El PP exige a Armengol que no paralice el Congreso y active las comisiones de trabajo
Los ‘populares’ presentan un escrito para crear las de Reglamento, Estatuto del Diputado y Peticiones
La presidenta del Congreso de los Diputados, Francina Armengol. | EFE
El Partido Popular quiere que el Congreso de los Diputados se ponga a trabajar ya, y que no esté supeditado a las negociaciones de investidura de Pedro Sánchez con los nacionalistas y Sumar. La presidenta de la Cámara Baja mantiene la actividad parlamentaria bajo mínimo, condicionada a los intereses socialistas, y los populares meten presión para que se revierta esta situación. Una vez que este martes ya se inician los plenos en el Senado, los populares apuntan ya algunas iniciativas para activar el Congreso.
THE OBJECTIVE ha podido saber que el Grupo Parlamentario Popular ha presentado un escrito, que tendrá que calificar este martes la Mesa del Congreso, en el que pide que se constituyan ya las comisiones no legislativas, como son la de Reglamento, Estatuto del Diputado y Peticiones. El resto de las comisiones dependen de la conformación del Gobierno, ya que dependerán de los ministerios, por lo que no pueden crearse hasta conocer la estructura ministerial. La Comisión de Reglamento debería haber estado constituida antes de la reforma para incluir el uso de las lenguas cooficiales en la Cámara, aunque al presentarla por lectura única se eludió este trámite; y la del Estatuto del Diputado es la encargada de la convalidación de bienes de los parlamentarios.
Las fuentes consultadas por este periódico señalan que «hay que normalizar el Parlamento, que puedan debatirse proposiciones no de ley, que haya capacidad de debate político, porque de lo contrario estamos al albur de lo que decidan la mayoría en la Mesa. La institución está sirviendo a los intereses de una mayoría y no de lo que es la propia institución». Al margen del escrito para la constitución de estas tres comisiones, los populares no descartan pedir en los próximos días la celebración de plenos ordinarios y de sesiones de control en el Congreso. «Hasta ahora hemos estado en un proceso de investidura de Feijóo», señalan las fuentes parlamentarias consultadas, «y a partir de ahora comenzará la labor de oposición. Una vez pasado el debate ya empezarán a moverse estas iniciativas».
Por otra parte, el Grupo Popular en el Senado ya se ha activado en modo oposición, a la espera de conocer el encargo de Su Majestad el Rey Felipe VI para la próxima sesión de investidura, y este martes ya comenzará su ofensiva en el Senado contra la negociación de la Ley de Amnistía de Pedro Sánchez con Carles Puigdemont. La Cámara Alta, en las que los populares tienen mayoría absoluta, celebrará hoy el debate de la moción presentada por el Grupo Popular para intentar retratar a todos los senadores de izquierda y constituirá la Comisión General de las Comunidades Autónomas, el foro en el que están llamados a comparecer todos los presidentes autonómicos para pronunciarse.
Feijóo ya advirtió de que el amplio poder autonómico, municipal e institucional del Partido Popular, al haber conseguido la presidencia del Senado y de la FEMP (Federación Española de Municipios y Provincias), lo iba a poner al servicio de su rechazo total a las exigencias de los nacionalistas secesionistas. Una de las principales incógnitas que este martes se pueden despejar es la estrategia que seguirán los populares en el seno de la Comisión General de las Comunidades Autónomas, que se constituye este martes, y en la que se aprobará el calendario de trabajo.
Esta agenda puede implicar la comparecencia de todos los presidentes autonómicos para que se pronuncien sobre la Ley de Amnistía, lo que supone poner en un aprieto a barones socialistas como el presidente castellanomanchego, Emiliano García-Page, que se ha mostrado muy crítico con la posibilidad de que Pedro Sánchez negocie con los independentistas.
La moción que se debate este martes en el Senado será defendida por el senador de León, Antonio Silván, que aseguró a THE OBJECTIVE, que «un Senado que ha pasado desapercibido en otros momentos hoy es un dique de contención frente a un previsible, que no deseable, Gobierno de Pedro Sánchez. El Senado tiene su función y en estos momentos la va a ejercer con sumo rigor». En este sentido, señaló la importancia de la creación de la Comisión General de Comunidades Autónomas donde «los presidentes autonómicos van a poder opinar sobre esta amnistía y las cesiones de Pedro Sánchez ante el independentismo«.
