Vox pide prohibir en España la fiesta del cordero por ser un «retroceso cultural»
El partido presenta una iniciativa para «proteger las costumbres propias y no importas fiestas ajenas»

Varios corderos durante el Eid al-Adha, la Pascua del Cordero, en Ceuta (España). | Europa Press
La fiesta musulmana del cordero, en la que miles de estos animales son sacrificados bajo el rito Halal, se celebra este viernes en nuestro país. Con este pretexto, Vox ha presentado en todos los ayuntamientos, parlamentos regionales, Congreso y Senado una iniciativa para instar al Gobierno nacional y/o autonómico a prohibir esta celebración pública por suponer un «retroceso cultural» en España. La formación conservadora, además, ha lanzado una campaña de recogida de firmas para «proteger las costumbres propias y no importar fiestas ajenas».
El partido que preside Santiago Abascal denuncia en esta acción coordinada que, «en nombre de una llamada convivencia, se promueve, más allá de la tolerancia, la erosión consciente de nuestro legado, lo que supone una rendición cultural». También señala que «estas prácticas importadas que se nos exige acoger sin reservas en nuestro país, son objeto de restricciones o prohibiciones en sus propios lugares de origen».
Y es que este año el Gobierno de Marruecos ha limitado la celebración de esta fiesta, eliminando el sacrificio de la Eid al-Adha debido a los seis años de sequía que sufre el país alauita y el altísimo precio de la carne de este animal, que no deja de disminuir. De este modo, Mohammed VI ha aconsejado a sus súbditos que, en vez de comprar corderos, se vuelquen en el aspecto espiritual, con oración, ayuno y asistencia a las mezquitas. Sin embargo, estas restricciones no han llegado a España.
«Marruecos restringe sus propias costumbres en su territorio, mientras que en España se promueve su implantación, incluso a costa de vulnerar nuestras leyes, comprometer la seguridad y erosionar nuestras tradiciones», sostiene Vox en la iniciativa, que aboga por «no tolerar lo que ellos no consienten en su propio suelo», ya que eso constituye «una muestra alarmante de claudicación cultural y de sumisión ideológica».
«Las costumbres y tradiciones gozan de gran arraigo en España y configuran el ethos del pueblo, forman parte de nuestra identidad y deben ser protegidas. La propia Constitución Española dispone expresamente que la Nación española, en uso de su soberanía, proclama su voluntad de proteger a todo los españoles sus culturas y tradiciones. El principio de Estado de derecho garantiza que sea soberana la ley y no la voluntad arbitraria de una minoría, la cual, no olvidemos, tiene la obligación de respetar el patrimonio material y espiritual del país que la acoge», zanja la iniciativa.
Por todo lo expuesto, la formación que lidera Abascal solicita «prohibir la celebración pública de la fiesta del cordero y «otras conmemoraciones similares ajenas a nuestras tradiciones, por tratarse de prácticas incompatibles con la identidad y usos y costumbres de la nación española», así como «impedir la consolidación de prácticas culturales foráneas que no forman parte de la tradición española y que inciden sobre la cohesión social, generando tensiones y conflictos internos».
La fiesta del cordero
La Eid al-Adha conmemora la obediencia de Abraham a Yahvé, quien le premió con un cordero para sacrificarlo; por ello, recibe también el nombre de Pascua del Cordero. Se realiza unos 70 días después del fin del Ramadán. Este año, que para los musulmanes es el 1446 de su calendario, se celebrará en España el 6 de junio y en Marruecos el 7. El acto más importante consiste en el sacrificio de un cordero o una vaca, que luego se despieza y cuyos trozos se reparten entre los familiares y los pobres.
Este día deja imágenes de animales despedazados en las calles y charcos de sangre. La muerte de los animales se realiza mediante el rito halal, por degüello y sin aturdimiento. A fin de contentar a la creciente comunidad musulmana en España, diversas Administraciones, como ayuntamientos vascos, ofrecen a los musulmanes pinchos de cordero. En Ceuta, además, se habilitan mataderos móviles.