Sánchez reducirá ministerios, dará tres a Sumar y busca sustituto para la portavoz del Gobierno

Ha habido muchos rumores y filtraciones interesadas del socio minoritario para influir en una decisión que sólo compete al presidente del Gobierno. Pero la realidad es que Pedro Sánchez no ha comenzado a trabajar ni dejado traslucir ni una pista sobre su futuro gobierno hasta hace apenas unos días. Según ha podido saber THE OBJECTIVE, el jefe del Ejecutivo en funciones que se presentará el miércoles 15 de noviembre a la investidura, encargó la semana pasada a muy pocos colaboradores que empezarán el trabajo de ‘carpetas’ con los ministrables, ante el ingente número de ministros que no repetirán en el gabinete. Será un Gobierno reducido, con «tres o cuatro» ministerios para Sumar, el fichaje de un vicepresidente económico, y las entradas de nuevos perfiles en Interior, Cultura e Industria.

Muchas de ésas bajas se producen por la

Las fuentes consultadas por este diario apuntan a la salida de hasta once miembros del actual Consejo de Ministros. Las más descontadas son las de los ministros de Podemos y, especialmente, las ministra de Igualdad, Irene Montero, y Derechos Sociales, Ione Belarra, que no repetirían «bajo ningún concepto»; así como la de de los otros dos representantes morados del Ejecutivo, Alberto Garzón y Joan Subirats. La intención del presidente Sánchez es hacer una remodelación profunda, con una drástica reducción de ministerios -se habla de que pasarían de 23 carteras a 17-, con fusiones de carteras, lo cual le serviría para desalojar a los perfiles más cuestionados de las últimas crisis de Gobierno: las de las ‘nuevas ministras’ y los dos recién incorporados ministros de Sanidad e Industria. 

Cambio de portavoz

La más novedosa de esas bajas en el Consejo de Ministros sería la de su portavoz, Isabel Rodríguez. El fichaje de mayor visibilidad de las ‘nuevas ministras’, que se incorporaron en julio de 2021 con la remodelación del Gobierno, es la principal damnificada ya que, según el entorno del presidente, no es probable que repita siquiera como ministra de Política Territorial. El puesto de portavoz es el que más desgaste conlleva por su visibilidad pública pero, en el caso de Isabel Rodríguez, son muchos los que consideran que sale especialmente «quemada» tras su paso por Moncloa y la utilización partidista de las ruedas de prensa del Gobierno. Se trataría de una de las principales novedades del nuevo Gobierno: el perfil del nuevo portavoz sobre el que no dan pistas en Moncloa.

Otras salidas novedosas que baraja el jefe del Ejecutivo es la de Miquel Iceta en Cultura.

Más «lógica» y esperada es la salida de otras ministras que «han pasado sin pena ni gloria» por sus gabinetes como la titular de Transportes, Raquel Sánchez, y la ministra de ciencia, Diana Morant. La única de esa hornada que se mantendrá en el Consejo de Ministros, según Moncloa, es la ministra de Educación, Pilar Alegría, aunque no concretan si repetiría cartera o mudaría sus competencias. Alegría es uno de los perfiles comunicativos del PSOE, la portavoz de la Ejecutiva, y su papel fue reforzado al ser incorporada en la comisión negociadora del PSOE. 

Los «pesos pesados»

Entre los que permanecen también hay fijos en la quiniela. Fuentes de Moncloa dan por segura la continuidad de los llamados «pesos pesados» de Sánchez. El presidente del Gobierno seguirá contando con Teresa Ribera como vicepresidenta de Transición Energética, aunque no pretende ascenderla a la vicepresidencia primera como sustituta de Nadia Calviño, que abandonará el Ejecutivo para hacerse con la presidencia del Banco Europeo de Inversiones (BEI), confían en Moncloa. También repetiría el núcleo duro del Gobierno: María Jesús Montero en Hacienda, José Manuel Albares en Exteriores, Margarita Robles en Defensa, Félix Bolaños en Presidencia y Luis Planas en Agricultura. Pero tampoco se espera que asciendan posiciones o asuman más funciones en el Gobierno.

Las citadas fuentes incluyen en este grupo a José Luis Escrivá, en una cartera económica como hasta ahora, pero quizás con más funciones ante el cariz político que ha ganado el titular de Seguridad Social en la pasada legislatura. Entre los movimientos internos de un ministerio a otro destaca la posible ‘vuelta a casa’ de Miquel Iceta al Ministerio de Política Territorial, dejando vacante Cultura, según los planes de Sánchez.

Quien despierta más dudas es el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska. Muchos dudan de que siga en el Ejecutivo porque creen que «se ha quemado en Interior» tras una cascada de polémicas, desde el cese de Pérez de los Cobos o el polémico asalto a la vaya de Melilla. Pero fuentes de Moncloa sostienen que el presidente sí cuenta con él, sin concretar en qué departamento. No se descarta el salto de Interior a Justicia, como el propio Marlaska ha deslizado que es su objetivo. Lo que es seguro es que el Ministerio está vacante y que Pilar Llop «está fuera» del Gobierno. Tras la reforma de la ley del sí es sí, Sánchez se negó a ejecutar la recomendación de algunos de sus colaboradores y prescindir de Irene Montero y Pilar Llop en la mini crisis del Gobierno en la que se nombró a Héctor Gómez y José Manuel Miñones, en sustitución de Reyes Maroto y Carolina Darias. Pero el núcleo duro del presidente deslizó ya entonces su malestar con la gestión de Llop, la única ministra que no repitió en las listas electorales al 23-F

El despacho de Albares en Ferraz

Mención aparte merece el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, uno de los miembros del Gobierno que «más peso específico tiene en Moncloa». Incluso en el entorno del presidente consideran que «Albares ha sustituido a Margarita», la ministra de Defensa, en su papel de ministro con mas predicamento sobre el presidente Sánchez. Una prueba de ello que pocos conocen es que «Albares es el único ministro que tiene despacho en Ferraz sin ser miembro de la Ejecutiva Federal». 

Es, sin duda, un síntoma del peso político que ha adquirido entre los hombres fuertes del presidente. En la cuota femenina, su homóloga es Hana Jalloul, la secretaria ejecutiva de Política Internacional de la dirección federal que «está muy considerada por el presidente». Está en todas las quinielas para ser ministra desde su éxito en el nombramiento de Pedro Sánchez como presidente de la Internacional Socialista. Muchos la ubican en Igualdad, cartera que recuperará el PSOE, como desveló el propio Sánchez a los colectivos feministas en una reunión en Ferraz, en la que llamó poderosamente la presencia de Jalloul, en calidad de miembro «empoderado» de la comisión negociadora del PSOE. Su presencia en todas las instantáneas que publica el PSOE es garantía de su ascenso inminente. «El único motivo por el que no sería ministra es porque Pedro le reserve para cabeza de lista en las elecciones europeas» de junio 2024.