Ciudadanos cumple los peores pronósticos y se hunde en la irrelevancia
Begoña Villacís se quedó en el 2,8% de los votos, muy lejos del umbral del 5% que se requería para entrar en el Ayuntamiento de Madrid
La candidata de Ciudadanos a la alcaldía de Madrid, Begoña Villacís. | Sergio Pérez (EFE)
Ciudadanos cumplió los peores pronósticos que se temían algunos dirigentes nacionales y territoriales en los últimos días: la completa desaparición del panorama autonómico y municipal. Tras el 28-M no habrá diputados ni concejales en los parlamentos regionales ni las principales ciudades del país. El dato más dramático se produjo en Madrid, donde más esperanzas tenía la formación naranja: su candidata Begoña Villacís se quedó en el 2,8% de los votos, muy lejos del umbral del 5% que se requería para entrar en el Ayuntamiento de la capital.
La vicealcaldesa saliente de Madrid fue la que dio la cara en la derrota, algo que ya daban por descontado en su equipo de campaña y en la sede nacional en los últimos días, tal y como relató THE OBJECTIVE. Visiblemente emocionada tras varios minutos de aplausos, dijo sentir «una enorme tristeza» por el resultado obtenido. «A las cosas hay que llamarles por lo que son, esto es una derrota sin paliativos, no me gusta edulcorar, la realidad es la que es y por su nombre», señaló.
«La vida no es siempre justa pero nos vamos sintiéndonos orgullosos», apuntó tras agradecer a los 40.000 madrileños que le hayan dado su apoyo. «Yo siempre he defendido que España avanza mucho más cuando estamos unidos y cuando estamos cohesionados, cuando estamos mirando hacia el futuro y no hacia la otra trinchera. Creo, sigo pensando una noche como hoy, que el centro político es absolutamente esencial», hizo hincapié sin dar pistas sobre su futuro político.
El partido centrista venía de casi dos millones de votos y 2.789 concejales en las municipales 2019. Cuatro años después, no llegó a los 315.000 apoyos al 99% del escrutinio y se quedó con 392 ediles desperdigados y sin apenas relevancia reseñable. La debacle alcanzó hasta la líder del partido centrista, la balear Patricia Guasp, que no consiguió revalidar su escaño en el Parlamento autonómico.
Las miradas se posan en Adrián Vázquez
Su futuro como portavoz nacional queda en entredicho apenas cuatro meses después de sustituir a Inés Arrimadas. A partir de ahora, las miradas de la formación liberal se posarán en su secretario general, el eurodiputado Adrián Vázquez, quien tiene unos meses de margen para intentar levantar los ánimos de aquí a las generales ante un panorama desolador.
El hundimiento fue generalizado. En las capitales de provincia solo entró en Ciudad Real con la que hasta ahora era su alcaldesa, Eva Masías, y en Segovia. Y en grandes ciudades únicamente había dos concejales en Santa Coloma de Gramanet con la candidatura del secretario de Dinamización Territorial, Dimas Gragera, y un concejal en San Sebastián de los Reyes (Madrid), donde el exciclista Miguel Ángel Martín Perdiguero, podrá decidir si pacta con el PP o con la izquierda.
Las únicas alegrías en forma de mayoría absoluta se produjeron en la localidad jienense de Porcuna, donde su alcalde y defensor del afiliado a nivel nacional, Miguel Moreno, revalidó la alcaldía con el 70% de apoyos de sus vecinos; así como en la cántabra Astillero, donde Javier Fernández Soberón revalidó su triunfo de 2019 con más apoyos que entonces: de cinco a 15 concejales.
Los ánimos en la sede nacional estaban por los suelos a medida que avanzaba el escrutinio. Un síntoma de que nadie quería dar la cara fue la aparición del vicesecretario general, Mariano Fuentes, al inicio del escrutinio para resaltar que la campaña electoral que había llevado Ciudadanos les hacía «pensar en positivo». Un puro espejismo.
El que ha sido mano derecha de Villacís en los últimos cuatro años subrayó que habían sido capaces de «reivindicar el espacio liberal» en el tablero político y también aquellas políticas «del comer, del día a día» para representar a la clase media «exprimida» y poner encima de la mesa temas como las pensiones o el acceso a la vivienda. Incluso, Fuentes afirmó que había sido «un éxito» llegar hasta el 28-M con 800 listas electorales presentadas en todo el territorio nacional que no han servido para aguantar el tipo.
Toni Roldán, cuya dimisión en junio de 2019 detonó la primera crisis interna de Ciudadanos, envió «un abrazo enorme a toda la gente extraordinaria» del partido que ha seguido luchando «hasta el final por un proyecto liberal y moderado, capaz de impulsar reformas a ambos lados del tablero y de reducir la influencia de extremos y nacionalismos excluyentes».
El economista insistió en que el proyecto centrista «sigue siendo necesario» en España antes de lamentar la «desaparición» política de Ciudadanos tras los comicios de este domingo. «Ojalá me hubiera equivocado un poco más en el diagnóstico hace 4 años» cuando renunció a todos sus cargos orgánicos.
En Castilla y León, su único diputado autonómico, Francisco Igea, criticó el impulso de Vox -«Gallardos everywhere según las primeras encuestas»- y se centró en los siguientes pasos del PP de Alberto Núñez Feijóo. «A estas alturas de la noche lo mejor que podría hacer Feijoo sería mantener su oferta para que gobierne el más votado», señaló tras la noticia de este domingo en THE OBJECTIVE. «El PSOE sería un irresponsable si no la aceptase. Es lo mejor que le podría pasar a España. Spoiler: no pasará», aventuró sin hacer ninguna referencia a Ciudadanos.
