Milei llama «corrupta» a la mujer de Sánchez en un acto de apoyo a Vox
Abascal tilda al PP de «derechita cobarde y estafadora» y la acusa de compartir «agenda globalista« con el PSOE en Europa
Javier Milei se convirtió en el protagonista de la última jornada del Viva 24 organizado por Vox en el Palacio Vistalegre. El presidente de Argentina subió al escenario recibiendo una ovación cerrada del auditorio, a la que respondió con su célebre: «¡Viva la libertad, carajo!». Agradeció a Santiago Abascal la invitación, así como su apoyo incondicional desde el primer día, cuando «estaba más sólo que Adán en el Día de la Madre». «Es grato hoy estar entre amigos», afirmó contraponiendo ese ambiente festivo con el hostil al que se suele enfrentar.
Es por eso que el peluca se desmelenó con un discurso en el que cargó con dureza contra el socialismo en general y el Gobierno de España en particular, tildando a la mujer de Pedro Sánchez de «corrupta».«No saben qué tipo de sociedad y país puede producir el socialismo y qué calaña de gente atornillada al poder y qué niveles de abuso puede llegar a generar; aun cuando tenga la mujer corrupta, se ensucia y se tome cinco días para pensarlo», dijo en referencia a Begoña Gómez.
En medio de una crisis diplomática con España, originada por unas palabras del ministro de Transportes, Óscar Puente, en la que deslizaba que Javier Milei era un drogadicto, el líder argentino ha replicado con dureza. Eran muy esperadas sus palabras a este respecto, sobre todo después de que este retara a su homólogo español a un cara a cara en una entrevista concedida a El Conservador.
En su intervención, el mandatario argentino cargó contra el socialismo, una «ideología que está pintada de una pátina altruista que esconde lo peor del ser humano». Aseveró que «abrirle la puerta la socialismo es invitar a la muerte» y que esta ideología ha sido «un fracaso» en lo económico, en lo social y en lo cultural. Animó a no dar el brazo a torcer ante la izquierda, ya que «cuando dejemos una rendija abierta nos atacarán desde una posición mejor para ellos».
El líder libertario aseguró que no le importa lo que opine la izquierda sobre él y lo que representa, y gritó un fuerte «basta» contra el odio, el resentimiento y la envidia que, a su juicio, esta esconde. Frente a ello, apeló a la defensa de la libertad, la vida y la propiedad, y quiso dar ánimo en lo que definió como una «gesta por salvar Occidente de la decadencia», asegurando que este está a tiempo de elegir «si persistir en la senda del fracaso o si quiere retomar el camino de la libertad».
Abascal, contra el PP
Santiago Abascal habló después de Javier Milei, también ante un público entregado. En un discurso ya en clave electoral, el presidente de Vox cargó duramente contra el «globalismo» que, en su opinión, abrazan tanto PSOE como PP, y que supone la «ruina económica, moral y espiritual de nuestros pueblos». Tras enumerar las contradicciones y corruptelas del Gobierno de España, el dirigente vasco se preguntó «¿cómo no les hemos echado a porrazos?».
«Porque hay una derechita cobarde y estafadora que un día hace como que se opone y al día siguiente las asume, que un día se manifiesta contra el Gobierno y luego mendiga cualquier pacto, tenga que ver con la financiación de las regiones o con la renovación del CGPJ, que un día y otro engaña a los españoles diciendo que defiende lo que no defiende, y que además se empeña en atacar a Vox», criticó Abascal en obvia referencia al PP, al que afeó votar junto al PSOE en Bruselas «el 90% de las veces». Una máxima que antes había pronunciado el cabeza de lista a las europeas Jorge Buxadé, por cuanto la campaña oscilará en torno a esta idea.
Antes de estos dos, la presidenta de Italia, Giorgia Meloni, se conectó en directo desde Roma y felicitó a los militantes y jóvenes de Vox porque «tenéis el coraje de no dejaros influenciar por el pensamiento dominante, habéis elegido luchar por aquello en lo que creéis, sois el único futuro posible de Europa, un continente cansado, sumiso, mimado, que pensó que podía intercambiar identidad por ideología». «Pero no todo está perdido», continuó, ya que Santiago Abascal «tiene un gran futuro y será decisivo tanto en Madrid como en Bruselas».
También intervinieron José Antonio Ortega Lara, fundador de Vox, Roger Severino, vicepresidente de la Heritage Foundation, Matt y Mercedes Schlapp, organizadores de la Conservative Political Action Conference (CPAC), José Antonio Kast, líder del Partido Republicano de Chile, André Ventura, diputados nacional en Portugal y presidente de Chega, Jorge Buxadé, candidato de VOX a la presidencia del Parlamento Europeo, Amichai Chikli, ministro israelí de la Diáspora y lucha contra el antisemitismo, Mateusz Morawiecki, ex primer ministro de Polonia, Marine Le Pen, diputada nacional de Francia y presidenta de Agrupación Nacional y Viktor Orban, primer ministro de Hungría. Este último telemáticamente.
Todo voces, en palabras de Santiago Abascal, «que forman un coro que proclama que hay otro mundo posible, cuando los pueblos sean dueños de su destino y las personas tengan las riendas de su vida». «Nos van a oír muy alto decir que hay otra Europa posible, que respete la soberanía de las naciones, que proteja sus fronteras, que explote sus recursos para no depender de potencias hostiles y no suicidarse con el Pacto Verde, que proteja a la familia y la vida desde su concepción a la muerte natural y que eche a patadas a quienes pretenden someterla», zanjó el presidente de Vox. El Viva 24 finalizó con el himno de España, y después los asistentes abandonaron rápido el recinto sin ser conscientes del impacto nacional e internacional que iban a tener las palabras de Javier Milei.