Cientos de feministas se rebelan contra el Ministerio de Igualdad por promover el velo
Un manifiesto carga contra la «hipocresía» del gabinete al defender un símbolo de «sumisión de la mujer»

Campaña del Gobierno que muestra a una mujer con el velo islámico. | Ministerio de Igualdad
De un tiempo a esta parte, el feminismo ha abrazado la causa antirracista como uno de sus ejes pivotales. En este marco, el Ministerio de Igualdad, con el pretexto de combatir el racismo, ha impulsado distintas campañas poniendo en valor el velo islámico como un elemento cultural a respetar. Sin embargo, centenares de feministas clásicas consideran que se trata de un símbolo del machismo más atroz y se han rebelado contra el gabinete de Ana Redondo.
La experta en violencia de género Elena del Pilar Ramallo y la activista marroquí Zoubida Boughaba Maleem han promovido un manifiesto –En España, mujeres libres, mujeres sin velo– que ya cuenta con centenares de adhesiones por parte de feministas. El manifiesto denuncia «las campañas del Ministerio de Igualdad que promueven y defienden el uso del velo»: «Esta postura constituye una traición a los principios fundamentales que deben guiar a una entidad pública encargada de luchar por la igualdad, la libertad y los derechos de las mujeres».
«El velo, lejos de ser un accesorio inocuo, ha simbolizado históricamente la sumisión de la mujer a la religión y al hombre», dice el manifiesto, que añade: «Es intolerable que este Gobierno, mientras denuncia la imposición del velo en otros países, lo defienda en España bajo el pretexto de la diversidad cultural. Este doble rasero evidencia una hipocresía flagrante que no solo traiciona el principio de coherencia, sino que también atenta contra los derechos de todas las mujeres».
Las feministas consideran que «la normalización institucional de un símbolo que perpetúa estructuras patriarcales socava la lucha por la verdadera libertad», y que «la diversidad debe ser una celebración de la igualdad, no una excusa para perpetuar desigualdades». El manifiesto ha contado con 137,7 mil visualizaciones y adhesiones de feministas relevantes como Lucía Etxebarria o Sonia Sierra.
Antirracismo
De un tiempo a esta parte, el feminismo ha abrazado el antirracismo como uno de sus ejes fundamentales. Por eso, el Ministerio de Igualdad, pese al clamor de los expertos, se niega a admitir que la inmigración descontrolada procedente de África es una de las causas que explica el auge de la violencia sexual contra las mujeres.
La ministra, preguntada por la nacionalidad extranjera de la mitad de los feminicidas, sostuvo que «en ningún caso podemos hacer esa equivalencia, que ahonda en otro problema, que es la xenofobia». «El problema del machismo es global, el patriarcado es la primera globalización», abundó.
El pasado mes de septiembre, Ana Redondo presentó la campaña institucional No mires hacia otro lado, dirigida a sensibilizar contra el racismo, donde se hizo apología del uso del velo. Una apología que también hizo Irene Montero en su época como ministra, cuando lanzó una campaña –Sí es racismo– en la que criticaba que, en su opinión, hubiera empresas que no contrataran mujeres con velo: «Yo no soy racista, pero te niegas a contratar a una mujer con velo».
Feministas contra el velo
No es la primera vez que esta cuestión genera revuelo. En 2021, el Consejo de Europa se vio obligado a retirar una campaña contra la discriminación después de la polémica que suscitaron en Francia imágenes y mensajes que ponían en valor el velo islámico y que recibieron diversas condenas políticas.
La campaña, cofinanciada por la Unión Europea, fue lanzada con el objetivo de promocionar la diversidad a través de un programa del Consejo de Europa para favorecer la integración y la lucha contra las discriminaciones. Incluía retratos de mujeres en las que la mitad iba con velo islámico y la otra mitad, con otro tipo de indumentaria, acompañados del mensaje «Beauty is in diversity as freedom is in hijab» (La belleza está en la diversidad como la libertad está en el velo).