la propuesta provincial no contemplaba la inclusión de Jiménez dentro de los 11 nombres de la lista que encabeza la portavoz adjunta del parlamento y miembro de la Ejecutiva nacional, María Márquez, en sustitución de Jiménez y que se votaron en las diferentes asambleas locales de las agrupaciones de la provincia. Pese a las presiones de la dirección regional, «Mario no sacó los votos y llegamos al Comité Director con una lista de Huelva no bendecida por la dirección pero conforme a lo votado en las agrupaciones». Algo que evidencia que Juan Espadas no cuenta con el control orgánico del partido, temeroso a un nuevo batacazo electoral en el mes de junio.
La sorpresa de los militantes andaluces fue cuando el Comité Director del PSOE que se reunió el pasado 28 de abril en Sevilla decidió en contra del voto adoptado en primarias y metiendo a Mario Jiménez como numero cuatro de la lista por Huelva. Una decisión que, según fuentes socialistas provinciales, atribuyen al secretario general, Juan Espadas, y al temor a un mal resultado en las elecciones andaluzas que no permita ubicar a sus fieles en un cargo público.
Cabreo generalizado por revertir las primarias
«Hay un cabreo generalizado. ¿La voz del militante no era tan importante?», se preguntan fuentes del PSOE andaluz contra una intromisión en las listas que no se producía desde el susanismo, en tiempos de una ruptura tal entre Pedro Sánchez y Susana Díaz que el secretario general intervino para purgar al susanismo y colocar cargos afines a la dirección federal que pudieran erosionar a la entonces baronesa del PSOE. Se da la paradoja de que el propio Espadas evitó confirmar la presencia de Jiménez en las listas hace días en un desayuno informativo en madrid para ser «respetuoso con los órganos de mi partido».
La injerencia para ‘colar’ a Jiménez en la lista ha obligado a retirar de la misma a Antonio Múñiz, alcalde de Aroche, que «no es de los suyos». Incluso algunos apuntan a que se ha urdido la «trampa» de colocar en el puesto numero dos a Enrique Gaviño Pazo, un concejal del Ayuntamiento de Huelva y miembro de la Ejecutiva provincial, de la máxima confianza de Mario Jiménez con quien habría pactado «retirarse y dejar que corra la lista en el caso de que no consiga entrar» el ex portavoz parlamentario de Susana Díaz.
A la espera de la Comisión de Listas
La aprobación del Comité Director del PSOE de Andalucía se remitirá ahora a la Comisión Federal de Listas para su ratificación definitiva, tal y como se recoge en el reglamento federal de los estatutos del partido. Se da la paradoja de que Espadas ha presumido de que las nuevas listas al 19 de junio llevan la bandera de la ‘renovación’ al cambiar a siete de los ocho cabezas de listas respecto a las candidaturas del 2 de diciembre de 2018. La única que repite es la actual vicesecretaria general del PSOE, Ángeles Ferriz. En contraste, llama la atención que repita uno de los cargos del susanismo que «no ha sido respaldado por los suyos» por la provincia.
