Sumar presiente el regreso de Pablo Iglesias a la primera línea si hay un adelanto electoral
La coalición observa con inquietud el protagonismo que Podemos está otorgándole en sus comparecencias públicas
Un fantasma recorre Sumar: la vuelta de Pablo Iglesias «a la primera línea de la política». Diferentes fuentes de la coalición que lidera Yolanda Díaz revelan que se va difundiendo la tesis de que el exlíder de Podemos y exvicepresidente del Gobierno está barajando un «regreso» si la legislatura descarrila por los casos de corrupción y Pedro Sánchez acaba adelantando los comicios. Las fuentes consultadas afirman desconocer en qué condición regresaría Iglesias, si simplemente como apoyo a Irene Montero, como cabeza de cartel o reforzando su papel como referente (también mediático) del partido. En el círculo cercano a Díaz se estudian dos opciones, y de las dos, una no descarta el regreso «al ruedo» de Iglesias. «Puede pasar de todo», creen en Sumar y en Podemos.
Hay elementos que están alimentando todo tipo de sospechas sobre el futuro de Iglesias. En primer lugar, el resultado modesto de su proyecto mediático. Su televisión, el Canal Red, tarda en despegar, según las fuentes consultadas, que reconocen que programas como La Base sí tienen un impacto proporcionado al público al que se dirige, pero que globalmente la idea del exlíder morado de crear algo parecido a un canal de referencia para toda la izquierda va más lento de lo esperado. Las fuentes consultadas aseguran que el Canal Red cuenta con un número aceptable de suscriptores (un total de 700.000, sumando todos los canales), pero se desconoce el balance económico de todo el proyecto.
De ahí la proyección que Iglesias ha ido buscando en los canales de televisión tradicionales, dicen en Sumar. Primero en el hemisferio mediático catalán, donde siempre ha gozado de buenos contactos, y ahora en TVE. El exlíder morado colabora en dos programas de TVE y en ambos actúa más como portavoz de Podemos que como analista desligado de su partido. Estas participaciones sirven a Podemos para rebotar vídeos recortados en las redes sociales, donde la guerrilla digital morada no para de impulsarle. «Incluso por encima de Irene», detectan las fuentes consultadas.
Dos indicios
El segundo indicio que asusta en Sumar atañe a lo ocurrido el pasado fin de semana, en los encuentros con la militancia de la Uni de Otoño. El año pasado Iglesias intervino casi como un invitado externo, aunque lanzó su anatema contra Sumar, que desembocó en la escisión parlamentaria de diciembre. Esta vez, sin embargo, Iglesias volvió a participar casi como el líder o referente del partido, reflexionan en el espacio de Yolanda Díaz. Todos estos elementos están obligando a los miembros de la coalición de Sumar a poner sobre la mesa una posibilidad que consideran factible: la vuelta de Pablo Iglesias.
Sumar y Podemos han compartido durante años cuadros y trabajadores, y entre las dos orillas todavía existe cierto intercambio de información, aunque parcial y discreta. De ahí que muchos se interrogan sobre si Iglesias estaría dispuesto a regresar a la primera línea de la política si, por ejemplo, la legislatura descarrila y Sánchez tiene que adelantar los comicios. Este sería el mejor escenario para un regreso casi «obligado» de Iglesias a la primera línea de la política, sostienen. «Irene Montero no es querida», esgrimen en los partidos aliados de Sumar, para justificar sus temores ante una vuelta del exlíder.
Los morados ya hablan de «fin de ciclo» y han lanzado un aviso al Gobierno de que su apoyo a los presupuestos no saldrá gratis. Sánchez deberá romper relaciones con Israel y topar los alquileres por ley si quiere el sí de Podemos. Es un precio muy alto que revelaría la tentación de volver al enfrentamiento con el PSOE, que recuerda más los comienzos de 2014 y 2015 que la fase de la «alerta antifascista» de 2018. Es una clara salida de tonos de Podemos ante los casos de corrupción que afectan al Gobierno, que los morados no excluyen que acaben salpicando al presidente.
Doble venganza
Sea como fuere, los temores que sobrevuelan Sumar han llegado también al PSOE, según afirman las fuentes consultadas. Esto significa que en el lado socialista del Gobierno también miran con atención el protagonismo que está ganando Iglesias en el comienzo del curso político. Y lo que es más importante, en Podemos casi nadie se atreve a negar con contundencia que ese escenario esté cerrado.
Hasta ahora los morados han reivindicado la figura de Irene Montero como cabeza de lista en el caso de elecciones. En primer lugar, para ejecutar su venganza personal con Yolanda Díaz, que le excluyó de las listas de 2023, y en segundo lugar, porque el resultado de las europeas permitió a Podemos mantenerse con vida, y eso fue «gracias a Irene», dicen en su partido. Sin embargo, también en Podemos deslizan que «puede pasar de todo».
¿Qué significa eso exactamente? Que el plan A de su partido sigue siendo llevar a Irene Montero de vuelta a España como candidata electoral. Pero que si las elecciones se adelantan, el partido podría modificar su estrategia. De ahí que muchas fuentes consultadas en el partido morado creen que un regreso de Iglesias a la primera línea sería «un golpe de efecto».
Iglesias es un político que se ha acostumbrado a sorprender tanto dentro como fuera de su formación. Y aunque sus compañeros sostienen que le ven «centrado» en su proyecto mediático, tampoco excluyen que baraje regresar. La épica siempre ha formado parte de la historia de Podemos, y este es otro elemento a tener en cuenta en la ecuación. Así como la voluntad de venganza de Podemos, donde ya no señalan únicamente a Yolanda Díaz, sino también a Pedro Sánchez, con quien tienen más de una cuenta pendiente.