Los verdes alemanes entran en la campaña del 23-J y piden el voto para Yolanda Díaz
Eurodiputados de los verdes respaldaron a Sumar en su lanzamiento en abril y ahora piden directamente votar a Díaz
El partido verde alemán, que en las últimas elecciones europeas logró más votos que el SPD, se ha decantado a lo largo de estas semanas por pedir el voto para Yolanda Díaz. Representantes de esta formación, entre ellos la vicepresidenta del grupo de los verdes europeos, han ‘rebotado’ en las redes sociales su apoyo para la candidata de Sumar. Díaz y otros representantes de Sumar llevan meses acercándose a los ecologistas europeos, de quien recuperan incluso propuestas programáticas, como la de eliminar vuelos nacionales con una alternativa en tren de menos de 3 horas.
La copresidenta del Partido Verde Europeo, Melanie Vogel, acudió el pasado 3 de abril a la presentación de Sumar en Madrid. La eurodiputada francesa, considerada uno de los rostros más conocidos del grupo de los verdes europeos, rebotó en las redes sociales la imagen de un abrazo con Yolanda Díaz, acompañada por un mensaje que rezaba: «Estamos listos para apoyar a Sumar, un proyecto político que trabaja para mejorar la vida de las personas e impulsa una transición verde justa bajo el liderazgo de Yolanda Díaz, una mujer fuerte e inspiradora».
No ha sido el único mensaje público de apoyo a Díaz. Hace pocos días, la alemana Terry Reintke, otra figura destacada de los verdes europeos, en cuyo grupo ejerce de coportavoz en la Eurocámara, también difundió un vídeo de apoyo a Díaz. Reintke se grabó con decenas de cargos de los verdes alemanes del land de Renania-Palatinado (4 millones de habitantes), afirmando que estaban «cruzando los dedos» para que Sumar obtenga un buen resultado en los comicios del 23 de julio.
Eliminar la ruta aérea Madrid-Barcelona
El apoyo público de los verdes europeos sirve a Díaz para presumir de conexiones europeas y para reivindicar su compromiso con las políticas ecologistas. El pasado lunes, el portavoz Ernest Urtasun aprovechó una rueda de prensa en Cádiz para difundir el compromiso de su partido de eliminar los vuelos nacionales para trayectos inferiores a las tres horas si existen alternativas ferroviarias. Esto significaría, de acuerdo con la promesa electoral, que Sumar aboga por anular rutas aéreas como la de Barcelona y Madrid, entre otras.
Sumar centra el tiro también en los jets privados, que según Urtasun se han convertido en «un problema climático muy importante en España». Además, la coalición de izquierdas aboga por impulsar «el despliegue de los trenes nocturnos». A la vez, quieren establecer «una tasa creciente sobre los viajes frecuentes en avión que entraría en vigor a partir del segundo vuelo anual».
Según Sumar, las emisiones contaminantes han aumentado en Europa un 34% desde 2005, y su compromiso busca frenar esta escalada para hacer frente a la «emergencia climática» con medidas «valientes». Entre ellas, también propone implantar una tasa al combustible de la aviación para evitar lo que califican de «dumping económico» del avión frente a los medios de transportes terrestres.
Los anuncios ecologistas de Sumar llegan en el mismo día en que también los socialistas han intentado apelar al voto verde. Los socialistas escenificaron el lunes un traslado de la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, en bicicleta al cumbre del clima de Valladolid, acompañada por algunos de sus colaboradores -algunos de ellos en coches oficiales en el mismo grupo de la ministra-. En este sentido, llama la atención el respaldo de los verdes alemanes a Sumar.
En el tablero político de ese país los ecologistas pugnan por el liderazgo de la izquierda con el SPD, pero desde posiciones al mismo tiempo más izquierdistas y más liberales que los socialdemócratas. Este enfoque transversal es exactamente lo que busca Yolanda Díaz en su planteamiento a medio y largo plazo. Según las últimas encuestas, el presidente del SPD y canciller, Olaf Scholz, está en caída libre en los sondeos, a tres puntos de los verdes (18% frente al 15%) y muy por detrás de la CDU-CSU (29%).
Voto joven verde
Tanto el PSOE como Sumar apelan al voto de los ecologistas para intentar activar una «remontada» de aquí al próximo 23 de julio. Los sondeos dibujan un escenario algo preocupante para el actual Ejecutivo, aunque según fuentes socialistas, faltan por activarse algunos segmentos electorales, como el de las mujeres y el de los más jóvenes, históricamente más sensibles a los asuntos vinculados al medio ambiente.
En marzo de 2018, por ejemplo, se dio una multitudinaria manifestación en la Puerta del Sol que pareció recordar a la protesta del 15-M, de la que nació Podemos. Algunos representantes públicos del partido morado acudieron a esa marcha para conectar con los manifestantes, en gran mayoría jóvenes. Pero a lo largo de los últimos años Podemos no ha logrado capitalizar ese nicho electoral, al que ahora se dirigen Díaz y Sumar.
El enlace con los verdes europeos es, por otro lado, el resultado de un acercamiento que ha durado meses, tal y como ha ido informando THE OBJECTIVE. En 2019, los ecologistas españoles se dividieron entre apoyar a Más País e Íñigo Errejón o Podemos. Juantxo Uralde, histórico dirigente de los verdes españoles, se decantó entonces por seguir apoyando a Pablo Iglesias. Hasta se creó una marca instrumental, Alianza Verde, para competir con los ecologistas de Equo, activos en el bando errejonista. Ahora, en cambio, los dos grupos se han reunido bajo el paraguas de Sumar.
Urtasun, el actual portavoz nacional de Sumar, también ha ejercido un papel muy importante en este acercamiento a los verdes europeos. Activo desde hace años en el Parlamento Europeo, este representante que procede de los Comunes de Ada Colau es considerado una «institución» entre los verdes europeos, aseguran algunos de sus compañeros. De ahí la posibilidad para Díaz de presumir de un apoyo internacional que puede ser relevante a la hora de convencer a los más jóvenes. No se descarta que algunos altos cargos de los verdes europeos (más concretamente de los alemanes) acudan a un mitin de Díaz en la campaña del 23-J. Sería algo parecido a una foto contrapuesta a la que Santiago Abascal se hizo con la italiana Giorgia Meloni en septiembre del año pasado.