Ayuso critica las políticas «sectarias» de Sánchez: «Quiere llevarnos a la absoluta ruina»
La lideresa madrileña considera que el Gobierno es «una máquina de empobrecer a manos llenas, una máquina de expulsar capital»
La presidenta de la Comunidad de Madrid y candidata del PP a la reelección, Isabel Díaz Ayuso, ha sostenido que el Gobierno es «una máquina de empobrecer a manos llenas» y de «expulsar capital». «¿Competimos contra Sánchez? No, es Sánchez el que compite contra España», ha lanzado.
Para Ayuso, están intentando cambiar España «por la puerta de atrás». «La quieren cambiar en todos los sentidos. Ahora estamos viendo, por ejemplo, no sé si de manera pretendida, desde luego sectaria lo es, como quieren llevarnos a la más absoluta ruina», ha señalado durante un acto de precampaña en Torrelodones, acompañada por la candidata del PP del municipio, Almudena Negro, la dirigente madrileña.
Como ejemplo, ha puesto que intenten constantemente, a través de sus «políticas trasnochadas y sectarias», que la sociedad pierda las ganas de trabajar. A su parecer, «todo lo que hacen es para que la gente no tenga estímulo, no tenga ganas, que le cueste emprender, que le cueste abrir un negocio».
En este punto, ha criticado que el Ejecutivo se permita «el lujo» de «señalar a grandes empresas». «Esta semana le ha tocado a Ferrovial, ya fue Mercadona, ya han sido todas las empresas que están entorno a Inditex… En cuanto una persona triunfa en España, en cuanto una persona tiene éxito porque se lo ha ganado, ahí entra el Gobierno para decirle que su negocio, que su empresa, le pertenece», ha lanzado.
Ayuso considera que el Gobierno es «una máquina de empobrecer a manos llenas, una máquina de expulsar capital». «Todo lo que está pasando en España es un manual perfectamente escrito para empobrecer a la sociedad, para dirigirla desde la subvención, para quitarle las ganas, para que todo dependa del Gobierno, para que todo dependa de la política, para después mantener un negociado como han hecho en otras comunidades», ha apuntado.
La factura del Gobierno la van a pagar los españoles «durante largos años» porque todo lo que hacen «lo cargan al erario público, a la deuda pública y al bolsillo de los empresarios».
Y es que ha criticado que no haya una sola institución que le ponga «los límites» al Ejecutivo «que no esté ocupada ahora mismo por un compañero de pupitre o un afín al PSOE para modificar las cifras».
«Cuando ya no hay contrapesos, cuando no hay Estado de Derecho, cuando ya la opinión de los buenos funcionarios que han entrado en las administraciones por oposición no cuenta, cuando el esfuerzo no sirve de nada, cuando el estímulo no es necesario… ¿Qué se consigue? Una sociedad empobrecida, desincentivada. Eso es lo que están buscando», ha trasladado.
Así, se ha preguntado que cómo no van a ser molestos. «Yo ya no sé si pensar que esto es un motivo de orgullo porque a nadie le apetece decir las cosas como son. Es difícil apelar a la verdad y a la realidad pero es para lo que estamos aquí», ha señalado, al tiempo que ha remarcado que «por más que le fastidie a Pedro Sánchez» hablarán de su gestión porque todo lo que él hace afecta «a todos» y todo lo que «está destrozando» va a tocar a los demás recuperarlo.