La Iglesia española pide superar «el error» de definir al Papa como progresista o conservador
«Son categorías que sirven para la política, pero no para la Iglesia Católica. El Papa no cambia la doctrina»

El papa Francisco en una comida con pobres y sin techo. | Stefano Costantino (Zuma Press)
La Iglesia Católica inicia este lunes su semana decisiva para la elección del nuevo Papa. Las congregaciones religiosas celebran sus últimas reuniones, dos este lunes en vez de una, como ha sido habitual desde el fallecimiento de Francisco, para ir concretando el perfil del sucesor de Bergoglio. Los cardenales afrontan una disyuntiva que se ha instalado en la ciudadanía: ¿será un papa conservador o progresista? La Conferencia Episcopal Española apuesta por superar lo que considera un «error», según fuentes consultadas por THE OBJECTIVE, como ha sido el de tildar ideológicamente al sucesor de Pedro.
En la Capilla Sixtina se preparan los últimos detalles para que este miércoles, a las cinco y media de la tarde, comience el cónclave. Mientras llega este esperado momento, así como la decisión final que adopten los 133 cardenales que elegirán al nuevo Papa, se suceden las apuestas sobre quién será el elegido. Para algunos, la decisión será rápida: «El jueves o el viernes podríamos saber el elegido»; para otros, «será más arduo llegar al consenso porque partimos de cero, no hay candidatos previos, como sucedió tras Benedicto XVI, ya que Bergoglio quedó segundo en la votación de Ratzinger».
En busca de este consenso que permita elegir al Papa en alguna de las cuatro votaciones, dos por la mañana y dos por la tarde, del jueves o viernes, el Colegio de Cardenales, reunido diariamente en congregaciones religiosas, ha prolongado estos encuentros hasta el martes, señal de que necesitan más tiempo para analizar el perfil del nuevo Papa. El hecho de que los cardenales tengan un origen muy diverso -algunos ni se conocen- exige tiempo para relacionarse.
La Iglesia Católica afronta este reto bajo el legado que ha dejado Francisco, para algunos con un perfil menos conservador y que ha dejado abierto un debate sobre si el nuevo Papa debe seguir su estela o, por el contrario, mantenerse en una línea más tradicional. Las fuentes de la Conferencia Episcopal Española y otras cercanas a los cardenales que van a participar en la elección, consultadas por este periódico, insisten en que es una disyuntiva que no se corresponde con la realidad de la Iglesia.
«La realidad es que intentar cuajar un papa como conservador o progresista es un error, son categorías que sirven para la política, pero que no sirven para la Iglesia. El espectro en el que se encuadran las cosas en la conversación política es muy pequeño para lo que representa el Papa», aseguran fuentes de la Conferencia Episcopal Española. «Cuando se dice, es conservador o progresista, ¿en qué? El Papa no cambia la doctrina de la Iglesia, todo lo que dice la doctrina de la Iglesia lo dice el Papa, sea el que sea».
Otra cosa, subraya esta fuente, es «las formas, el modo de ser, que en el papa Francisco, por su condición de argentino y de jesuita, es un modo de ser que nada tiene que ver con ser conservador o progresista, sino con su condición vital, depende de lo que ha estudiado, con quién ha vivido, a quién ha tratado. Su itinerario vital tiene unas formas de hacer u otras».
«Ser fiel al Evangelio»
Esta percepción también la tiene el portavoz de uno de los cardenales españoles que participa en el cónclave, que señala que «lo que hay que valorar en el Cónclave no está entre unos y otros, entre continuistas y no, sino sobre la base de la fidelidad al Evangelio. Escuchar el Espíritu y al final ser lo más fieles posible al Evangelio, esta es la clave para surfear la idea de controversia que se está sugiriendo entre los continuistas de Francisco, los que abogan por ser algo más tradicionalistas e incluso dicen retrógrados. Aquí la cuestión es dialogar y, basándose en esa Iglesia sinodal, llegar a encontrar a ese candidato que consiga sumar los dos tercios».
Esta fuente apunta que «construimos imágenes que a menudo no se corresponden con la realidad, mitos de este es el progre y este es el retrógrado… Qué va, qué va, eso no es así, al final hablamos de una misma Iglesia, de trabajar de una manera sinodal, escuchando a todo el pueblo de Dios, no solo al clero, sino también a los laicos». En este sentido, sí que admite que «el camino iniciado por el Papa Francisco va a seguir, es irreversible».