Podemos estudia supeditar el pacto con Díaz en Galicia a mantener sus ayudas del Congreso
Los morados dudan si rechazar el acuerdo y respaldar al BNG para arrinconar a Sumar
Podemos estudia condicionar su respuesta a la propuesta de pacto pacto en Galicia de Sumar a que la formación de Yolanda Díaz renuncie a pedir al Ministerio de Interior retirar los seis millones de subvenciones para el partido morado. Después de la ruptura en el Congreso entre Podemos y Sumar, los de Díaz amagaron con invocar el pacto antitransfuguismo en las Cortes y después pedir al ministerio de Interior que retirara los seis millones de subvenciones para los morados (por la presunta ruptura de los acuerdos previos a los comicios del 23-J). Según explican fuentes moradas, ahora Podemos quiere exigir como contrapartida para el pacto en Galicia que Sumar renuncie a su plan con Interior. Aunque existe un debate en estas horas en la dirección, con un frente que propone romper definitivamente con Sumar y respaldar al BNG, tal y como publicó este diario en los últimos días, y entre los que figura Pablo Iglesias, que lo ha hecho público este jueves.
Podemos entiende que el acuerdo en Galicia, que se presentó in extremis y contra pronóstico en estos últimos días, revela la debilidad táctica y política de Díaz. Tras la ruptura en el Congreso, Podemos amagó con presentar una lista en solitario en la región. Su plan era debilitar a Díaz. Los morados no tienen mucho que perder en Galicia, mientras que saben que si Sumar se queda sin escaños y en un contexto de fragmentación, los de Díaz serán tachaos de culpables de la victoria del PP.
En ese escenario, y después de las presiones del PSOE, los morados creen que Díaz tuvo que renunciar a su planteamiento rupturista. De ahí que el partido de Irene Montero y Ione Belarra estudie aprovechar la situación para zanjar el asunto de los seis millones de Interior. Podemos tuvo que reaccionar en un primer momento cuando Sumar amagó con activar el pacto antitransfuguismo cuando sus cinco diputados se pasaron al grupo mixto. Después, supieron a través de la prensa que Sumar estaba analizando la posibilidad de pedir al Ministerio de Interior que retirara las subvenciones públicas a Podemos por su ruptura en el Congreso.
Dudas de Podemos
Tanto el pacto antitrasfuguismo como el cierre al grifo de las subvenciones deben contar con el visto bueno del PSOE. Y tal y como publicó este diario, los morados han detectado en los últimos días un cambio de actitud por parte de los de Pedro Sánchez, que califican de muy interesante. Primero fue el guiño del presidente y de Félix Bolaños a Irene Montero y a un ministerio para Podemos. Después, el cierre del caso Neurona, y una serie de entrevistas y editoriales publicados en la prensa afín a la Moncloa. Ahora la propuesta de pacto en Galicia, que según Podemos es obra directa de los socialistas, quienes habrían «empujado» para que Díaz cediera y les ofreciera, entre otras cosas, la cabeza de lista en Lugo.
La dirección estatal de Podemos, no obstante, tiene que ratificar el acuerdo anunciado por Díaz el pasado miércoles, poco después de la confirmación de que Marta Lois será la candidata a la Xunta. Y según las fuentes consultadas por este diario, uno de los puntos que se estudiará en la reunión de la cúpula morada será exigir a Díaz a que renuncie a su plan antisubvención en Interior. Otro será presentará una lista alternativa, opción que en este momento parece descartada, y la tercera vía, que consiste en romper definitivamente con Díaz y anunciar el apoyo de sus militantes al BNG, lo que obligaría también a Sumar a elegir, con la posibilidad de quedarse fuera del Parlamento gallego y ser «culpable» de la victoria del PP.
Podemos tiene derecho al 23% del dinero público que ingresará Sumar como coalición por el ciclo electoral de este año. Pero con la ruptura en el Congreso, un sector de Sumar ha propuesto que Díaz interceda ante el departamento de Fernando Grande-Marlaska para que sancione a los morados. Se trata de un sector cercano al errejonismo que quiere saldar cuentas con Podemos, con quien saben que deberán medirse en las próximas elecciones europeas, y posiblemente en las vascas.
Los de Montero y Belarra se ven fuertes después de la ruptura en el Congreso con Sumar. La iniciativa, que fue impulsada personalmente por Pablo Iglesias, tal y como desveló este diario, ha modificado el tablero político, según sostienen en el partido morado. Ahora, la coalición de Sumar está empezando a tambalearse, con algunas críticas que llegan de sectores tan relevantes como el de Compromís, y ante unas bajas expectativas electorales en Galicia y el País Vasco. De ahí que los morados quieren pisar el acelerador y poner contra las cuerdas a Díaz, a quien siguen tachando de indecisa.