Podemos busca a la desesperada una «alianza» en Galicia para dejar a Díaz sin escaños

Podemos busca a la desesperada una «alianza» en Galicia para dejar a Sumar y Yolanda Díaz sin escaños. El pasado jueves, el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, anunció el adelanto de las elecciones autonómicas para el próximo 18 de febrero. Todas las fuentes consultadas en Galicia, tanto de Podemos como del sector de Sumar, admiten que «era de esperar» dicho anuncio. El problema, coinciden, es que la izquierda llega más dividida que nunca, y que esta fragmentación favorecerá al Partido Popular para que revalide el ejecutivo local. Todo apunta a que la desavenencia en Madrid entre Sumar y Podemos impedirá buscar acuerdos y confluencias entre ambos, algo que el coordinador regional de Podemos dijo respaldar pero que la cúpula estatal morada rechaza.

Podemos y Sumar tienen que acelerar sus planteamientos electorales. Tal y como desveló THE OBJECTIVE, el equipo de Díaz está encontrando dificultades a la hora de elegir a un candidato. En un primer momento, un sector de Sumar, concretamente el de Más País de Íñigo Errejón, calentó la opción de enviar a Galicia a la actual portavoz parlamentaria Marta Lois. La ruptura con Podemos, sin embargo, ha enfriado esta hipótesis. La segunda opción pasaba por Martiño Noriega, exalcalde de Santiago de Compostela, en quien confiaba Díaz. Pero Xosé Manuel Beiras y el partido Anova pusieron un veto sobre él, así que tuvo que rechazar el ofrecimiento de la vicepresidenta segunda. A partir de aquí, para Sumar son todas incógnitas.

Dos nombres siguen en las quinielas para liderar la nueva lista de Sumar Galicia. Se trata de Paulo Carlós López, un politólogo «amigo» de Lois y conocido en la política gallega por su cercanía a los sectores nacionalistas; y el exsocialista Juan Díaz Villoslada, quien llegó incluso a proponerse, sin suerte, como líder regional del PSOE. La elección de Díaz determinará hacia dónde se dirigirá la campaña de Sumar: si a intentar arañar votos en el sector nacionalista, donde el BNG está más fuerte que nunca, o buscar apoyos entre los votantes socialistas, debilitando a su socio de gobierno.

Búsqueda de pacto con EU

Podemos, por su lado, tiene que resolver otras dudas. El coordinador regional amagó con ofrecer como solución un reencuentro con Sumar a nivel regional. Pero el sector duro de los afines a Pablo Iglesias e Irene Montero se oponen a esa opción y piden enfrentarse contra el partido de Díaz. Todo apunta a que después del choque parlamentario entre Sumar y Podemos, los morados difícilmente buscarán una entente con ella. En el País Vasco, otro tablero político regional muy importante, Podemos ya está diseñando una estrategia autonomista que prescinda de pactos con Sumar para las autonómicas de 2024.

Podemos, según ha podido saber este diario, mantiene aun así la puerta abierta a una «alianza» electoral con otros socios. Se dirigen en concreto a EU, la marca gallega de Izquierda Unida. Lo paradójico es que Díaz ejerció de jefa regional de EU en los años de la secretaría de Cayo Lara, pero rompió su carnet de IU en 2019, cuando Iglesias buscaba una coalición con Pedro Sánchez y Alberto Garzón apostaba por un apoyo externo a la portuguesa. EU está ahora desligada de Sumar en Galicia, a pesar de que IU federal sí trabaja codo con codo en Madrid con Díaz. Y según comentan las fuentes consultadas, la coordinadora regional, que fue una de las fieles de Díaz, ahora se ha alejado de ella y rechaza cualquier tipo de encuentro con su exaliada.

El tablero político gallego está endiablado, admiten todas las fuentes consultadas. Y quitando al PSOE, PP y el BNG, quedarán muy pocos escaños para las demás formaciones políticas. Es por ello por lo que en Podemos gana enteros la tesis del cuanto peor mejor, que se traduciría en presentar una lista instrumental (con EU o en solitario) con el objetivo real de dinamitar todo tipo de esperanza de Díaz de lograr al menos un diputados autonómicos.

Desgastar a Sumar

Recientemente se ha comentado a nivel político la posibilidad de que la exsecretaria de Estado del ministro de Igualdad, Ángel Rodríguez Pam, lidere esta lista instrumental. El partido morado todavía no ha anunciado ningún candidato, y nadie descarta tampoco la posibilidad de que Podemos renuncie a concurrir a las elecciones gallegas, y pide a sus militantes y simpatizantes respaldar al BNG, en el marco de la misma táctica de desgaste de Sumar.

Dos provincias serán clave a este respecto, la de Orense y la de Lugo. Pero la pérdida de pocos miles de votos podría favorecer al PP y perjudicar a Sumar, que corre peligro de hacer un amargo debut en la región donde Díaz nació y donde arrancó su carrera política. Para Podemos, demostrar que Sumar carece de apoyos suficientes para entrar en el parlamento gallego tendría un enorme significado simbólico. El batacazo de Sumar se explicaría como la demostración de que el artefacto electoral de Díaz es un bluf, y que a la izquierda del PSOE solo queda el partido morado.

Los últimos sondeos revelan que Sumar bascula entre lograr uno o cero diputados en Galicia. Sus estimaciones se mueven alrededor del 5% de papeletas, el umbral legal para entrar en la cámara regional. El PSOE calcula que la división entre Podemos y Sumar puede acarrear una pérdida de alrededor de 80.000 votos para la izquierda, según publicó este diario. Pero para Podemos esta pérdida podría convertirse en una victoria: dejar a Díaz sin escaños en su región y cabalgar el argumento del «fraude» de Sumar como una manera para reivindicarse en los próximos comicios, desde las elecciones vascas hasta las europeas.