Lobato avala la expulsión de Redondo por no rectificar sus críticas al PSOE
El secretario general del PSOE-M ve la destitución del exlíder vasco como una decisión «absolutamente estatutaria»
El portavoz del PSOE en la Asamblea de Madrid, Juan Lobato, durante un pleno ordinario, en la Asamblea de Madrid | Gustavo Valiente (Europa Press)
El secretario general del PSOE-M, Juan Lobato, ha enmarcado en una decisión «absolutamente estatutaria» la expulsión del exsecretario general del Partido Socialista de Euskadi (PSE) Nicolás Redondo Terreros. El motivo ha sido el «reiterado menosprecio» a las siglas, ante lo cual Lobato desea que hubiera «rectificado».
«A ver, a mí me duele que se expulse siempre a alguien del PSOE, la verdad. Las cosas como son, lo tengo que decir con claridad. Ahora, igual que digo esto, digo que es yo creo que imposible no tomar esa decisión cuando se producen declaraciones, hechos, como los que se han producido», ha expuesto Lobato en una entrevista en RNE, recogida por Europa Press.
La expulsión de Redondo se efectuó el pasado lunes y desde los socialistas han indicado que «no es difícil de justificar porque está negro sobre blanco en la prensa de todo el país», en referencia a las declaraciones que viene realizando el exdirigente socialista contra la posibilidad de que el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, pueda llegar a un acuerdo con Junts para gobernar a cambio de una Ley de Amnistía para el huido de la justicia Carles Puigdemont y otros implicados en el procés.
Para Lobato debería haber habido una «rectificación» por parte de Redondo, quien ya tenía otro expediente abierto. «Yo creo que la decisión es absolutamente estatutaria y es la que tiene que aplicar el partido», ha resumido el madrileño.
El exlíder de los socialistas vascos afirmó la semana pasada, en declaraciones a Europa Press que consideraba una «inmoralidad» formar gobierno con los apoyos del partido de Puigdemont porque el expresidente catalán huido de la justicia pretende «destruir el sistema del 78, romper la ciudadanía española y establecer una sociedad de privilegios y medieval». Por ello, reclamó a su partido que diera un «no» rotundo al líder de Junts y no claudique de manera «genuflexa».
