El PSOE defiende a Sánchez en bloque: «No puedes entregar tu cabeza a la derecha»
Los líderes socialistas cierran filas para apoyar al presidente ante lo que consideran el «fango» de la «ultraderecha»
La vicepresidenta primera del Gobierno, María Jesús Montero, saluda con fervor a los militantes socialistas congregados a las puertas de la sede socialista de Ferraz. | EFE
«Nos pueden llamar perros porque somos fieles y leales». Estas palabras de la vicepresidenta tercera del Gobierno, Teresa Ribera, resumen bien el espíritu del Comité Federal que el Partido Socialista (PSOE) ha celebrado este sábado. Todos los barones territoriales, así como los altos cargos del Ejecutivo central y del partido han brindado su apoyo al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en un bloque sin fisuras. Cabe recordar que Sánchez comunicará el lunes el resultado de una «reflexión» sobre su futuro político ante las informaciones incriminatorias publicadas sobre su esposa, Begoña Gómez, que el presidente ve como ataques procedentes de medios «ultraderechistas».
Ya a la entrada de la sede socialista en la madrileña calle de Ferraz, los miembros del sanedrín socialista habían dejado claro que la suya iba a ser una defensa cerrada. Ni siquiera el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, el barón más díscolo, hizo el más mínimo amago de crítica. Esa unidad ha llevado a la cúpula del PSOE a tomar la decisión inédita de retransmitir en directo el Comité Federal, que se reúne siempre a puerta cerrada.
Mientras, en la calle, una multitud -unos 10.000 según el PSOE y 12.500 según la Delegación del Gobierno- alentaba al presidente entre cantos de ‘Pedro, quédate’ y ‘no pasarán’, entre otros. Al término de la reunión, los líderes socialistas han salido a saludar a los presentes y a apoyar las consignas al ritmo de La Internacional.
La primera en tomar la palabra fue la número dos del Gobierno y del partido, María Jesús Montero. La ministra de Hacienda ha trasladado un mensaje «rotundo» de apoyo a Sánchez: «Pedro, quédate». «Querido Pedro, hemos leído tu carta y preguntabas si merece la pena seguir. Pensamos que merece la pena seguir avanzando para mejorar el empleo, subir las pensiones y el salario mínimo, por la igualdad de las mujeres, por aumentar el gasto y becas en ciencia, seguir defendiendo la cultura frente a la censura y que los españoles vivan donde vivan tenga derecho a una vivienda», ha citado, entre otros ejemplos, de políticas puestas en marcha por el Gobierno.
Al respecto, ha comentado que este sábado varios medios de comunicación han publicado informaciones que demuestran que la «guerra sucia contra Pedro Sánchez y su familia empezó hace una década», en alusión a las supuestas indagaciones que puso en marcha el PP desde 2014 contra la familia del presidente del Gobierno. Ha denunciado por ello que «diez años después siguen los mismos, el PP y la ultraderecha» fabricando «lodo».
La pauta marcada por vicesecretaria general del PSOE, resumida en el apoyo a Sánchez y a su esposa y en el ataque a la oposición de «derecha y ultraderecha», ha sido seguida por el resto de miembros del comité que han ido interviniendo, a saber: el líder de los socialistas vascos, Eneko Andueza; el exministro de Sanidad y candidato a las elecciones catalanas, Salvador Illa; la mencionada ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera; el ministro de Transportes, Óscar Puente; y los presidentes de Asturias, Navarra y Castilla-La Mancha, Adrián Barbón, María Chivite y García-Page.
Este último ha subrayado la dimensión humana de la decisión de Sánchez: «Valoro que en la carta del secretario general y del presidente del Gobierno se duela. Prefiero que nuestros compañeros y dirigentes se duelan ante una acusación injusta, falsa, a que muestren indiferencia o saquen pecho», ha declarado. Además, García-Page ha animado a «no dejar las mentiras sin contestar»: «Siempre he reaccionado con la determinación de no dejar una sola calumnia, una sola insidia, una sola mentira sin contestar. Hay que contestarlas. Para contestar a todas las calumnias y esta campaña, vais a contar la dirección (del PSOE), y por supuesto Pedro, con todo nuestro apoyo, con el mío particularmente, porque no se puede consentir», ha afirmado.
Por su parte, Teresa Ribera, ha hecho referencia al calificativo que muchos ciudadanos dedican al presidente para afirmar: «Nos pueden llamar perros, porque somos fieles y leales defensores de los derechos, del futuro de los españoles, de nuestros jóvenes». La ministra también ha insistido en el ataque a la oposición al criticar el «acoso» a Sánchez y a su familia que, en su opinión, forma parte de «una estrategia de mentiras y de deshumanización» por parte de la derecha.
En parecidos términos se ha expresado el ministro de Transportes, Óscar Puente, que ha defendido que Sánchez no es «un usurpador ni un ocupa» y que «no les ha arrebatado [a la derecha] nada que les pertenezca». Por tanto ha pedido a la oposición que deje de «enfangar» y «emponzoñar la vida pública» cada vez que las urnas «les dan la espalda». En esta línea, ha pedido al presidente del Gobierno que no dimita, porque a su juicio eso sería «entregar su cabeza» a la derecha: «No puedes permitirlo, Pedro», ha señalado.
