Junts amenaza con votar 'no' a Sánchez «si se hace lo mismo que estos cuatro años»
Desde el PSOE señalan que el presidente del Gobierno no mantendrá una conversación telefónica con Carles Puigdemont
La portavoz de Junts en el Congreso, Míriam Nogueras, ha afirmado este viernes tras reunirse con el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, que aún están lejos de un «compromiso histórico» que supondría su apoyo a la investidura y le ha entregado por escrito las exigencias de Carles Puigdemont.
Sánchez se ha reunido con Nogueras en el Congreso para cerrar la ronda de contactos que ha mantenido con los partidos para intentar lograr los respaldos que necesita para renovar mandato.
En declaraciones a los periodistas al término de esa reunión, la dirigente de Junts ha afirmado que en la actualidad siguen lejos de lo que ha calificado de «compromiso histórico».
«Si se trata de hacer lo que se ha hecho en los últimos cuatro años, entonces es que no son los votos de Junts aquellos que están buscando. No estamos aquí ni para escuchar ni para hacer lo que se ha hecho estos últimos cuatro años porque todos sabemos, y se ha constatado, que no ha funcionado», ha añadido.
Ha aclarado que tampoco se han reunido con Sánchez para conocer las condiciones del PSOE para que Junts dé su apoyo, sino para reiterar sus exigencias. Por ello, le ha entregado la transcripción de la declaración realizada por Puigdemont el pasado 5 de septiembre en Bruselas en la que puso sus condiciones para apoyar la investidura.
En concreto, una ley de amnistía, el reconocimiento y respeto a la «legitimidad democrática» del independentismo y la creación de un mecanismo de verificación de los acuerdos son las condiciones previas para que su formación le apoye. Nogueras ha insistido en que si se pretende actuar como en los últimos cuatro años no podrán contar con los votos de Junts.
Al preguntarle si han hablado de una posible amnistía, ha apelado a la discreción para no hacer comentarios al respecto y hablar sólo cuando sea necesario. «Estamos en un momento absolutamente trascendente y extraordinario y nosotros no jugaremos al juego de los titulares o de las filtraciones, que para eso -ha dicho- ya hay otros».
En esta ocasión, a diferencia de lo ocurrido el pasado miércoles cuando Sánchez se reunió con el portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, no ha habido una llamada previa hecha pública a la cúpula de Junts.
Antes de verse con Rufián, Sánchez mantuvo una conversación telefónica con el presidente de Esquerra, Oriol Junqueras, lo que generó la duda de si podría actuar de la misma forma y llamar al expresident Carles Puigdemont de forma previa a su encuentro con Nogueras, algo que finalmente no ha ocurrido.
En la conversación informal que mantuvo Sánchez con los periodistas el jueves en el Palacio Real con motivo de la Fiesta Nacional y ante la pregunta de si llamaría a Puigdemont, dijo que él hablaba y se reunía con los grupos parlamentarios.
Fuentes socialistas han señalado que no se ha barajado esa llamada y que la que hizo a Junqueras fue un gesto con el líder de un partido que ha sido socio habitual en la pasada legislatura y que confía que apoye la investidura y la gestión de un nuevo Gobierno progresista.
Desde el PSOE se había avanzado que en la reunión de este viernes con Nogueras, que ha durado casi hora y media, Sánchez estaría acompañado por la ministra de Hacienda y vicesecretaria general del PSOE, María Jesús Montero, y el secretario de Organización socialista, Santos Cerdán.
Sin embargo, finalmente junto a Sánchez y Cerdán ha estado el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, uno de los negociadores socialistas encargado de los contactos con los independentistas catalanes.
Bolaños se ha incorporado una vez iniciada la reunión, al igual que hizo Montero en el encuentro con Bildu, por lo que ninguno de los dos ministros aparece en las fotos del comienzo de sendas citas en el lugar del Congreso elegido para ambas y en el que tras los sillones se habían colocado las banderas de España y de la Unión Europea.