Bolaños mantiene la presión sobre Rubiales: «Si no hay acontecimientos, el Gobierno actuará»
Teresa Ribera pide al presidente de la RFEF que reflexione «si considera que está en condiciones de seguir»
El ministro Félix Bolaños en el Congreso. | A. Pérez Meca (Europa Press)
El Gobierno mantiene la presión sobre Luis Rubiales. El ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, ha anunciado este jueves que espera acontecimientos en el caso del presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) tras su beso a Jenni Hermoso. En el caso de que no se produzcan, avisa que el Ejecutivo actuará. El dirigente federativo se somete mañana una asamblea extraordinaria, aunque las fuentes consultadas por THE OBJECTIVE descartan que vaya a dimitir. La ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, también ha pedido a Rubiales que reflexione «si considera que está en condiciones de seguir».
Las declaraciones de Bolaños se han producido en la embajada española en París, donde ha viajado para participar en los actos de homenaje a La Nueve, el grupo de republicanos españoles que liberaron la capital francesa en la Segunda Guerra Mundial. El ministro ha avanzado que la asamblea de la RFEF que celebra este viernes a mediodía debe tratar el asunto de Rubiales. Como días antes el presidente del Gobierno, le ha señalado la puerta de salida.
«Desde luego que esperamos acontecimientos, pero si no se dan, si no se producen, el Gobierno va a actuar», ha recalcado Bolaños. El ministro no ha especificado qué acontecimientos son esos. Se ha remitido a las declaraciones que han realizado estos días tanto Pedro Sánchez como el ministro de Cultura y Deportes, Miquel Iceta, que han sugerido directamente la dimisión de Rubiales.
Rubiales contra las cuerdas
El presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD), Víctor Francos, organismo que depende del Gobierno, conminó hace dos días a la RFEF a actuar contra Rubiales. «Si no lo hace con urgencia, lo hará el CSD». El dirigente gubernamental aseguró durante una entrevista en la Cadena SER que había comunicado formalmente a la persona pertinente en el órgano rector del fútbol la necesidad de actuar con urgencia y avanzó que había solicitado el informe interno sobre la investigación para valorarlo.
La RFEF está obligada a enviar las conclusiones de su informe interno al CSD. Una vez que esté en poder del órgano adscrito al Ministerio de Cultura y Deportes, este lo estudiará y, si lo ve pertinente, lo elevará al Tribunal Administrativo del Deporte (TAD), que podría inhabilitar a Rubiales por un periodo de entre dos y 15 años, según establece el artículo 108 de la Ley del Deporte, que entró en vigor a principios de este año.
Bolaños ha aprovechado la intervención sobre el caso Rubiales para destacar «el cambio» de la sociedad española de los últimos años. «A la sociedad española ya le parece intolerable que haya comportamientos machistas, que se bese a una mujer sin su consentimiento». No ha sido el único miembro del Ejecutivo que ha ahondado en la cuestión.
La ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha tildado de «humillante y vergonzoso» el trato que dispensó Rubiales a las jugadoras de la selección, haciendo hincapié en que es muy diferente con el que tiene con los jugadores del equipo masculino. Asegura que el Gobierno es «cauto y respetuoso» con el proceso porque «no depende directamente» de sus competencias, pero ha insistido en que la actitud del presidente de la RFEF tiene un tono «enormemente sospechoso y humillante».
La reflexión de Ribera
Ribera considera «obvio» que el comportamiento de Rubiales es «claramente inadecuado» y se ha preguntado si el máximo dirigente federativo «considera que está en condiciones de seguir ejerciendo su responsabilidad con dignidad» a raíz «de lo que ha hecho» y de las imágenes que se van conociendo. Y ha insistido: «Lo hemos visto todos, no es algo discutido por nadie».
La actitud de Rubiales ha desencadenado una cascada de denuncias, tanto a la propia RFEF, como al CSD y a la Fiscalía. El punto de inflexión lo marcará la asamblea que celebra el órgano rector del fútbol español este viernes a mediodía. Las fuentes consultadas indican que Rubiales no tiene intención alguna de dimitir, pero que podría aceptar una sanción mínima para seguir luego al frente de la federación. La resolución depende del departamento de Integridad, que preside un subordinado suyo.
