El PP ve «muy difícil» apoyar al PSC en Barcelona y facilitará que Trias sea alcalde

El Partido Popular en Cataluña considera «muy difícil» que los cuatro concejales en el Ayuntamiento de Barcelona apoyen el próximo día 17 al candidato socialista Jaume Collboni para convertirse en el futuro alcalde de Barcelona, según las fuentes populares consultadas por THE OBJECTIVE. Esta formación política se enfrenta a una difícil disyuntiva como es permitir que gobierne el candidato socialista, que posteriormente pactará con Ada Colau su entrada en el gobierno municipal; o facilitar el camino de Xavier Trias, de Junts, arriesgándose a que lo señalen por dar su respaldo a un candidato independentista. La posición final todavía no se ha decidido, pero la opinión mayoritaria podría decantarse porque los cuatro concejales del PP voten a Sirera.

La opción que cada vez cuenta con más adeptos en el seno de esta formación política es que Daniel Sirera, número uno del Partido Popular, que ha conseguido duplicar la representación, de 2 a 4 ediles, no apoye a ninguno de los dos, con lo que se mantendría en una posición neutral. Esta decisión sí que permitiría a Trias ser alcalde si en la primera votación no consigue mayoría absoluta, ya que en segunda saldría la lista más votada, que lidera el candidato de Junts, que ha conseguido 11 concejales. la segunda fuerza más votada fue el PSC con 10, seguida de los comunes de Ada Colau con 9, 5 ERC, PP 4 y Vox 2 . La mayoría absoluta son 21 concejales.

«La mayoría del partido en Barcelona cree que debe de mantenerse a Sirera, votarnos a nosotros, porque no se puede apoyar a nadie», señalan a THE OBJECTIVE estas fuentes. «Nadie quiere un ayuntamiento independentista, pero tampoco se quiere a Colau porque la ciudad está destrozada», insisten. El temor a que Colau entre en el gobierno municipal es el principal freno que lleva a los populares a resistirse a dar su apoyo a Junts y lo que está complicando la toma de una decisión final que cada vez está más madurada.

«Carta blanca» a Sirera

Estas dudas llevaron al líder de los populares en Barcelona, Daniel Sirera, a reunirse en Génova el pasado lunes con miembros de la dirección nacional del PP, estando acompañado por la eurodiputada Dolors Montserrat, que además forma parte del Comité de Dirección que preside Alberto Núñez Feijóo, en su calidad de portavoz en el Parlamento europeo. Feijóo ha dado autonomía a los líderes locales y autonómicos para que tomen sus propias decisiones, pero en Barcelona la situación es extremadamente complicada.

Sirera tiene «carta blanca» desde la dirección nacional en una «situación muy complicada», ya que como dijo Feijóo en la campaña electoral, en Barcelona la opción es «susto o muerte». En este sentido, fuentes populares afirman con ironía que «lo mejor es susto, pero no con Colau».

Sirera supedita su voto a Collboni a que Ada Colau no entre en el gobierno municipal, pero el candidato socialista ha admitido que, después de las elecciones generales, seguramente formará parte de su equipo ante la imposibilidad de gobernar en minoría. Ante esta tesitura, a los populares se le plantea el problema de que no quieren hacer alcalde a Trias, independentista de Junts, que sería la segunda opción. Llegados a este punto, los populares catalanes están esperando algún movimiento del PSC para que les aseguren que no van a contar con Colau. El PP de Cataluña sostiene que puede gobernar en minoría con apoyos puntuales.

Los populares creen que con Collboni se podría llegar a algún tipo de entendimiento, pero no con Colau. Otra teórica opción podría ser aceptar a los comunes, pero sin Colau, alternativa que esta formación política no contempla; pero también en el seno del PP se admite que el resto de la lista está integrada por un «comunismo muy radical» con el que sería muy difícil entenderse.