Absuelven a un exdirigente del PP denunciado por maltrato por la líder de NNGG en Cataluña
Albert Fernández Saltiveri acusa a Irene Pardo de denuncia falsa y pide al partido que la destituya de sus cargos
La Audiencia Provincial de Barcelona ha confirmado la absolución en primera instancia del que fuera vicesecretario de Comunicación del PP en Cataluña, Albert Fernández Saltiveri, en la denuncia por violencia de genero, coacciones, injurias y maltrato interpuesta por su exmujer y actual presidenta de Nuevas Generaciones (NNGG) en dicha comunidad autónoma, Irene Pardo, según la sentencia a la que ha tenido acceso THE OBJECTIVE en exclusiva.
El tribunal, formado por tres magistradas, ha avalado por unanimidad el fallo previo del Juzgado de lo Penal número 10 de Barcelona del pasado 20 de julio. Pardo alegó en su recurso que se omitieron en la primera sentencia varias pruebas que deberían conducir «a un pronunciamiento de condena», pero la Audiencia los ha rechazado de plano y subraya que son «insuficientes» para modificar la absolución de Fernández Saltiveri.
«La valoración de que no se valora acertadamente o se omite determinada prueba no es más que una disidencia con la tarea de ponderación de los hechos que pretende sustituirse por la de la recurrente», señala el fallo del tribunal, que incide en que la sentencia de julio fue «escrupulosa» y que no se ha encontrado «infracción penal alguna» en el acusado, por lo que confirma «en su integridad» el mencionado fallo.
Fernández Saltiveri fue apartado del cargo orgánico del PP catalán y del puesto de asesor del grupo popular en la Diputación de Barcelona tras la denuncia de su expareja y concejal en la localidad de Sant Adrià de Besòs. Al igual que entonces, pide ahora al partido su «reincorporación» a los puestos de trabajo que tenía tras confirmarse su inocencia, así como la «expulsión o cese» de Pardo como presidenta de las juventudes del partido en la región, así como de portavoz del PP en el mencionado pueblo y asesora en la Diputación de Barcelona.
Una «denuncia falsa» en la que testificó Fanjul
«Apelo a la ética y los valores del PP ante esta denuncia falsa por violencia de género», señala a este periódico dirigiéndose al presidente del PP provincial de Barcelona, Manuel Reyes; al portavoz de los populares en la Diputación, Xavier García Albiol; y a la presidenta nacional de Nuevas Generaciones, Beatriz Fanjul, quien testificó en su contra en el juicio por la amistad que tenía con la denunciante.
Pardo presentó la denuncia en marzo de 2021 por las supuestas agresiones, después de que la pareja se casara en 2017. La acusación particular representada por la denunciante pidió una pena de prisión de seis años. La Fiscalía también mantuvo su acusación, con petición de pena de prisión de tres años, por los delitos de coacciones, maltrato y lesiones en el ámbito de la violencia contra la mujer.
Los hechos denunciados, que no quedaron probados según la sentencia dictada en primera instancia, se remontan al año 2018, y se referían a supuestos episodios violentos del acusado en el ámbito doméstico, como que la denunciante habría sido expulsada del domicilio conyugal y obligada a pasar dos horas en el rellano de la escalera por haber comprado una leche que no era de su gusto, o una supuesta agresión física con un casco de moto en la cara de la denunciante, entre otros.
La primera sentencia ya sostuvo que se estaba ante «versiones contradictorias» y que mientras él negaba los hechos, en el caso de la denunciante no se podía considerar que el acusado «la sometiera a una atmósfera irrespirable e insoportable», que le coartara la «libertad como mujer» siendo ella cargo público y con responsabilidades en el partido político, por lo que absolvió al denunciado.
Fernández Saltiveri valoró en aquel momento interponer dos querellas criminales contra Pardo y su entonces pareja, el también concejal del PP en Badalona, David Mejía, por considerar que incurrieron en «falso testimonio» durante el juicio. A este respecto, se dirigió también a Albiol para que cesase «inmediatamente» a Mejía como concejal de Badalona. Una petición que no fue atendida por el regidor más conocido del PP en Cataluña.
El exvicesecretario de Comunicación del PP catalán acusó a Mejía de mentir en la denuncia interpuesta contra él para «ayudar a su pareja» e hizo hincapié en que cuando el juez le exigió a este último las llamadas telefónicas y mensajes de WhatsApp donde le pedía ayuda, «nunca presentó dichas pruebas».
Con respecto a su exmujer, el exdirigente del PP catalán dice que actuó «por intereses espurios» y con el aval de la dirección nacional que presidían Pablo Casado y Teodoro García Egea para atacar al presidente de los populares catalanes, Alejandro Fernández. En julio ya explicó que Pardo presentó como prueba en el juicio un parte de lesiones que solo demostraba que había ido al médico, pero que en dicho informe no figuraba ninguna lesión. Por todo ello, afirmó tras la primera sentencia que se había hecho justicia, exigía la «reparación por los daños sufridos» y expresó su «solidaridad absoluta con las mujeres que sí sufren la violencia machista». La misma lista de peticiones que hace ahora con la segunda sentencia absolutoria en su mano.