Armengol rompe su rol neutral y critica a los que se oponen a la amnistía: «No tienen razón»

La presidenta del Congreso, Francina Armengol, ha cargado este sábado contra todo aquel que se discrepe de la ley de amnistía promovida por el Gobierno de Pedro Sánchez: «Aquellos que se oponen a la ley de amnistía y a tantas cosas no tienen razón». Las palabras de Armengol se han producido en un acto en Palma, donde la segunda autoridad del Estado ha defendido la política de «paz territorial y convivencia» del jefe del Ejecutivo.

Armengol ha roto así la neutralidad que se le supone a la presidenta de la Cámara Baja para defender sin ambages el texto que los partidos que sostienen el Gobierno llevarán a votación este próximo día 30. Y no solo eso, además de defender una ley promovida por el Ejecutivo, Armengol ha criticado a la oposición política y a los numerosos sectores sociales que reprueban la posición de Sánchez.

Cabe recordar que, en la propia web del Congreso de los Diputados, en el apartado donde se explican las funciones de esta figura, se afirma que «en el parlamentarismo español, la Presidencia de la Cámara se configura como una institución imparcial más allá de la confrontación partidista«. La máxima autoridad del poder legislativo también ha tenido palabras elogiosas para Sánchez, cabeza del poder ejecutivo: «Es un hombre valiente que cuando hay un problema lo afronta en beneficio de la ciudadanía».

La también secretaria general del PSOE balear ha sostenido en un acto del partido en las islas que los asuntos políticos deben resolverse por la vía política y no por la judicial. Si no es así, los políticos «no sirven para nada», ha remarcado. «No se pueden trasladar los asuntos políticos a la Justicia», ha mantenido la política mallorquina ante las críticas de los partidos de la oposición a la ley de amnistía del ‘procés’ que tramita el Congreso.

A su parecer, tanto en este asunto como en otros, el PP ha «fracasado» a la hora de afrontar los retos de futuro de España, al tiempo que ha destacado que el PSOE es el único partido que cuando hay un problema, «no se pone de perfil».