García y Ossorio mienten: el bono eléctrico hay que pedirlo, no lo ingresan automáticamente

El vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Enrique Ossorio, y la líder de Más Madrid, Mónica García, han asegurado que cobran la ayuda del bono térmico sin haberlo solicitado, asegurando que se ingresa directamente a las familias numerosas sin trámites previos. Sin embargo, faltan a la verdad, ya que para poder recibir el bono térmico, previamente sí es necesario solicitar el bono eléctrico, otra ayuda para vulnerables y que nunca se concede directamente desde la Administración.

Ambos han salido al paso de esta forma tras conocerse que cobran dicha ayuda para las familias vulnerables o en riesgo de exclusión, en especial tras el aumento en el precio de la energía. Los padres con tres o más hijos forman parte de los posibles solicitantes de este apoyo, entendido como forma de paliar el aumento en los gastos que de dan por ser más habitantes en el hogar, lo que se traduce en más gastos en alimentos o energía y más inversión en educación.

Sin embargo, los requisitos que marca la Administración a través del Ministerio para la Transición Ecológica no recogían hasta ahora un límite en las rentas (la propia Teresa Ribera ha dicho que eso va a cambiar), por lo que, siempre que se cumplían las condiciones en cuanto al número de vástagos, se podía acceder a esta ayuda en la factura.

Ossorio y García cobran los bonos térmicos y eléctricos

El Bono Social Eléctrico, ayuda previa que han solicitado para acceder al térmico, consiste en una ayuda para reducir el coste de la factura mes a mes: un 25% para los consumidores vulnerables que cumplan los requisitos establecidos (sueldo por debajo del 1,5 por el IPREM en 14 pagas, familias numerosas, pensionistas o beneficiarios del IMV). Sin embargo, las ayudas se han ampliado de forma extraordinaria hasta el 65% por parte del Gobierno hasta el 31 de diciembre de 2023.

Para todos los trámites relacionados con dinero público, se han de presentar varios documentos que certifiquen que se cumplen con las condiciones: DNI, libro de familia, documentos de los habitantes de la casa, etc. Por ello, esta ayuda tampoco se pide de forma directa, sino que se han de realizar una serie de gestiones.

Aquí es donde entra la polémica. Una vez se ingresa en la lista de beneficiarios del bono social, se pasa a cobrar automáticamente el térmico, una segunda ayuda para reducir los gastos de la calefacción o el agua caliente. La ayuda por beneficiario se abonará en un pago único anual, en su cuenta corriente, en la que tienen domiciliada la factura eléctrica, y la cuantía de la misma depende de su grado de vulnerabilidad y de la zona climática en la que se ubique su vivienda habitual.

Además, todos los ciudadanos que pasan a formar parte de esta lista son advertidos y notificados con anterioridad. Esto abre la puerta a que quien lo reciba pueda renunciar a ello si consideran que no lo necesitan o si no lo desean.

En caso de tratarse de un consumidor vulnerable severo o en riesgo de exclusión social, la ayuda se incrementa en un 60% con respecto a la que le corresponde por su zona climática.

El importe del pago del Bono Social Térmico varía, ya que depende del presupuesto del Estado y del número y condición de las personas acogidas al Bono Social Eléctrico cada año. En un primer momento, los pagos del Bono Social Térmico iban de los 25€ a los 123,94€. Sin embargo, desde 2022 es de 35 a 373,17€, tal y como recoge la página web del Ministerio para la Transición Ecológica de Teresa Ribera.

Ossorio y García, beneficiarios del bono

Tanto Ossorio como García sostienen que forman parte de los beneficiarios de las ayudas de forma automática, algo que no es cierto en vista de lo expuesto con anterioridad. Para poder acceder a este beneficio, inicialmente hay que solicitar el bono social eléctrico, apoyo para los vulnerables según los planes del Ejecutivo.

Ambos representantes han tratado de esquivar la verdad, no añadiendo que se benefician de la ayuda térmica tras pedir la eléctrica, también planteada como sistema de apoyo a los vulnerables. El acceso a estas ayudas no es un proceso automático e incluso se puede renunciar a la segunda una vez que se accede. Este sistema no es complejo, aunque Mónica García sostenga que sí, y puede hacerse hasta diez días después de recibir la notificación de que se ha accedido a la ayuda (lo que hace tambalear la versión esgrimida que aduce que no podía conocer que recibía el apoyo, pedido por su esposo).

Para ello se puede hacer de forma online o presencialmente y solo se debe aportar un escrito de renuncia con el nombre completo y DNI del beneficiario, la fecha de la renuncia y su firma.