El Congreso aprueba la ley de paridad con el voto en contra de PP y Vox
El PP ha acusado al PSOE de «robar» al Senado la capacidad de vetar la senda de estabilidad del Gobierno
El pleno del Congreso ha aprobado este jueves, con el voto en contra del PP y Vox, la ley de representación paritaria que establece listas electorales «cremallera» y una cuota mínima del 40 % para cada sexo en altos cargos de empresas y en órganos de relevancia constitucional, aunque ese porcentaje podrá ser sobrepasado cuando el género predominante sea el femenino.
El proyecto de ley orgánica ha superado el trámite con 177 votos a favor frente a 171 en contra (PP, Vox y UPN), con lo que pasa al Senado con la previsión de que luego vuelva al Congreso para su aprobación definitiva el 23 de julio.
La ley fue enmendada en comisión para que la cuota mínima no se aplique a los hombres, «un error de bulto gravísimo» para la portavoz de Podemos, Ione Belarra, que negoció con el PSOE esta modificación a cambio de su apoyo al texto.
Apoyada por ERC, Sumar y EH Bildu
Junto con Podemos, han votado a favor ERC, Sumar y EH Bildu, aunque las tres formaciones han criticado una ley que se ocupa de romper «techos de cristal», pero sin avanzar en la limpieza de los «suelos pegajosos» que atrapan a las mujeres en los cuidados y la precariedad laboral de sectores de actividad feminizados.
«No podemos quedarnos en una mirada elitista y olvidar al resto de las mujeres», ha dicho la portavoz de Sumar, Esther Gil de Reboleño, que ha pedido mayores derechos laborales que avancen en la conciliación.
«Tener más mujeres en los consejos de administración no siempre mejora la vida del resto de las mujeres», ha afirmado la portavoz de EH Bildu, Isabel Pozueta, que ha incidido en que los cuidados requieren de un planteamiento «de colectividad y comunidad», además de la corresponsabilidad de los hombres.
La portavoz de ERC, Pilar Vallugera, ha reclamado sanciones que obliguen al cumplimiento efectivo de la ley y ha echado en falta que la paridad se extienda a los órganos de dirección de los partidos políticos.
«Estamos hartas de defender cuotas, pero las cuotas nos han traído hasta aquí», ha dicho la portavoz de Junts, Pilar Calvo, que se ha felicitado por los avances que han logrado introducir en el texto a favor de las deportistas profesionales en relación con el embarazo, nacimiento o adopción de hijos y conciliación, y frente al acoso.
La ministra de Igualdad defiende una ley histórica
La ministra de Igualdad, Ana Redondo, se ha defendido de las críticas diciendo que el Gobierno también lucha contra «los suelos pegajosos» subiendo el salario mínimo interprofesional (SMI) y destinando recursos para avanzar en la corresponsabilidad real.
Redondo ha destacado que la ley de paridad «remueve una injusticia histórica» que es la falta real de oportunidades para que las mujeres lleguen a puestos de responsabilidad gracias a sus méritos y capacidades.
«Removemos techos de cristal para que las niñas tengan referentes donde antes no existían», ha argumentado la ministra, que ha incidido en la importancia de avanzar en la igualdad en un momento en que la ola de conservadurismo que recorre Europa hace temer una regresión de los derechos de las mujeres.
El PP rechaza una ley «que roba al Senado»
El portavoz del PP, Jaime de los Santos, ha acusado al PSOE de «instrumentalizar» una norma a favor de la paridad -que emana de una directiva promovida por el PP europeo- «para robar al Senado» su capacidad de vetar la senda de estabilidad del Gobierno.
Durante el trámite en comisión, el PSOE y Sumar han introducido una enmienda que implica que, si la Cámara Alta rechaza los objetivos de déficit y deuda, estos vuelven al Congreso para su aprobación definitiva por mayoría simple, en lugar de devolverlos al Gobierno para que elabore unos nuevos, como ocurre ahora.
De los Santos ha advertido a las diputadas que integran la mesa de la Comisión de Igualdad de que podrían haber incurrido en un posible delito de prevaricación de acuerdo con la jurisprudencia del Constitucional, que obliga a que toda enmienda parcial deba tener una carácter subsidiario respecto al texto enmendado.
La portavoz del PSOE, Andrea Fernández, le ha afeado su «bravuconería» y le ha pedido «por decoro y respeto» a la Cámara que no «amenazara» a sus compañeras.
Frente a la mayoría de la Cámara que se ha felicitado por el avance que supone la ley de paridad, la portavoz de Vox, Rocío Aguirre, la ha rechazado por innecesaria y por «humillar y denigrar» a las mujeres «que hoy ya pueden conseguir lo que quieran con su mérito y esfuerzo».