El PP catalán mantendrá su estrategia y pide a la sede central «no entrar en pánico»
Desde Cataluña piden «tranquilidad porque las cosas van bien» y advierten de que no hay que «volverse locos»
El presidente del Partido Popular en Cataluña, Alejandro Fernández. | EP
El Partido Popular de Cataluña no moverá «un milímetro» la estrategia diseñada de cara a las elecciones autonómicas del próximo 12 de mayo, después de los resultados de esta formación política en el País Vasco, donde ha subido un escaño y no ha podido neutralizar a Vox. Las fuentes consultadas por THE OBJECTIVE han pedido tranquilidad «y no volvernos locos» porque «hay gente que entra en modo pánico en el minuto uno». Además, admiten que ningún dirigente nacional le ha pedido cambiar nada: «Todos tenemos que estar tranquilos y seguir trabajando porque las cosas van bien».
Los populares han pasado ya la página de las elecciones vascas, en las que admiten que no tenían grandes expectativas más que conservar sus seis escaños y arañar alguno más, aunque sí mantenían la esperanza de haber neutralizado a Vox y la mayoría absoluta PNV-PSOE. Estos dos últimos objetivos no se han conseguido y ello ha generado un cierto nerviosismo en algunos sectores del Partido Popular, que apuntan a un cambio de estrategia en las elecciones catalanas, con un discurso más duro.
Pero en el PP catalán no se dan por aludidos porque sostienen que «llevamos diciendo lo mismo hace ya mucho tiempo. Para nosotros, gestión y combate contra el nacionalismo son la misma cosa porque el nacionalismo y el proceso han destruido la gestión. No se trata de elegir una cosa u otra, sino que se trata de que, al criticar al nacionalismo y al proceso, estás criticando la decadencia en la gestión en la que han sumido a Cataluña».
Los populares catalanes tienen muy claro que «nuestros rivales son claramente los separatistas, pero lo son por todo, porque es una idea perversa que destruye las sociedades y acaba provocando un vacío en la gestión inaceptable». En este sentido, critican que algunos en el partido «se vuelvan locos porque Vox pierda un escaño. Lo preocupante de las elecciones vascas es que Bildu tenga 27, eso sí es preocupante, como españoles».
Con esta convicción, las fuentes consultadas advierten: «No nos vamos a mover de lo que hemos hecho siempre, ni un milímetro, ni ningún giro. Las elecciones vascas, en dos días, se han olvidado. Al final, ha salido lo que todo el mundo esperaba, no ha habido ninguna sorpresa: el PP ha crecido, poco, pero ha crecido; la única duda era si quedaba un poquito por delante el PNV o Bildu, pero el resultado final es el mismo».
Este escenario del País Vasco, a juicio de estas fuentes, «no provoca ningún giro en la estrategia de las elecciones catalanas. Vamos a hacer lo mismo que teníamos previsto, el mismo discurso de los últimos años que es una combinación de ambas cosas: una crítica ideológica al nacionalismo que destruye la convivencia y los lazos entre catalanes y que ha sumido a Cataluña en la decadencia».
El PP catalán rechaza que desde la dirección nacional se le haya impuesto un cambio de estrategia o en el discurso de esta campaña: «No hemos notado nada. Nosotros lanzamos el mensaje que consideramos oportuno, para bien o para mal, acertado u erróneo. Nadie nos pone un argumentario para leerlo porque nosotros tenemos nuestro discurso. Nadie nos dice que cambiemos nada».
Por lo tanto, piden «respeto para lo que decidimos aquí» y señalan que «hay gente que entra en modo pánico al minuto uno. Hay que ir con tranquilidad. Las encuestas son buenas, hay que construir sobre eso y no volverse loco. Seguir con perseverancia y cada encuesta es un poco mejor». En este sentido, subrayan que su campaña no va a ir contra Vox: «Si lanzamos este mensaje, nuestras bases se enfadan. Nuestros rivales solo son los separatistas y quienes los apoyan, es decir, la izquierda. No le vamos a dedicar ni medio minuto a Ciudadanos ni a Vox, aunque se pasen todo el día atacando. Vamos a insistir en que nacionalismo y gestión son dos caras de la misma moneda. No hay que elegir entre una u otra, son lo mismo».
