El líder de Vox, Santiago Abascal, ha reivindicado este lunes, primero de mayo, al «pueblo trabajador» que «lucha por conservar lo suyo» y ha cargado contra los sindicatos «de clase» y los partidos de la izquierda, a los que ve como los «tontos útiles» al servicio del «globalismo».
La madrileña plaza de Chamberí ha acogido este domingo una concentración convocada por Vox y su sindicato Solidaridad con motivo de este 1 de mayo, el día del Trabajador, a la que han acudido 2.500 personas, según la organización, y 700, según la Delegación del Gobierno.
Alrededor de las 12:00 del mediodía, Abascal ha llegado a la plaza por la parte del público y se ha abierto paso hacia el escenario entre la multitud, que sostenía un mar de banderas de España, del sindicato Solidaridad y pancartas como «Pedro Sánchez, traidor» o «viva la unidad de España».
Arropado por dirigentes de primera plana como el portavoz nacional, Jorge Buxadé, o el secretario general, Ignacio Garriga, el líder de Vox ha subido al atril y ha contrapuesto al «pueblo trabajador», al que ha alabado por «pelear por lo suyo», frente a «los tontos útiles de la política y el sindicalismo» que, a su juicio, están al servicio de «las oligarquías transnacionales».
«Están las oligarquías transnacionales, frías y apátridas, decadentes, derrochadoras y moralistas, a la vez que hipócritas, amas de demasiados partidos políticos, sindicatos y medios de comunicación, y está el pueblo honrado, trabajador, sencillo, esforzado, decente, que ha tenido la insolencia de pretender conservar lo suyo», ha trasladado a los presentes.
Abascal ha cargado contra «la izquierda y los sindicatos de clase», en referencia última a CCOO y UGT, por «querer dividir a la población en clases sociales», y ha prometido que, de convertirse en presidente del Gobierno, «les quitaremos las subvenciones y les pondremos en su sitio».
También les ha afeado que «sólo han salido a la calle por la sanidad en Madrid, como si la sanidad no tuviera problemas en el resto de España», al tiempo que ha mencionado el problema de las listas de espera.
Y ha criticado el «remedio para todo» de la izquierda, que en su opinión es «la subida fiscal» para «ahogar a autónomos, hacer inviables a las empresas y hacer que los asalariados tengan menos dinero para llegar a final de mes”, al tiempo que ha acusado a los partidos de ese espectro político «importar inmigrantes» y «llamar a la inmigración masiva para abaratar los salarios”, mientras la población española «se empobrece».
Abascal se ha referido a la presencia del expresidente de Estados Unidos Barack Obama en Barcelona para ver a Bruce Springsteen, a quien se le permitió «ir al centro con 20 coches por donde no pueden pasar los barceloneses» mientras los gobiernos municipales «cierran los centros urbanos» a la población.
Ha definido a la vicepresidenta y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, como la «ministra de sumar parados» y ha acusado al Gobierno de «premiar a cientos y cientos de violadores», en referencia a la rebaja de penas a agresores sexuales en aplicación de la ley del sólo sí es sí.
En su opinión, Vox es «la alternativa de los españoles que no pueden soportar cómo unos se llevan votos conservadores y patrióticos para aceptar las líneas ideológicas», en referencia al PP, y «cómo la izquierda se lleva votos de gente humilde que les entrega a una agenda globalista», en alusión a la Agenda 2030 del Gobierno de España.
El presidente de la formación ha hecho alusión a la «viñeta humorística» que el sindicato Solidaridad desplegó en Madrid y ha explicado que «no hemos comparado en esa lona a Bildu con el PP», sino a «todos los que se comen el pastel de la Agenda 2030».