Guerra total en SALF: dos de sus eurodiputados se plantean demandar a Alvise Pérez
Diego Solier y Nora Junco buscan abogado ante las acusaciones de su líder de venderse al ‘lobby’ armamentístico

Luis Alvise Pérez (c) junto a los eurodiputados de SALF, Diego Solier (d) y Nora Junco (i). | Efe
Sin haber cumplido un año juntos en el Parlamento Europeo, los tres eurodiputados de Se Acabó la Fiesta (SALF) dan claros síntomas de ruptura. Su líder, Luis ‘Alvise’ Pérez, se puede encontrar con un nuevo frente judicial. Y en esta ocasión, del frente más inesperado: sus dos compañeros del ticket electoral, Nora Junco y Diego Solier, empezaron este lunes a buscar abogado para presentar una demanda contra su jefe político por «manchar su nombre» con sus últimas acusaciones de haberse vendido al lobby del rearme armamentístico, según explicaron fuentes cercanas a Junco y Solier a THE OBJECTIVE.
Ambos eurodiputados se encontraron este lunes con la sorpresa de las declaraciones de Alvise en el podcast de Eclécticos Worldwide, en las que este último señaló que los tres eurodiputados de SALF venían votando lo mismo en Estrasburgo… hasta el último pleno. «Mis otros dos eurodiputados, que son Diego y Nora, han votado en contra en casi todas menos en las últimas. Yo les he pedido explicaciones de por qué en las últimas ellos han votado a favor», indicó. La divergencia se focalizó en un informe sobre el rearme europeo para hacer frente a Rusia.
«Yo he votado en contra en absolutamente todas porque me parece que el rearme es criminal y porque, si nos tenemos que rearmar, que sea como gobiernos nacionales», dejó claro el político antisistema, quien añadió a renglón seguido que «no era una acusación» contra sus compañeros de partido, quienes desde enero se integraron en el grupo de los Conservadores y Reformistas (ECR) que lidera la italiana Georgia Meloni, aunque deslizó la posibilidad de que se hubieran dejado influir por algún lobby.
«Yo no sé si ha venido un lobby por detrás y me ha comprado un eurodiputado mío. ¿Sabéis el poder que es el lobby europeo? ¿Sabéis lo fácil que es que te compren? Viene un lobby armamentístico a cenar contigo y te deja un maletín al lado y se levanta y se va. Y si tú no le dices: ‘Oye, que se te ha olvidado aquí el maletín’, se asume que vas a votar lo que te han dicho, porque en ese maletín hay un kilo», dijo refiriéndose a una mordida de un millón de euros.
«No entiendo ese afán por acusarles de recibir un maletín con un millón de euros. Ellos le dieron las explicaciones que les pidió sobre las votaciones del desarme», lamentan las citadas fuentes, quienes admiten que no ha habido diferencias de peso en los últimos meses, sobre todo desde que Junco y Solier entraron en ECR. El ingreso de Alvise en aquel momento quedó congelado por las «investigaciones policiales» que le han abierto varios frentes con la Justicia. Y ante la acumulación de casos, no parece que vaya a salir del grupo de los no adscritos en mucho tiempo.
El líder de SALF llegó a confesar que no sabía por qué ellos votaron una cosa y él otra, aunque las citadas fuentes discrepan totalmente de ello, ya que en vísperas de la votación se lo explicaron personalmente y le insistieron en que votara como ECR. Alvise no se dio por aludido y en la citada entrevista sugirió la posibilidad de que sus compañeros de SALF pudieran haberse «vendido» a un grupo de interés para convertirse en «lobos que se disfrazan de ardillas».
«Si yo he hecho campaña electoral por toda España diciendo no y tú votas a favor, estás traicionando a 800.000 españoles. Perseguidles y pedirles explicaciones. Y si tenéis que gritarle en un bar que eres un criminal, que eres un corrupto y que has votado a favor del rearme, tenéis que hacerlo vosotros, porque no lo puedo hacer yo, lo tiene que hacer la gente que nos ha votado», aseguró en el podcast. Unas declaraciones que han molestado sobremanera a Junco y Solier por el tono amenazante. De ahí que ambos estén estudiando acciones legales contra Alvise.
Esta es la primera vez en la que afloran divergencias en público, aunque THE OBJECTIVE desveló en septiembre que Junco envió un correo electrónico a dos eurodiputados del Partido Popular Europeo (PPE) y un liberal de Renew Europe (RE), en el que se sumaba a su iniciativa parlamentaria en el que se pedía a los países de la UE que levantasen todas las restricciones al uso en territorio ruso de las armas suministradas a Ucrania (leer abajo).

En la práctica, suponía el apoyo a que el Gobierno de Zelenski utilizase armamento aliado en el interior de Rusia y un giro en la posición política que había tenido SALF en esa guerra y sus ataques a Kiev. Por ejemplo, el 17 de junio del año pasado, una semana después de los comicios, el líder de la formación antisistema indicó en una entrevista en El País que, a diferencia de Vox, no era «sumiso» de ningún país extranjero. «Considero que España no puede estar al albur de los intereses de Estados Unidos, Rusia, China o Israel. Yo jamás me habría levantado a ovacionar al señor [Volodímir] Zelenski, presidente de Ucrania, con uno de los gobiernos más corruptos de la historia reciente de Occidente», dijo sobre el presidente ucraniano.
Luego, en julio, los tres representantes de SALF votaron en contra de una resolución de apoyo a Ucrania que obtuvo un amplísimo apoyo con 495 votos a favor, 137 en contra y 47 abstenciones. Alvise, Junco y Solier fueron los únicos eurodiputados españoles -junto a los dos de Podemos- que se posicionaron en el ‘no’, de ahí que la iniciativa de la segunda unas semanas después sorprendiese en los pasillos de la Eurocámara.
Finalmente, la carta de Junco fue enviada fuera de plazo, pues los promotores de la misma pidieron a sus compañeros del Parlamento Europeo que se adhirieran a la carta antes del 6 de septiembre, por lo que su apoyo no quedó registrado de forma oficial y esa aparente divergencia interna dentro de SALF no afloró en aquel momento. Ahora, el rearme europeo sí que ha roto las costuras.