Díaz incluye a la polémica 'Pam' entre los dirigentes de Podemos que no quiere en listas
El sector duro que colabora en la construcción de Sumar quiere vetar al equipo ministerial de Montero, desde ‘Pam’ hasta Isa Serra
La lideresa de Sumar, Yolanda Díaz, y sus principales estrategas y referentes de diferentes ámbitos (tanto del mundo sindical como de los partidos que quieren formar parte de su confluencia) empiezan a definir lo que se podría llamar una lista negra de altos cargos de Podemos que no son bienvenidos en el nuevo proyecto. Según afirman fuentes conocedoras de ese proceso, el primer nombre que forma parte de esta lista es la secretaria de Estado de Igualdad, Ángela Rodríguez Pam, así como otros miembros del equipo de Irene Montero, lo que implicaría también a dirigentes como Isa Serra.
Díaz quiere tener el control de todos los nombres que figurarán en las próximas listas de coalición que quiere liderar Sumar. Sabe, según afirman fuentes conocedoras del proceso de selección, que no se tratará de un proceso unilateral o técnicamente desde arriba. En cada territorio, Díaz se ha abierto a conversaciones y negociaciones con las formaciones referentes del espacio de la izquierda alternativa al PSOE. Mucho pesa el resultado electoral obtenido en las últimas elecciones autonómicas y municipales. Díaz sabe que, para el futuro, Sumar corre el peligro de convertirse en un archipiélago de siglas, pero de momento se impone la realpolitik.
Así, en Cataluña serán los afines a Ada Colau los que tendrán la voz cantante en las listas de Sumar, que se tendrán que depositar de aquí al próximo 19 de junio. A pesar de su derrota, los Comunes pueden presumir de haber alcanzado un 19% de votos en Barcelona, y están a la espera de los votos del extranjero, esperanzados en poder dar el sorpasso al PSC de Collboni. Colau ha anunciado el pasado martes que no encabezará la lista de Sumar por Barcelona, descartando algo que se comentaba en su propia formación, tal y como desveló hace tiempo THE OBJECTIVE. ¿Se trata del primer revés a Yolanda Díaz de una de sus aliadas? En los Comunes hay divergencia de opinión sobre esta cuestión, aunque personas muy cercanas a Colau lo niegan tajantemente.
El futuro de Irene Montero
Otro territorio clave será Valencia. Aquí Compromís quiere imponer sus nombres. Al igual que Colau, los de Baldoví, Oltra y Ribó no han logrado su objetivo de revalidar los ejecutivos locales. Es un golpe difícil de tragar, puesto que conllevará la pérdida de muchos cargos públicos, además influencia y dinero. Pero pueden poner sobre la mesa algo menos del 20% de votos en dicha comunidad. Un patrimonio que no se puede desperdiciar.
En Andalucía, Izquierda Unida y el PCE tienen mucho más arraigo territorial que Podemos, así que toda apunta a que serán ellos los que enfoquen las listas en una región estratégica que envía al Congreso más de 60 representantes. El gran problema se manifiesta en Madrid. Como desveló este diario, existen vetos cruzados para que Irene Montero, formalmente número dos de Podemos y ministra de Igualdad, se haga con un puesto noble en la lista de Sumar.
Errejón exige su cuota de poder, a raíz también del casi 20% de votos de Más Madrid en los últimos comicios de mayo (donde el líder de Más País estuvo presente en todos los mítines de campaña). Podemos, en cambio, no ha superado el umbral del 5%. Su resultado ha sido objetivamente malo, aunque la cúpula morada se ha escudado en una caída de todo el «bloque progresista». Desde el frente de Díaz han llegado a la conclusión que el adelanto complica sus planes, pero justifican a Sánchez y consideran que no cabía otra opción para intentar revalidar el Gobierno. Y avisan de que Podemos no puede llevar a la mesa de negociación ninguna «exigencia».
Una oferta ‘trampa’
Sostienen que Montero quiere defender a los suyos. Entre otras cosas para intentar llevar al Congreso un grupo de colaboradores fieles que respondan antes a ella que a Díaz. Eso es exactamente lo que Díaz quiere evitar. No puede permitirse tener un agujero negro dentro de su grupo, y sobre todo, sigue desconfiando de que los morados acaten, entre otras cosas, las directrices de campaña electoral, que ya empiezan a diseñarse entre los más fieles colaboradores de la ministra de Trabajo.
En definitiva, los más proclives al acuerdo (hay un sector que ya aconseja evitarlo) estarían dispuestos a dejar unos puestos de salida para dos o tres miembros de Podemos, incluyendo, eso sí, a Montero y Belarra, pero según una fórmula que difícilmente la dirección estatal de Podemos aceptará. Una de las fórmulas que se manejan, sin duda no es la única, apunta a excluir a Montero de la lista electoral de Madrid, para que se centre como cabeza de lista en otra plaza.
Circula el nombre de Toledo, que elige a seis diputados. Puede que no sea el único destino para Irene Montero en lo que, por otro lado, tiene cierto sabor a destierro de la actual número dos del partido. Las fuentes consultadas admiten esta posibilidad. Recuerdan que la relación entre Díaz y su entorno y Belarra no es la misma que con Montero, por lo que la lideresa de Sumar podría trasladar su disponibilidad a ofrecer a Belarra, que es la secretaria general de Podemos, un puesto en Madrid, a cambio de Irene Montero dé un paso a un lado. La narrativa que quieren ofrecer es la de generosidad hacia los morados.
Pam, Sierra y Echenique
En lo que, en cambio, todo apunta a que Díaz no quiere ceder es en las segundas filas. Todas las miradas se dirigen hacia Ángela Rodríguez Pam. La secretaria de Estado mantiene desde hace mucho tiempo un choque con Díaz, vinculado a los equilibrios políticos gallegos. Pero sobre todo representa un perfil del que en Sumar no tienen dudas de que «restaría» en los próximos comicios. La falta de un mea culpa con lo ocurrido con la ley del sí es sí es lo que más pesa sobre su candidatura. Y Díaz no quiere perder más votos en Galicia, su región, donde lleva meses tejiendo ya sus alianzas, y donde ya tiene los nombres de los futuros cabezas de listas.
La profesora Marta Lois ya ha sido nombrada presidenta del Movimiento Sumar, el nuevo partido que Díaz logró registrar en tiempo récord el pasado miércoles. Pero fuentes conocedoras de la campaña de fichajes en Galicia también destaca nombres de posibles referentes y cabezas de listas, como Rubén Pérez, en Vigo, y David Bruzos, en Orense. También se prevén personas vinculadas a Izquierda Unida y Comisiones Obreras, además de Antón Gómez-Reino, quien formó parte del grupo de afines a Iglesias, pero que paulatinamente se ha pasado al bando de Díaz. Esto significa que la lideresa de Sumar ya tiene casi finiquitado el mapa de las listas para Galicia, y en él las fuentes consultadas aseguran que no figurará Pam.
Pero es todo el equipo ministerial de Montero el que, según varias fuentes consultadas, estaría en la diana de Yolanda Díaz. Esto significa incluir a Isa Serra, que ejerce el cargo de asesora. Y también Pablo Echenique, oficialmente portavoz parlamentario de Podemos, pero conocido entre los aliados de Díaz como un «soldado» a las órdenes de Iglesias. Echenique entraría como Pam en el listado de dirigentes de Podemos con quien Díaz y sus aliados no quieren contar si, ya en contra de unos cuantos pronósticos, finalmente alcanzan un entendimiento de aquí al viernes 9 de junio, última fecha para registrar la coalición para el 23 de julio.